Amor en Madrid | YiZhan

Ahora nos amamos de verdad.

『El deseo de amar a alguien de nuevo
está haciendo latir mi corazón.
Sueño.
Y añoranza.

Amor profundo y duradero.

Dormimos, descansamos
y vivimos en nuestra alegría momentánea
para recargarnos.』
~Na Tae Joo

『 ♡ 』

Echo un vistazo por última vez a la habitación y acaricio los bordes del marco de la puerta.

Aquí he pasado los últimos tres años de mi vida y estas cuatro paredes han sido testigo del amor que sentí y el vacío que tuve por un largo tiempo. También, han sido testigo del renacimiento de un amor más puro, dulce. Un amor que cada vez me es más difícil ocultar.

Siento la mano de Yibo aferrarse a la mía y me besa levemente en la coronilla.

—¿Listo? —me susurra al oído.

—No. Me falta algo para despedirme de aquí.

Me giro a verle, y atrapo sus labios con los míos. Nos fundimos en un beso suave al momento que cierro la puerta de la habitación.

—Ahora sí, vámonos.

Yibo coge sus maleta e intenta hacer lo mismo con las mías. Tenemos una pequeña y tierna pelea por ver quién llevaba las maletas y al final cada quien lleva las suyas.

En la puerta del departamento, Freyre nos espera con las llaves de su coche en mano. Él nos llevará al aeropuerto y me tiene paciencia cuando doy una última mirada al interior l.

—Siempre sois bienvenidos, A-Zhan. No te olvides de hacerme una visita pronto —me dice cuando salgo por completo del apartamento.

—Y tú no olvides tampoco visitarme, ¿Eh?

Lucio Freyre ha sido también testigo de mi crecimiento aquí. Él me mostró la ciudad y me presentó mucha gente. Me ayudó con el idioma y su familia también me trató bien.

Su novia y yo tenemos la misma edad, con ella comparto temas de arte, cine y fotografía y los tres salíamos a citas los fines de semana.

Bajamos al aparcamiento y me encuentro con Jessica, la novia de Freyre.

—A-Zhan —me dice la chica, metiéndome en sus brazos y apretándome fuerte —cuidate mucho, ¿Quieres? Lucio y yo te esperaremos aquí siempre, ya sabes.

—Jess, te voy a extrañar.

—Nada de lágrimas, gigantón —me dice —estoy segura que nos veremos pronto.

Me da otro abrazo y después mira detrás de mí. Yibo y Freyre ya han metido las maletas al coche y nos esperaban.

—A-Zhan... ¿Quién es?

—Wang Yibo.

Sonreí a Jess y me meto al auto con Yibo en la parte de atrás. Escucho a Jessica llevarse las manos a la boca y ahogar un grito de emoción.

Sí, Jessica y Freyre saben ni historia con Yibo.

Durante el trayecto al aeropuerto, me despido de Madrid; del Paseo de la Castellana, el CCC, Plaza de Colón, los parques... todo.

Regresaba a casa, con mi Yibo.

En el aeropuerto, realizamos el embalaje y me despido oficialmente de Freyre y Jessica.

Veo por última vez a aquel que se convirtió en mi hermano mayor mientras yo empezaba aquí y a la chica que siempre tenía un lugar nuevo que mostrarme.