A distancia Markitos Toys

Capítulo 187

Voten pls
Narra Markitos:
Markitos: *Me tome una foto con el guardia y me fui de ahí, creo que ya no hay nada que hacer, Lore ya tomo una decisión y definitivamente no me piensa escuchar, me merezco lo que me esta pasando, no me canso de decirme que soy un pendejo, un verdadero pendejo que dejo ir al amor de su vida por una estupidez, no tenia otra opción mas que dejar que Lore siguiera con su vida, al parecer ya había encontrado a su compañero de vida, no había pasado mas que una semana y ya vivían juntos, me fui al aeropuerto y compre un boleto para Culiacán, el vuelo salía en dos horas, no era mucho así que me esperaría en el aeropuerto, aproveche para comprar algo que comer, no traía nada el estomago y después andaría con la gastritis a todo lo qe da*

Narra Lore:
Lore: *Jose Juan y yo terminamos de comer y fuimos a dar una vuelta a la plaza comercial, compre algunas outfits que usaría para mi próximo trabajo, regresamos a su depa y yo me adelante porque el guardia paro a Jose Juan, me fui al cuarto donde dormía yo y saque la ropa de las bolsas para ponerlas en ganchos, aproveche que Jose Juan no estaba para hablar con mis papas, desde ayer que no me reportaba con ellos, también hable un rato con mi hermano, según el se vendría unos días a Guadalajara porque no le gustaba que estuviera viviendo sola con Jose Juan, a Luciano jamas se le quitara lo tóxico, me platico que según Mayve ella tampoco le hablaba a Marco, le pedí de favor que evitara mencionarlo en nuestras platicas, mas ahorita que aun me duele lo que me hizo, que necesidad de haberme engañado, era mas fácil que terminara conmigo primero y ya después de revolcaba con cuanta vieja quisiera, pero porque hacerlo cuando estaba en una relación, según el muy enamorado, si tan enamorado estuviera no hubiera hecho eso, ya estamos grandes como para hablar claros, yo hubiera entendido que el ya no estaba gusto con nuestra relación, el hecho de su engaño me hacia dudar de todas las veces que me llegaban chismes y que yo le creía a el que solo eran chismes*