-La Leyenda Del Dios Invencible-

Intervención

P.O.V Son Goku

Me levante en la mañana, hice un calentamiento ligero, 1000 abdominales, 1000 sentadillas, y 35 platos de comida bien servidos, olvide bañarme, pero eso lo puedo hacer tranquilamente en la sala de el consejo

Me vestí con mi traje formal para dar clases de forma normal, hoy tengo poco trabajo, una clase en la segunda hora, otra clase a la hora siguiente, y una a la ultima hora, ya vestido y con mi maletín salí de casa, camine tranquilamente hasta llegar a la academia, decidí primero ir a comprar unos bocadillos a la tienda escolar

-¡Buenos días Maria chan! -Salude a la encargada de la tienda, una extranjera en busca de aventuras-

-¡Buenos días profesor!, ¿que vas a pedir? -Me respondió el saludo, mientras  me preguntaba-

-2 Platos de arroz y un bol de Katsudon por favor -Pedí mi comida con una sonrisa-

Poco tiempo después me entrego mi comida, me aleje un poco para poder comer en paz, mientras comía me puse pensativo, veía a la academia, los jóvenes caminando hacia su clase con tranquilidad, hablando entre ellos, la paz se respiraba en el aire, seria una pena que alguien intente arruinar esta paz, que se tuvo que construir a base de guerras en diversos puntos de la historia, guerras a las que yo di fin, o di luz verde para que sigan..

Hace como 5 minutos que mi comida se termino, pero aun seguía apreciando el paisaje, finalmente decidí ir a la sala de el consejo, tengo que darme una ducha antes de dar mi clase, camine hasta ahí rápidamente, entre y lo primero que vi fue a una Sona pensativa, con varios documentos cerca, sonreí, ella descubrió algo

-Goku, ¿eres un dios? -Me pregunto mirándome a los ojos, me sorprendí en demasía, no pensé que descubriría eso tan rápido, estoy orgulloso de ti, mi Princesa-

-Siéntate mi Princesa -le dije tranquilamente-

Ella me hizo caso, se sentó en el sofá de el club, yo me senté a el lado de ella, no se notaba asustada, ni intimidada, solo curiosa, eso me encanta

-¿Un dios dices? -Le pregunte, para asegurarme de que escuche bien-

-Si, un dios, mas precisamente, ''El Dios Invencible'', un ser tan poderoso y respetado por tantas generaciones, eras, por.. -Se quedo callada, sin saber como continuar-

-Eones.. -Termine la palabra, ella se sorprendió, se puso de pie rápidamente mientras me miraba directamente a los ojos-

-Entonces.. ¿Es cierto? -Me pregunto-

-Si.. -Respondí-

El silencio en la sala era considerable, una tensión empezó a formarse en el entorno

-¿Porque no me dijiste eso..? -Me pregunto Sona, un tono dolido, bajo, triste..-

Eso me derritió el corazón, no es que no le haya dicho a ella que soy esa deidad que menciona, es que no se lo dije a absolutamente nadie, bueno, Sirzechs lo sabe, pero no sabe mi identidad, y estoy seguro que Azazel pronto me descubrirá, es un loco total, pero también es un genio

-Tenia miedo... -Admití, mirando a el suelo-

-¿Miedo de que? -Respondió Sona- -Eres tan fuerte que nadie podría hacerte daño, ni nuestro Lucifer a máximo poder- -Decia Sona, cada vez mas tensa- 

-Si.. Tu puedes hacerme daño Sona.. -Ella levanto la mirada confundida, yo también lo hice- -Si tu me tuvieras miedo porque sabes lo que soy, eso me lastimaría mas que un golpe bien dado, mas que extirparme el corazón sin calmantes, mas que desintegrarme entero directamente a el núcleo de el sol- -Admití, poniéndome de pie, mirándola a los ojos, la tome gentilmente de la cintura, vi como lagrimas empezaban a salir de sus hermosos ojos, lagrimas que no acepte que salieran, asi que puse mi mano por un lado de su rostro, empece a emanar un calor reconfortante, el cual hizo que sus lagrimas se frenaran-