Y ahora algo cambio

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Hacia el redondo sol flotas debajo de mí,
Hacia la redonda luna floto debajo de ti.

Habitación de gozo a la que llegamos en paralelo.

Luna y sol
Hermosos y perfectos
que creamos tú y yo...』

~Moon Jeon-hee

『♡』

Ver tan flaqueado a Xiao Zhan me dejó mal.

¿Cuánto más le iba a mentir? ¿Cuánto más tenía que fingir amarle sólo como amigo? Si el causante de mis rupturas ha sido este amor secreto que siento por él.

A la mañana siguiente, después de haber hecho el amor, ambos despertamos actuando como si no hubiese pasado nada, aunque tratamos de negar lo evidente, el caminar de Wudian Zhan lo delata. 

—Wudian Zhan... Si quieres, podemos dejar el paseo para mañana, no te ves muy bien y necesitas decansar —le digo.

—¿Estás loco? ¿Y dejar que te pierdas de tu estancia aquí? No, ni hablar. Iremos a pasear. 

—¿Y tu dolor?

Wudian Zhan hace una seña con la mano, despreocupado. Después, sobre la mesa extiende un mapa de la ciudad.

—Esta es Madrid, te la presento. Madrid, él es mi Yibo —bromea —ahora, nosotros estamos aquí... Si lo notas, estamos en un lugar central. Podemos movernos con facilidad. ¿A dónde quieres ir primero?

Miro los sitios que Wudian Zhan había encerrado en un círculo y medito mi respuesta.

Antes de venir aquí, había visto diferentes páginas de los lugares que tenía que visitar cuando llegara a Madrid, pero es obvio que el buscador me dio los sitios más populares o emblemáticos de la ciudad. En cambio, Wudian Zhan, me señala esos pequeños sitios que sólo conoces estando aquí.

—Éste —señalo la Plaza de Cibeles.

—Genial. Está cerca de aquí. Y tiene una fuente enorme, te encantara, ah, y también está algo cerca de mi Universidad. Podemos ir.

—Luces emocionado —le digo.

—Es que siempre quise visitar estos sitios con alguien al que amara. Pero, venga, que ya casi son las once y hay mucho que hacer.

Xiao Zhan regresa a su habitación y sale unos minutos después con su Canon colgada al cuello y una mochila al hombro.

Let's go! —me dice.

También regreso por mi mochila, cojo una sudadera y salimos juntos.

La ciudad ahora es muy diferente al día de ayer que llegué.

Wudian Zhan me enseña a tomar el autobús. Visitamos los sitios que señaló en el mapa  y quedo impresionado cuando estuvimos frente a La Cibeles. Nos hacemos de una buena cantidad de fotos y también, al anochecer, pisamos La Puerta de Acalá. El monumento está bañado con algunas luces de colores y se me ocurre llevar a Wudian Zhan hasta allí para besarlo. 

Me encanta este bonito pretexto de "Lo que suceda aquí, se queda aquí" porque puedo cogerlo de la mano, llevarlo a todos lados con los dedos entrelazados y besarlo al final de cada visita.

Por la noche llegamos cansados y después de una ducha, ambos quedamos dormidos.

Al día siguiente sucede lo mismo. Desayunamos y visitamos lugares diferentes. Parece que aquella ciudad saca museos, plazas y parques por debajo de la tierra. Visitamos muchos y nos faltan todavía otros más a los que iremos los siguientes días.

Amor en Madrid | YiZhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora