3. Dejame conocerte

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Capitulo 3

Déjame conocerte

Darién

Ok, no salió como quería, pero necesito acercarme a ella, sé que no será necesario, por qué cuando llegue el momento, estaremos junto, pero quiero conocerla, quiero que nos conozcamos y que nos amamos por ser nosotros, no nada más por qué así lo quiera el destino, por favor diosa de la Luna déjame acercar... deja que nos conozcamos como se debe, por favor.

-Oye... - escucho su voz, pero será a mi a quien le llamé, o si - anda señor Chiba - y me detengo - ven sientate.

Es la primera vez que me llama ya sea por mi nombre o mi apellido y eso provoca un cosquilleo en mi entrepierna, maldita sea, controlarte, como es posible que tan solo el sonido de su voz .Que, como es posible, está jugando conmigo? Pero por qué?

Me giro y la veo sonreír.

-Es en serio?

Ella asiente con la cabeza. Gracias Diosa

-Anda antes de que me arrepienta, no te molesta que juegue contigo verdad o tal vez siga el mejor consejo que me a dado mi tío en toda la vida.

No espero más y regreso a la mesa. Trato de no verme muy desesperado, pero es algo que no puedo evitar. Tomo asiento enfrente de ella y la contempló, es tan hermosa que quiera tomarla en mis brazos y llevármela lejos, ponerla a salvó y hacerla mía para siempre, pero me detengo a pensar un poco en lo que dijo.

-Así y cuál es ese consejo que te dio tu tío. Tal vez lo lleve yo también acabó.

Ella se me queda viendo, espero por la diosa que no esté considerando que me quiere lejos de ella, por qué si así es, no se qué voy hacer.

-A veces pienso que mi familia es rara... mis tíos siempre me decían que nunca debo de hablar con personas desconocidas. Según ellos podían robarme.

Levanto una ceja. Eso le dice la gente a los niños pequeños o no?

-No se supone que eso se lo dicen a los niños pequeños... - ella levanta los hombros quitarle importancia - en mi caso puedo decirte que también me lo decían, pero ahora me dicen que me deje guiar por mi instinto, por qué ese nunca falla.

Ella sonríe, asta su sonrisa es hermosa, sus dientes son perfectos, sus labios rosados y en formado de corazón, muy, muy apetecibles. Me renuevo en mi silla, me estoy poniendo un poco incómodo.

-Así y tú instinto dice que? Soy peligrosa? Y si lo soy por qué estás aquí?

Respiro y su olor a rosas altera mis sentidos, me digo que si, que es muy peligrosa para mí, me altera tanto... es como si quisiera volver loco, pero trato de calmarme por que eso hace crecer en mi entre pierna. Sonrío.

-Si, me dice que eres peligrosa, pero que a mi no me harías nada.

Ella sonríe más y me encanta que haga eso, me encanta ese brillo que aparece en sus ojos, cuando se da cuenta de que mis ojos la están observando, ella se sonroja y agacha la cara, cuántas mujeres en esta actualidad se apenan de que un hombre las vea.

Me encanta su inocencia y mi lobo quiere saltar y tomarla ahora mismo en esta mesa... me remuevo para apaciguar la incómodas que por más que trato de evitar quiere crecer más en mi entrepierna, de solo pensar en esa posibilidad.

-Tal vez lo medite un poco... lo del instinto, pero con mis antecedentes, no creo que sea bueno.

Frunzo el ceño, sus antecedentes...? Ella sabrá lo de... Aún es muy pronto para entrar en esos detallas, espero que cuando lleguemos a ese tema ella no lo tome a mal.

EL MEJOR CUMPLEAÑOS DE NUESTRAS VIDAS. (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora