La vida en gris y azul

Guías

- ¿A qué se refiere con eso de guías señor director?- pregunto Lourdes.

- A que os he elegido q vosotros, cada uno nuevo compañero de alguno de los nuevos alumnos para que les enseñéis el instituto y os conozcáis un poco.

No miramos entre los cuatro alumnos veteranos y se hizo un silencio incómodo.

-Tú Clara le enseñarás a Darío lo que estáis estudiando: Física. Alex, tu igual a Pablo con periodismo. Lourdes, tú le enseñarás a Carla filología hispánica y tú Rose, a Mandy, Stefany y a los trillizos matemáticas.

Mandy explotó una pompa de chicle que tenía en la boca.

No sé porqué pero esa chica me da muy mala espina.

Nos separamos y cada uno de los nuevos alumnos se fue con su veterano correspondiente y viceversa.

Cuando me acerqué a los chicos vi que eran muy simpáticos o por lo menos lo parecían.

Stefany parecía tímida. Me daba buena impresión esa chica.

-Me presento, soy Rose Carter.- les dije sonriendo.

-Yo soy William, puedes llamarme Will.- me dijo uno de los trillizos.

-Yo Paul y él es Charles.- me tendió la mano y nos las estrechamos.
-Puedes llamarme Charlie- me dijo el tercero imitando a su hermano.

Definitivamente me caían bien esos chicos.

- No sé si os ofendera pero, ¿Cómo os diferencio?- les dije a los trillizos.

- No ofende tranquila. Yo, Will soy el más alto de los tres, Paul tiene los ojos de un color más claro y Charlie lleva el pelo siempre más largo que nosotros.

-Vale pues se me va a dar bastante bien.- les dije con una sonrisa.

El que creo casi con total seguridad que era Charlie me sonrió en respuesta.

-Tú eres Stefany, ¿No?- le pregunté a ella.

-En efecto- me dijo con una sonrisa torcida.

-Mandy, un placer para tí.- dijo esa horrible chica mirándome con desdén.

-El placer es tuyo- le dije en respuesta con una sonrisa irónica.

-Vale, os enseñaré nuestras aulas de trabajo y el comedor. Luego el gimnasio y después los baños de cada planta.

Dicho esto comenzamos a andar. Me fijé que los trillizos no llevaban la misma ropa. Will llevaba unos jeans y una camiseta naranja con una chaqueta negra por en cima. Paul también unos jeans pero estos eran color caqui y su camiseta era blanca con una chaqueta parecida a la de Will. Charlie llevaba unos pantalones campana y una sudadera roja.

Era verdad que Will era más alto. Dese lejos si se notaba. A Paul no le veía los ojos pero si sabía quien era Charlie por su gran mata de pelo rubio.

Me paré para esperar a Stefany y cuando está estuvo a mi lado vi que los chicos también se habían parado.

-Y, ¿Donde estudiabais antes?- les pregunte.

-Will en un instituto público y yo junto a él. Paul estudiaba en uno concertado.- me dijo Charlie.

-Yo en el mismo que Paul. Lo conocí allí.- me dijo Stefany.

-¡Qué bien entonces!-les dije.

Paul me puso cara rara u Stefany miró al suelo.

-Eran novios el año pasado pero Paul descubrió a Stefany besándose con otro llamado Fred. En realidad ella no lo quería besar pero mi hermano es muy tozudo y no escucho su explicación.- me susurró Charlie al oído.

-Pues me tocará juntarlos otra vez,¿Te apuntas? - le dije al oído. Me tuve que poner de puntilla porque, aunque Will era el alto, sus hermanos lo eran también.

-Acepto- me dijo.

Les enseñé las aulas y el comedor. Salíamos del gimnasio cuando Mandy tiró su chicle al suelo del patio.

Obvié ese hecho porque todos lo hacían pero a mi gusto me hubiera gustado cantarle las cuarenta y decirle cuatro cosas.

Will observó muy enfado y me puso una mano en el hombro sonriéndome.

Yo le correspondí la sonrisa y esto me calmó.

Cuando llegamos a los baños de la última planta, lo último que me faltaba por enseñar se los enseñé a las chicas ya que no tenía permiso para entrar en el servicio de chicos.

-Que asco de baños por Dios- dijo Mandy

Otra vez hubiera necesitado la mano de Will en el hombro si no hubiera sonado el timbre y me hubiera ida con Stefany a por mis cosas para ir al comedor.

Saludé a los trillizos cuando salía del baño y Charlie se acercó a nosotras.

-No me iba a quedar con mis hermanos. Tenemos personalidades demasiado diferentes- nos dijo encogiéndose de hombros.