Capitulo 1

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Desde su oficina que estaba en el cuarto piso del palacio podía ver perfectamente todo el jardín y también a la mujer que estaba sentada en su jardín. Nunca en su vida había pensado que terminaría cuidando a una humana y menos a una miko

Su mirada se apartó de ella y observó la pila de papeles que estaba sobre su escritorio durante un par de segundos antes de cerrar los ojos recordando el momento en que terminó con una gran carga sobre él. Recordó haber estado patrullando su territorio cuando una gran ola de youki y reiki llegaron hasta él deteniendo sus pasos. Reconociendo las auras formó una nube bajo sus pies y voló a la fuente

Sintió como las olas de youki y reiki peleaban durante casi una hora antes de que repentinamente se detuvieran y desaparecieran. Voló durante un par de minutos más antes de que por fin se detuviera, desde lo alto en su nube observó la aldea destrozada que estaba debajo de sus pies. Esa era la aldea en que la manada de inuyasha vivía

Estaba completamente destrozada, las casas estaban destruidas y había algunas que estaban quemándose, pero no había ningún humano cerca, debieron de haber huido. Ignorando la aldea su mirada se dirigió al bosque, también estaba en pésimas condiciones. Los árboles estaban destrozados y varias secciones se estaban quemando, incluso había miasma, humo y polvo volando por todo el lugar

Lentamente descendió y al estar a unos cuantos centímetros del suelo, la nube bajo sus pies desapareció y empezó a caminar con calma por el bosque. Había sangre y vísceras por todo el lugar, también cadáveres de demonios por todos lados. Observo todo con indiferencia antes de que algo familiar llamara su atención

Entre un par de árboles caídos pudo ver el cuerpo de un neko youkai completamente cubierto de su propia sangre y debajo de sus patas pudo ver el cadáver de un cachorro de kitsune. Los reconoció rápidamente como los integrantes del grupo de inuyasha, parecía que el neko había estado tratando de proteger al kitsune, pero al final murió por sus heridas, y el kitsune parecía haber muerto de un solo golpe al corazón

Los miro durante un par de segundos antes de bajar su cabeza levemente con respeto al neko y seguir su camino. No pasó mucho tiempo caminando cuando encontró a más integrantes de la manada de inuyasha. Se detuvo y miró el pequeño claro lleno de cadáveres de demonios, y entre toda esa pila de demonios estaban el monje y la taijiya espalda con espalda con pequeñas sonrisas en sus rostros mientras sus cuerpos estaban siendo atravesados por una gran cuchilla. En sus manos todavía tenían sus respectivas armas

Después de mirarlos en silencio por un par de segundos continuó su camino. Cuanto más se adentraba al bosque peor era todo, parecía que se estaba adentrando al centro de la batalla. Sus pasos se detuvieron en el momento en que escuchó un suave jadeo y entonces un olor familiar llegó a su nariz

"se-sessho... maru"

Su nombre fue pronunciado con una voz temblorosa y débil. Lentamente camino hacia la fuente del olor y ahí debajo de un árbol estaba su medio hermano apoyado contra un tronco. Estaba completamente lleno de sangre, tenía dos espadas empaladas en su estómago, le faltaba una pierna y una gran herida cruzaba desde su frente pasando por su ojo derecho y bajando hasta su barbilla. Parecía que moriría pronto

"inuyasha"

Lo vio alzar su cabeza con dificultad y cuando estuvo a punto de hablar tosió haciendo que la sangre cayera por su boca. Sesshomaru lo miro en silencio

"¿p-porque... estas a-aquí?" la mirada de inuyasha era extraña mientras miraba a su hermano "n-naraku esta m-muerto" sonrió con diversión mientras la sangre manchaba sus labios "k-kag... gome lo mató"

En cuanto pronunció el nombre de kagome su mirada cambió a una tensa y desesperada. Alzó una mano temblorosa llena de sangre y agarró la manga de sesshomaru haciendo que él lo mirara ignorando como su ropa empezaba a ensuciarse de un grotesco color rojo

