Victoria- Y tienen un sabor mejor...
Itatí- Mi bella dama, me permitiría probarlos?
Victoria- Con mucho gusto...Itatí lamió uno de los cenos, a lo cuál Victoria soltó un pequeño gemido, ese gemido excitó demasiado a Itatí, que de un momento para otro ya estaba mojada.
Y ahí estaban, dos amigas haciendo el amor, sin importarles la fiesta, ni las personas ni nada, solo eran ellas dos.En eso un chico que estaba buscándolas, oyó ruidos en el cuarto, iba a entrar, pero no pudo, ya que estaba cerrada con seguro, solo observó por la perilla , y vió a Itatí chupando los cenos de Victoria; el chico no supo que hacer y solo se fue de ahí, con la cabeza baja.
Victoria- Oíste algo?
Itatí - No, pero si quisiera oír algo...
Victoria- Ah, si?, Cómo qué?
Itatí- Tus gemidos
Victoria- Házmelo bien y los oirás...Itatí, iba dando pequeños besos por todo el cuerpo de Victoria hasta llegar hasta al punto dónde quería, ahí se dispuso a introducir un dedo , para después moverlo estando dentro de ella.
Victoria no podía ,estaba demasiado excitada.Había llegado el turno de Victoria , ella empezó lamiendo la entrepierna de Itatí, hasta llegar a la zona , dónde se dispuso a meterle la legua, hasta el fondo. Itatí solo se retorcía de placer, era tan tierna verla como se agitaba , y le daba cierta pena, ya que Victoria era su primera vez, y además ella había dado el primer paso.
Victoria- Estás bien?, Te noto tensa, no te gusta?
Itatí- Me encanta, pero, es mi primera vez...
Victoria- También es mi primera vez, y no hay nada de malo con eso, tú me gustas yo te gustó, somos adultas y sabemos bien lo que hacemos, cuál es el problema?
Itatí- Tengo miedo, que después de esto me dejes de hablar y eso, es algo que no soportaría - llevándose las manos hacia la cara, con intenciones de llorar.
Victoria- Corazón, no va a pasar eso, te lo prometo, eres lo mejor que me ha pasado porque habría de abandonarte, y aún así, por qué lo haría?, si yo te amo
Itatí- Por las opiniones de la gente, porque algún día te dejare de gustar, y me cambiarias- Rodaron lágrimas de sus ojos.
Victoria- Carajo!, acaso crees que te cambiaría?, no!, la gente se puede ir a la mierda, nunca te deben de importar las opiniones de la gente estúpida, que solo quiere hacerte daño, mírame bien - levantando su cara para que la mirará- jamás, jamás, te voy a dejar, entiéndelo , o sea, mírate eres hermosa, encantadora, divertida, eres perfecta, qué acaso no lo ves?Itatí se quedó en shock, nunca le habían dicho algo así, pero aún así le daba miedo el mundo, pero si Victoria lo enfrentaba junta a ella, sería mejor.
Itatí - No sé qué decir , solo sé una cosa...
Victoria- ¿Qué cosa?
Itatí- Que te amo, y si estoy contigo , el mundo se puede ir a la chingada, me gustas tú, no el mundo entero, y se puede joder si no acepta que te amo, y si no me crees lo puedo gritar a los cuatro vientos!
Victoria- Jajajaja, te creo, y yo también te amo, y si, que se joda el mundo!De repente, a ambas se les ocurrió una idea, que se dijeron con solo verse.
Itatí- Estás pensado lo mismo que yo?
Victoria- Depende, ya que yo estoy pensando en dos cosas.
1.- Que me hagas tuya.
2.- Mantener esto como un secreto.
Itatí- Lo de hacerte mía, no se oye tan mal, y respecto a lo otro estoy de acuerdo, porque como dicen "Los amores prohibidos, son más fuertes que los permitidos".
Victoria- Me salió poeta la señorita, pero si estoy de acuerdo , entonces trato?
Itatí- Un momento, señorita Ruffo, solo me queda una pregunta por hacerle...
Victoria- ¿Y cuál es esa pregunta?
Itatí- Señorita Ruffo, ¿acepta usted ser mi novia?
Victoria- Ummm, eso es una decisión muy importante...a lo cual mi respuesta es que...claro que sí!Sellaron ese hermoso momento con un beso, un beso tierno, dónde sentían todo el amor del mundo, entraron nuevamente a la cama solo que esta vez lento, sin prisa, se besaban.
Llegaron los besos hasta los cuellos, era tan satisfactorio para ambas, Victoria deslizaba sus manos por todo el cuerpo de Itatí. Se seguían besando, hasta que Itatí empezó a acariciar sus pechos, los pezones los apretaba con frecuencia, cosa que hacía estremecer a Victoria.
Itatí de tanto oír sus gemidos, ya hacía mojada, Victoria al ver esto sonrió y se abalanzo sobre ella para plantarle un beso con mucha pasión, acariciaba sus muslos, le levantó la falda para acariciar su pelvis, de pronto Victoria le quitó las bragas, y procedió a meterle la lengua, la movia suave dentro de está.
Itatí no dejaba de gemir, y cada vez estaba más mojada, agarraba el pelo de Victoria para que esto no le estorbarse. De pronto la cambio de posición y la sentó sobre sus piernas sin dejar de besarla.
Ahora Victoria la puso en otra posición, algo así con un "69" pero no exactamente (✂️).
Amabas daban pequeños saltos , para tratar de no lastimar a la otra.Cuando terminaron se quedaron profundamente dormidas, abrazadas.
A la mañana siguiente, Itatí se despertó primero y pudo observar lo bella que se veía Victoria dormida, hasta que se dió cuenta de algo.Itatí- Un momento, ¿seguimos en la cabaña?- al darse cuenta de esto, trato de despertarla...
Victoria- Sweet, qué pasa? - Aún soñolienta
Itatí- Te das cuenta en dónde estamos?
Victoria- En una cama?
Itatí- No, bueno si, pero en la cabaña
Victoria- Y?...- reaccionando- madres, habrá todavía personas en la planta baja?
Itatí- No sé, yo diría que lo más conveniente es que nos fuéramos de aquí
Victoria- Ya, y no me vas a dar un besito de "buenos días", digo, me despiertas bien tu problema (no es una ofensa, es una expresión) , y no me das ni siquiera buenos días
Itatí- Buenos días, amor mío - plantandole un beso que transmitía mucho amor.
Victoria- Ahora sí, ves que diferencia?, Muy buenos días, corazón - respondiendo a su beso- Ahora ,vámonos a de aquí.Salieron en de la cabaña, que al parecer parecía fantasma ya que no había nadie ni se escuchaba nada, decidieron ignorarlo y subirse al carro. Ya conduciendo Victoria agarro la mano de Itatí y le sonrió - Oh, por Dios, pero que sonrisa tan divina- le dijo al oído, con voz seductora.
"Han oído eso de a tijerasos no hay embarazos?🌝✂️".
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Itavic.
RandomEstá historia se centra en las vidas de Victoria Ruffo e Itatí Cantoral, amigas inseparables... Hasta que un día se conoce que están enamoradas la una de la otra, pero sin previo aviso llegara César Évora hombre el cual hará rectificar a Victoria. ...