PROMESAS

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Más que un símbolo, las promesas significan el valor de nuestra alma y corazón, y al prometer creamos una conexión más allá de las simples emociones temporales. Porque imaginen una noche estrellada observada junto a la persona amada y de pronto, tomas su mano, miras sus ojos y dices «Te amo, y cada estrella del firmamento es testigo de que prometo estar contigo hasta el final de mis días»

En aquel momento, el corazón de quien recibe la promesa brilla de emoción y confía, entrega todo plenamente y espera que esa promesa nunca se rompa, porque para eso existen las promesas, para no romperse. Entonces ¿Si pueden imaginar el daño que recibe uno cuando cree y es traicionado?... o quizá debemos preguntar, ¿quién es el malo? ¿Aquel que ingenuamente creyó en promesas vacías de quien no estaba dispuesto a cumplirlas o aquel que promete y se burla de quien creyó?

Las respuestas varían, de alguna forma aquel que no cumplió creará excusas y aquel que creyó se hundirá en un abismo de decepciones. Entonces, el amor y las promesas se parecen mucho en una relación, mientras sean sinceras, el sol brillará cada mañana, pero si son falsas y vacías, la tormenta destruirá los corazones de quien entregó más, más de lo que la otra parte merecía.

Y yo prometí amarte, aun cuando doliera, porque mi amor es real.

DIARIO DE UN AMOR DISTANTE© (Completa) Sin editarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora