Capítulo 1, "La carta de Hogwarts"

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Estamos a finales de Agosto y hoy, otra vez, llegó mi carta del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Como siempre, llegó la lechuza y lanzó la carta por la ventana de mi cuarto. Agarré la carta y lo primero que pensé fue que siempre quise ir a ese colegio pero mis padres no me lo permitían por alguna razón, supongo que por ser la hija del que no debe ser nombrado. Pero, este año estoy decidida a convencer a mis padres de ir a Hogwarts, lo más difícil va ser convencer a mi padre, el me quiere mucho y no quiere que me pase nada malo... Abrí mi carta y esta decía:

"COLEGIO HOGWARTS DE MAGIA Y HECHICERÍA
Director: Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore.

Querida señorita: T/n Riddle
Tenemos el placer de informarle de que dispone de una plaza en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Por favor, observe la lista del equipo y los libros necesarios. Las clases comienzan el 1 de septiembre. Esperamos su lechuza antes del 30 de Agosto.
Muy cordialmente,
Minerva McGonagall, Subdirectora"

Sin leer la lista de materiales Salí de mi cuarto y bajé a desayunar con la carta escondida en el bolsillo de mi buzo.

T/n: Buen día - dije mientras le daba un beso en la mejilla a mi madre y luego a mi padre.

Madre: Hola T/n, como dormiste?

T/n: Bien...- dije mientras me sentaba. Me quedé callada un rato pensando en como convencer a mi padre de ir a Hogwarts.

Padre: Que pasa T/n? Estás muy callada - Mi padre siempre se da cuenta de todo, me conoce muy bien, es hora de decirles sobre la carta.

T/n: Tranquilo padre, estoy bien. - dije para tranquilizarlo - Es solo que... llegó mi carta.

Padre: Carta?

Madre: Que carta?

T/n: Mi carta de Hogwarts - bajé la cabeza y sentía la mirada de mis padres clavada en mí - y quería saber si este año podía... ir? - dije mientras volvía a levantar la cabeza y mirarlos a los ojos.

Padre: T/n... - dijo mirándome, yo ya sabía lo que el pensaba así que antes de que pueda decir algo dije:

T/n: Padre, sé que te preocupas por mi, pero de en serio quiero ir. Quiero aprender magia como todos lo hacen y Hogwarts siempre fue el lugar indicado para eso... Sé cuidarme sola, y también sé que no me pasará nada. Por favor déjenme ir, no quiero perder esta oportunidad. - no sabía que más decirle, estaba nerviosa, pero de en serio quiero ir a Hogwarts.

Madre: Tom... creo que es hora de dejarla ir- mi padre volteó a ver a mi madre.

Padre: Lo sé- dijo mientras volvía a mirarme- podrás ir a Hogwarts, pero prométeme que te cuidarás y sin importar lo que pasé siempre vas a escribirnos, ya sea a mi o a tu madre.- escucharon eso? Dijo que me deja ir a Hogwarts!

T/n: Lo prometo- y salté para abrazarlo, estaba muy feliz.

Padre: Te quiero T/n- dijo mientras me abrazaba.

T/n: y yo a ustedes- dije mientras abrazaba a mi padre y miraba a mi madre.

Madre: Tienes que comprar todas tus cosas, faltan dos días para que empiecen las clases- mi madre tenía razón, no había pensado en eso.

Padre: Tranquila amor, T/n puede ir al Callejón Diagon, ahí podrá comprar todo lo que necesite, es más, en el Callejón Diagon es donde está el local de Olivanders, donde T/n compró su varita.

Padre: Tranquila amor, T/n puede ir al Callejón Diagon, ahí podrá comprar todo lo que necesite, es más, en el Callejón Diagon es donde está el local de Olivanders, donde T/n compró su varita

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Luego de eso, terminamos de desayunar y charlamos un poco más acerca de Hogwarts. Subí a mi cuarto y lo primero que hice fue escribir una carta diciendo que este año si iría a Hogwarts.

Envié la carta y pasé todo el día pensando en como sería mi vida allí, pensando en si iba a tener amigos... ya que ser la hija de Lord Voldemort probablemente haga que las personas tengan miedo de acercarse a mi.

Cuando el día terminó, me acosté en mi cama. No veía la hora de ir al Callejón Diagon y luego, a la estación King Cross!

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