Mi nombre es t/n Riddle, hija de Tom Riddle, o más conocido como Lord Voldemort. Tengo 13 años y vivo en la Mansión Riddle junto a mis padres.
Siempre quise ir al Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, pero nunca fui ya que al ser la hija del "Seño...
Josh me besó. No supe como reaccionar, igual no tuve tiempo ni para eso ya que cuando los labios de Josh tocaron los míos, Draco empujó a Josh y me dejó muy en claro que ya no éramos novios. El se fue triste y enojado, y yo me quedé con Josh, mientras veía como Draco se alejaba y lágrimas caían por mis mejillas.
Josh: T/n, lo siento.- miré a Josh.
Riddle: Está bien Josh, no es tu culpa.
Josh: Quieres que te acompañe a Hogwarts?
Riddle: No, estoy bien. Prefiero ir a mi casa y quedarme ahí. Pero gracias.- dije con la voz entrecortada.
Josh: Mándame una carta cuando llegues.
Riddle: Está bien... adios.- Me trasladé hacia la Mansion Riddle y al entrar, ahí estaban mis padres. No sabía que decirles, ellos no sabían de Draco.
Padre: Hija, que haces aquí? Deberías estar en Hogwarts.
Riddle: Lo sé, es que...- no sabía que decir.- ...no me siento muy bien.
Madre: Que te pasó?- dijo acercándose a mi.
Riddle: Estoy un poco mareada.
Padre: Oh, ve a recostarte si quieres.
Riddle: Gracias.- subí a mi cuarto. Me acosté y comencé a llorar. Había perdido al amor de mi vida, a la persona que más amaba en el mundo. - Lo perdí.- me dije a mi misma con la voz entrecortada. Seguí llorando hasta que me dormí. Tuve un sueño raro. Soñé que tenía poderes, en mi sueño podía lanzar fuego con las manos y controlar el agua, congelar cosas también.
Me desperté y me quedé en mi cuarto. No quería bajar a desayunar, así que mi madre tocó la puerta y ella entró:
Madre: Buenos días, te traje el desayuno.- dijo mientras apoyaba una bandeja en mi cama.
Riddle: Gracias madre.- dije forzando una sonrisa.
Madre: Te traje una manzana y un vaso con agua. Se que no es mucho pero si te sientes mal, tienes que cuidarte.- Había olvidado que ayer les dije que me sentía mal.
Riddle: Está bien, gracias.- dije, mi madre se fue y cerró la puerta. Me quedé sola en mi cuarto comiendo la manzana. En mi mente solo pensaba en Draco y en mi sueño, quizás sea verdad que tengo poderes. Entonces, miré el vaso de agua con la intención de hacer flotar el agua, ya que en mi sueño podía controlarla. Primero miré el agua, pero no pasó nada. Luego, chasquee los dedos pero no pasó nada. Seguí intentando hasta que hice un movimiento con mis manos y esto pasó:
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De a poco, comencé a acercar esa bola de agua hacia mi boca y la tragué. No podía creer que en verdad tenía poderes, así que llamé a mis padres.
Riddle: Madre! Padre!- grité a todo pulmón. Ellos entraron a mi cuarto y dijeron:
Madre: Que pasó?!- dijo preocupada.
Padre: Hija, estás bien?!- dijo preocupado.
Riddle: Shh, solo miren esto.- hice de vuelta ese movimiento con mis manos y la pude controlar de nuevo.- No es increíble? No sabía que tenía poderes. - dije emocionada.
Padre: Hija...- mi madre miró a mi padre y luego a mi.
Riddle: Ustedes sabían que yo tenía poderes?- dije un poco molesta.
Madre: Si, pero.- no la dejé terminar.
Riddle: Y por qué no me lo dijeron?!- dije, ahora sí, molesta.
Padre: Es que creímos que no los tendrías, me refiero a que, durante estos años no has dado señales de tenerlos. Todavía no entiendo como es que los tienes.
Riddle: Ayer tuve un sueño, soñé que tenía poderes y decidí intentar hacer esto- dije mirando el vaso de agua y volviendo a controlar el agua.- con el vaso que me trajiste.- dije ahora mirando a mi madre.
Madre: Hija debes saber, que no es el único poder que tienes.
Riddle: Lo sé, también puedo lanzar fuego, no?- dije feliz.
Padre: Si, pero tienes más, los vas a descubrir de a poco. Ni siquiera nosotros sabemos cuales poderes pueden ser.