"k-kagome.... T-tienes que c-cuidarla" señalo un lugar con un dedo tembloroso "e-está por... ahí"

La mano que sujetaba la mano de sesshomaru cayó y el único ojo de inuyasha empezó a cerrarse lentamente, pero aun así siguió hablando

"t-tienes que... c-cuidarla"

Fue lo último que dijo antes de que sus ojos se cerraran y se quedará en completo silencio. Sesshomaru lo miró fijamente, no pudo escuchar los latidos de su corazón y su respiración se había detenido completamente. Inuyasha estaba muerto

Se quedó ahí durante mucho tiempo observandolo antes de que recordara las palabras de su medio hermano. En silencio se dirigió a la dirección en que había señalado y después de un tiempo empezó a guiarse por el olor de la miko

La encontró después de un par de minutos, estaba tirada en el suelo con sangre y tierra cubriendola. Su ropa estaba completamente desgarrada, podía ver grandes marcas de garras en una de sus piernas y un gran corte en su costado que aún parecía emanar un poco de sangre. En su mano podía ver la perla de shikon completa que brillaba suavemente, parecía una joya preciosa sentada inocentemente en la palma de su mano. Observo a la miko con una pequeña mueca, la hubiera dejado en ese lugar, pero su honor como noble y teniendo una responsabilidad con la manada de inuyasha no podía dejarla ahí

Un extraño suspiro inaudible salió de sus labios mientras se acercaba con calma para tomarla y regresar al castillo, pero cuando una de sus manos la tocó rápidamente retrocedió con sorpresa mirándola con los ojos completamente abiertos. El alma de la miko estaba completamente destrozada, podía sentirlo con tanta facilidad que era un poco preocupante

Estaba tan destrozada que él realmente no sabía cómo es que seguía viva. La miro un poco, antes de que un pensamiento involuntario llegará a su mente, parece que no tendría que cuidarla por mucho tiempo ya que su alma era frágil. Pensando que sería una tarea fácil y que solo tendría que cargar durante un tiempo limitado la recogió y voló de vuelta al palacio

Pero después de un par de días de tenerla bajo su cuidado se dio cuenta que no sería tan fácil como había creído. Un par de semanas después de que sus heridas habían sanado la miko despertó repentinamente solo para llorar desgarradoramente por su manada muerta, estuvo así un par de minutos antes de que el dolor de su alma destrozada empezará a afectarla rápidamente

La miko sufría de mucho dolor, y era algo constante, no solo por sus heridas. La había visto caminar por el castillo solo para que unos segundos después se apoyara contra una pared y se sentará en el suelo mostrando una cara llena de dolor durante mucho tiempo antes de levantarse y seguir caminando. A veces la escuchaba llorar y gemir en silencio durante la noche por el dolor de su alma rota

Sabía que era algo natural, pero por alguna razón verla en ese estado le producía una pequeña incomodidad e inquietud. Frunciendo el ceño levemente giro su vista hacia la ventana solo para ver como la miko sonreía alegremente a una sirvienta que estaba a su lado

Al principio nadie quería tenerla en el castillo, pero con el pasar de los días empezaron a querer a la miko haciéndolo sentir divertido por ello, se habían quejado durante días y horas por su decisión, solo para que al final terminaran amándola

Su diversión se acabó rápidamente al ver como kagome hacía una mueca llena de dolor y entonces la sirvienta que le había asignado se acercaba a ella con una expresión de pánico en su rostro mientras la apoyaba suavemente. Miro la escena por un par de segundos antes de apartar la mirada y enfocarse en su papeleo sin ninguna expresión en su rostro

No se preocuparía por la miko, después de todo no faltaba mucho tiempo para que ella muriera. Una vez muerta el seguiría con su vida sin ninguna carga a su lado

TamashiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora