Winter Bear, La Vida no es fácil

Ser Amado

Ver a su novia cada mañana al despertar era lo que más le gustaba a Jeon Jungkook, sentirla a su lado y sentir ese dulce aroma entrando por sus fosas nasales.

Besó la coronilla de su cabeza y se levantó para arreglarse, debía ir a trabajar, Haneul debía ir también, pero había decidido tomar un descanso.

En el camino a la empresa Jeon iba cantando y disfrutando del lindo momento, estaba siendo el mismo.

Al llegar al lugar se estacionó y reconoció el automóvil rojo que se encontraba junto al suyo.

bajó del vehículo y se fijó en la placa, si, era ella.

Entró a la empresa, caminó por un largo pasillo y se encontró con el gran cuadro de Taehyung... continuó caminando y la vio en la sala de espera.

- ¡Jungkook! - le llamó la ahora rubia, esta se acercó a el intentado abrazarlo, pero Jeon la detuvo.

- ¿Qué haces acá Songhi? - Preguntó seco, realmente lo había tomando por sorpresa - Te dije claramente que entre nosotros no hay ni habrá nada, no me gustas, debes comprender.

- Solamente te vine a ver, tal vez podamos ir a comer a algún lugar o-

- No Songhi, no quiero, estoy enamorado de otra persona - Contestó, esas palabras le hirieron tanto a ella que comenzaron a salir lágrimas de sus ojos.

- se que lo nuestro no era perfecto Jungkook, pero jamás me había sentido así con nadie - musitó llorando.

- ¡Maldita sea, yo no te amo, ya estoy con otra persona! - exclamó el pelinegro, llamando la atención de las recepcionistas.

La mirada de la rubia se intensificó, no parecía la misma chica dulce que había ido detrás de él como un perrito, parecía una loca.

- Eres mío o de nadie, recuerda esas palabras, no permitiré que estés con alguien más - Soltó para luego irse.

Esa chica era realmente un dolor de cabeza para el, algunas veces era dulce y en otras ocasiones parecía no tener piedad con nadie.

Trabajó lo más duro que pudo, pero las palabras de la chica no salían de su cabeza "Eres mío o de nadie, recuerda esas palabras, no permitiré que estés con alguien más".

"Perra loca" pensó.

Al ser casi el medio día tomó un descanso, los chicos decidieron salir a almorzar, el se quedó practicando, tratando de despejar su mente le envió un mensaje a la famosa castaña.

Jungkook.
Amor, pasaré por ti al anochecer, vístete elegante, iremos a cenar.
Te amo.

Sonrió al enviar el mensaje, no podía evitar sentirse emocionado cuando algo tenía que ver con Haneul.

Había hecho una reservación en uno de los mejores restaurantes de Seúl, una velada para dos personas que se aman, nada mal.

La castaña estaba terminando de ponerse ese lindo vestido pegado color rosado, no era un rosado llamativo, era más bien como un color bebe.
Jungkook la pasaría buscando dentro de media hora, debía apurarse.

Arregló su cabello y lo dejó suelto, así le gustaba mucho más, ya que se podía ver lo largo y bien cuidado que lo tenía.

Estaba bajando las escaleras cuando le llegó otro mensaje de su novio.

Jungkook.
Cariño, ¿Estás lista?