Después de que todo el mundo hubiera desaparecido, una chica de ojos grises y piel clara salió de su escondite y observó a su alrededor dándose cuenta de que no estaba sola, 3 chicas más estaban mirándose entre ellas. Empezó a acercarse a una chica como de 14 años, pelo marrón oscuro, ondulado y largo hasta los hombros; ojos también marrón oscuro, piel aceitunada y que medía más o menos unos 160 cm. La chica la miró durante un rato, y caminó hacia ella también.
-Hola... - susurró ella.
-Hola, ¿cómo te llamas? Yo soy Malia - preguntó la de pelo ondulado extendiendo su mano derecha hacia la de pelo marrón claro.
-Yo soy Claire. ¿Qué coño acaba de pasar?
-Ni idea, si quieres podemos preguntar a la chica esa. - dijo Malia señalando a una chica como de 17 años que estaba en la otra esquina de la habitación, mirando a un punto fijo.
-Me parece perfecto - accedió Claire caminando junto con la de piel aceitunada hacia la fémina.
En cuanto llegaron, la pelinegra se giró para mirarlas.
-Hola, ¿queréis algo niñas? Estoy intentando pensar que ha pasado aquí, así que si no tenéis información que me pueda ayudar, me podéis hacer un gran favor e ir a tranquilizar a la niña de allí - dijo señalando a una niña de aproximadamente 8 años que estaba a lo lejos llorando - Gracias. - finalizó la adolescente sarcásticamente, mientras que se iba hacia el sitio dónde habían empezado las desapariciones.
-¡Qué maleducada! - exclamó Claire mientras se aproximaban a la chiquilla.
La pequeña de 8 años, se secó las lágrimas con el dorso de la mano, y se levantó del suelo. Malia y Claire se agacharon un poco para estar a su altura.
-Hola, pequeña, yo soy Malia y ella es Claire, se qué tienes miedo, pero nosotras te ayudaremos.
-Yo soy Valeria. ¿Acaso sabéis a dónde se ha ido todo el mundo? - preguntó inocentemente la niña.
-No, pero tú tranquila, lo averiguaremos, y recuperaremos a los desaparecidos. - dijo la de hebras negras, acercándose hacia Valeria y sentándose a su lado mientras le dedicaba a la niña una bonita sonrisa.- A ver, dejad que me presente, me llamo Paulette, tengo 17 años, y la razón por la qué os he tratado un poquito mal, es porque estoy intentado solucionar todo esto, ¿entendido? Ahora lo primero que deberíamos hacer es presentarnos, ¿no creéis?
-Vale, yo empiezo, me llamo Valeria, tengo 8 años, tengo una hermana pequeña de 7 meses y vivo con ella y mi padre en una casa a 45 minutos de aquí.
-Encantada Valeria - dijo Paulette.
-Yo soy Malia, tengo 14 años y tengo un hermano mayor; y lo demás no lo pienso decir porque no estoy muy segura si confiar en vosotras aún, así que...
-Vale - dijo Claire alargando claramente la última vocal.- Me llamo Claire, también tengo 14 años y vivo con mis tíos y mis primos en una granja a 10 minutos de aquí.
-Un placer conoceros a ambas - dijo la mayor poniéndose de pie - Yo creo que lo que deberíamos hacer ahora, sería ir a buscar a más supervivientes, porque puede que necesiten nuestra ayuda.
Cogieron sus mochilas y un par de cosas que les podría ser de utilidad en el viaje, y salieron del centro.
-Deberíamos ir por la carretera, es posible que haya habido algún accidente y si alguien a sobrevivido, lo más seguro es que necesite ayuda -sugirió Malia.
-Vale, perfecto. - dijo Paulette mientras se dirigía hacia la carretera del norte. Las demás la siguieron de cerca.
