Weird

Capítulo 1: Primer día

Narra Charlotte

Desperté esta mañana alrededor de las 6:30. La emoción de el primer día de clases no me había dejado dormir lo habitual, así que me quedé mirando el techo por media hora hasta que sonara el reloj despertador.

Me levanté y seguí mi rutina diaria. Primero al baño, a cepillarme los dientes y darme una ducha. Luego al armario a tomar un par de pantalones holgados, una blusa de gris azulado cubierta por un sueter color azúl marina con una capucha, y unas zapatillas, unas Converse. Después a la cocina a darle los buenos días a mi mamá y a tomar un plato de tostadas con mantequilla. No podía darle los buenos días a mi padre porque él es más de dormir hasta tarde.

Me llegó un mensaje a las 7:40 y era de April.

"Hey Lottie!, ¿Crees que podrías pasar por mí antes de ir a la escuela?, es que en realidad no quiero ir sola..."

Me pareció una buena idea, ya que yo tampoco tenía el valor de ir sola.

-Mamá, ¿Podemos pasar por April antes de ir a la escuela? -Pregunté

-Si, creo que no será problema.

Después de recibir su respuesta le envié un mensaje de vuelta a April:

"Paso por tí en 15"

Después de 20 minutos ya había recogido a April y nos encontrabamos corriendo por el interminable estacionamiento para estudiantes.

Entramos a la escuela y nos anotamos en las clases, que eran casi los mismos horarios.

A mí me tocaba primero química y a April le tocaba Matemáticas.

Nos despedimos en los pasillos y yo me quedé rondando por ahí tratando de encontrar el salón correcto. No me preocupaba por la hora ya que mi primera clase comenzaba a las 8:45 y eran las 8:20.

Mientras divagaba por ahí, tropecé con una chica peliroja con cabello en ondas que llevaba una minifalda fuccia y una blusa ajustada con un escote profundo.

-Disculpa -Le dije -Podrías decirme dónde queda el... -Me interrumpió 

-Agh! -Gritó _Ten cuidado, me estás pisando!

Miré hacia abajo y, de hecho, la estaba pisando.

Quité mi pie inmediatamente.

-Lo siento, yo no... 

-Agh! ¡Ya cállate! -Gritó de nuevp y se retiró haciendo ruido con sus tacones y meneando su cabello.

"Woah" pensé. "Si las personas va a ser así de groseras, será mejor que vaya endureciendo mi carácter".

Más adelante me encontré con un chico bajito de ojos claros y le pregunté dónde estaba el salón del profesor McAndrew, y él amablemente me dio las indicaciones. Le di las gracias y seguí todas las instrucciones hasta llegar al salón.

Entré y al parecer había llegado muy temprano, ya que sólo habían dos estudiantes más y el profesor no llegaba aún.

Cinco minutos después empezaron a llegar las personas, entre ellas, la peliroja cortante que había pisado, quien se dirigía hacia mí con una sonrisa maliciosa.

-¿Te gusta este asiento? -Preguntó

-Sí

-Pues vas a tener que dármelo.

La miré confusa y ella dijo:

-¿Qué esperas? ¡Muévete!

-Oblígame -Respondí.