STRONG

ONE

Los nuevos vecinos empezaban a ser muy ruidosos y también algo irritantes, todas las mañanas empezaban con lo mismo.
Una sacudida en su propia casa.
Gritos en el campo vecino (día y noche).
Alguna que otra oveja asustada o desangrada en su corral.
Y lo más importante un abogado en su puerta con un número cada vez más alto según pasan los días.
Las mañanas no siempre eran iguales pero en general está escena de repetía constantemente.

aunque lo del abogado estaba comenzando a asustarnos demasiado con sus cheques y propuestas para la compra de su gran terreno (heredado de sus tatara abuelos ), y no los culpaba de podría decir que es del tamaño de un pueblo y que tenía los recursos suficientes para alimentar una ciudad muy pequeña y que de paso estaba cerca de convertirse en una nueva reserva natural debido a las numerosas especies que lo habitan, las ganancias que tenía gracias a la compra y venta de sus vegetales y frutas ayudaba a mantener la propiedad a su nombre, porque no mentiría a nadie a cerca de su valor actual, ella lo sabía, sabía cuanto dinero hay bajo sus pies y se sentía orgullosa de ello, no dependía de nadie para vivir, estaba en su propio lugar sin el temor de que en cualquier momento alguien iría a matarla y luego cocinarla como el trozo de carne que es conciderada en su país.

No pasaban de las 5 de la mañana cuando tocaron la puerta, supuso que había vuelto del abogado al notar que había un grupo de guardias de seguridad vigilando su patio, suspiro y bajo lentamente como lo aria un estudiante de secundaria con clases un sábado en la mañana, no se molestó en ponerse su cinta para evitar que la luz del nuevo foco (que era fuerte) la dañara pero si tuvo la gentileza de alzar su bastón en caso de que necesite madrear al abogado por quinta vez consecutiva por sus locas paranoias y conspiraciones acerca de que ella ocultaba nuevas especies, JA esa casa era grande y ancha cuando se hablaban de las puertas pero ni de loca metería a un nueva especie a vivir ahí, no considerando la cantidad de carne que comen o sus constantes necesidades como machoso hembras (sip atraía a ambos géneros por igual) y aunque eran jocosamente atractivos no dejaría a uno entrar a más de dos pasos en su casa, sería repetir la escena de judi jops cuando entra a la ciudad de los ratones!, así que ni pensarlo.

Mientras Lucía bajaba como la anciana que era (internamente) la desesperación de hacía notoria para el nuevo abogado junto al grupo en las afueras de la casa, era increíble como tardaba al bajar, pero su madre le enseñó a respetar a los adultos mayores en especial a los humanos, son muy débiles y cualquier mero susto le podría hacer daño asi que decidió ponerse de rodillas fingir una sonrisa y memorizar es razones por las cuales había aceptado esta tarea, y así sucesivamente repasaba sus diálogos convincentes para hacer que la serñora al otro lado de la puse a acepte vender ese gran trozo de tierra , justo cuando sintió que estaba a dos pasos del otro lado de la puerta acomodó su ropa y sus lentes, y de trago todas las grocerias si le iba a decir a la vieja que lo retenia.

La puerta se abrió lentamente y para el todo se puso en cámara lenta mientras observaba como esa muchachita tan joven y Blanca como la nieve se asomaba al principio quedó aturdido por su físico y por su fragilidad y se sintió aún más aturdido mientras miraba con hambre esos labios carnosos de un tono cereza como las que había comido de desayuno y su aroma terminó hechizandolo aún más, ella olía a la tierra mojada, refrescante y fragante al mismo tiempo seguido con el sitio aroma a Pino y a flores silvestres que lo acompañaban cuando salía a cazar, era hermosa y frágil y al mismo tiempo fuerte y caliente, se vio  sexy el movimiento de su mano con ese gran trozo delgado de madera, parecía una dios, una diosa que lo condenaria si se atrevía a mirar a alguien más pero sin que el lo haya querido el tiempo a su alrededor volvió a su estado orginal y el golpe se vino con fuerza dejando lo inconciente.

Y su historia empezó su rumbo. .....