La calle estaba hecha un desastre, coches estrellados, árboles que se habían incendiado por la gasolina de algunos motores que se habían roto al accidentarse, todo tipo de objetos tirados por el suelo... Pero lo más importantes para las chicas, no estaba, no había nada que pudiera darles una pista de que estaba pasando, y menos, alguien al que pudieran ayudar. Paulette suspiró con desesperación y abrió la boca para hablar, pero al ver algo, o más bien alguien, atrapado debajo de uno de los coches, salió disparada hacia esa persona sin decirle nada a sus acompañantes.
-¡¿Pero qué...?! - exclamó Malia antes de darse cuenta de que estaba pasando, y agarrar a las otras de las muñecas, antes de empezar a correr hacia el otro superviviente.
En cuanto llegaron, ayudaron a Paulette a sacar a una chica de 15 años de debajo del Toyota que tenía encima.
-¿Está viva? - preguntó la más pequeña del grupo, mientras Claire comprobaba si tenía pulso.
-Si, afortunadamente. - respondió Claire.
Las chicas suspiraron de alivió. Paulette se levantó del suelo y cargó a la chica de pelo rizado.
-No nos vendría nada mal ir a la farmacia cerca de aquí a por medicinas - dijo la misma.
-Era justo lo que iba a decir Paulette, vamos. - dijo Valeria.
Caminaron durante 20 minutos en silencio y cuando llegaron la mayor dejo a la desmayada en el suelo.
-Apartaos por favor -pidió amablemente Paulette antes de coger una rama grande que había cerca de allí y romper la ventana más grande de la farmacia.
-¿Y no te parece mejor idea que hubiéramos entrado por la puerta? - preguntó Malia alzando una ceja.
-Estaba cerrada.
Paulette volvió a levantar a la desconocida y entró a la farmacia, las otras 3, simplemente la siguieron. La farmacia estaba hecha un desastre, botes medicinales por todo el suelo, vendas extendidas por encima de las vigas del lugar, pastillas tiradas por las estanterías y otras ventanas rotas, que las chicas supusieron que se habían roto en el desmadre entre las primeras desapariciones hasta las últimas.
Valeria cogió un botiquín que estaba tirado en el suelo y después de coger vendas y desinfectante, empezó a curar las heridas de la misteriosa adolescente. Entre todas, después de un par de minutos, consiguieron cubrir todas sus heridas. Como no tenían nada más que hacer decidieron inspeccionar la gran farmacia. Encima del local, solía vivir la familia encargada de este así que subieron para llevarse cualquier cosa que creyeran que les serviría a futuro, porque no parecía que esto fuera a durar poco. Claire siendo la primera en entrar, notó un papelito, una nota, pegado al sofá de la casa.
-Eh, ¿chicas? - preguntó extrañada -¿Creéis que la nota es de antes o después del desastre?
-¿Qué nota? - preguntó Malia entrando a la habitación - Ah, esa nota, ¿Pues cómo quieres que lo sepa? Habrá que leerla para averiguarlo.
Paulette cogió la nota y empezó a leerla en voz alta:
"Querida gente:
Después de que mi familia desapareciera, decidí buscar supervivientes en casas cercanas, y como no los he encontrado voy a ir en busca de ellos a Hill Town, el pueblo más cercano. He puesto esta nota porque sabía que si alguien del pueblo había sobrevivido vendría a mi casa a por medicinas, ya qué mi familia dirige o más bien dirigía el negocio. En cuanto llegue a Hill Town me quedaré un par de días, donde me hospedaré en el único supermercado del pueblo, por si alguien ha encontrado esta nota y quiere reunirse conmigo.
Esperando que alguien este leyendo esto,
Karla."
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Abandonadas
Teen FictionA veces, un día normal, puede transformarse en cuestión de segundos, al día donde perdiste todo lo que tenías. Y esta es una de esas veces, donde Valeria, Leire, Claire, Paulette, Camila y Malia, tendrán que sobrevivir PASE LO QUE PASE Portada en h...