Necrocracia

La caída del rey Nigromante

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SEXTO PISO DE LA GRAN TUMBA SUBTERRÁNEA DE NAZARICK.

Sentado en una mullida alfombra de césped a la orilla de un hermoso lago,  Ainz disfrutaba de un apacible día de campo en compañía de tres de sus subordinadas; Albedo, Shalltear Bloodfallen y Aura Bella Fiora.

Habían organizado un pícnic con bocadillos y bebidas preparados por la mano de Tsuare, y aun sabiendo que no podía probar nada de eso, de todas formas a Ainz le agradaba pasar el rato de esa forma. Para él lo más importante era mantener un ambiente de convivencia.

—Ejem —se aclaró la voz Albedo de repente—. Ainz sama, quiero hablar con usted sobre algo muy importante.

Ainz sostenía en sus huesudas manos una caña de pescar en ese momento.

Sabía que no tenía ninguna necesidad de pescar algo en aquél lago de aguas prístinas, pero lo hacía por mera distracción, recordando la época en que Blue Planet san le había invitado a hacer lo mismo en ese mismo lugar...

—¿Mmh? A-Ah, adelante Albedo, te escucho —concedió gentilmente.

—Ainz sama, ahora que Sebas se ha ido de Nazarick junto con Hamsuke y los otros dos, acabo de percatarme de que el puesto de "mascota de Ainz sama" ha quedado vacante, ¿no es así? Permítame postularme para ocupar ése imprescindible papel hasta el regreso de esa co... de la tierna Hamsuke, por favor.

—¡Ahhh! No es justo, Albedo, yo también aspiro a ser la mascota número uno de Ainz sama dearinsu—replicó Shalltear al instante.

Aura meneó la cabeza con aire de resignación al ver que aquellas dos no habían durado más de cinco minutos sin discutir.

Sin embargo, Ainz no hizo ademán de querer apaciguar la acalorada discusión y regresó su atención a su simulacro de pesca...

"Me pregunto si debería haber enviado a Yuri Alfa junto con Sebas a esa misión" reflexionó, "Ella también es una excelente peleadora en combates cuerpo a cuerpo".

Horas antes, luego de haber sido convencido por Cocytos de que sería muy recomendable entrenar a los nuevos reclutas del Reino Hechicero con Artes Marciales, Ainz había mandado llamar a los únicos elementos en Nazarick que eran capaces de utilizar dichas habilidades.

Zaryusu, Climb y Hamsuke se presentaron entonces ante la presencia del Supremo y aguardaron a que los Hanzos (que se hallaban desperdigados a lo largo y ancho de los continentes) terminaran de reunir la información necesaria para saber en dónde se encontraba la mejor escuela de Artes Marciales del Nuevo Mundo.

Cuando la información recolectada fue valorada y sopesada tanto por Cocytos como por Demiurgo, confirmaron que sin duda la mejor escuela de ese tipo se encontraba en un territorio apenas explorado del continente del Este.

Se trataba de una pequeña ciudadela descentralizada de todos los reinos e imperios, que llevaba una existencia tranquila.

Habitada por unos seres conocidos como Endriagos, se decía que habían sido los primeros en acceder a esa "fuerza" latente que existía en el Nuevo Mundo.

Al igual que los Talentos Innatos y la Magia Salvaje; las Artes Marciales debían ser canalizadas por el usuario a través del aura, valiéndose tanto de su voluntad como de su destreza en combate, para poder acceder a esos estados de mejoras en los que el cuerpo era llevado casi a su límite.