Capitulo III : Nuevos Aprendizajes

12 5 0
                                    

Habían pasado 2 meses desde el inicio de las vacaciones y, con el fin de estas nuestros jovenes regresaban a la ciudad con el corazón hecho pedazos al no poder encontrar a Lillyan en ese tiempo...


La ciudad se veía tan familiar pero tan diferente para todos, excepto para Ghost, que no lograban entender cómo un solo acontecimiento puede cambiarlo todo pero así era porque era más que eso...Uno de ellos ya no estaba y eso no podría ocultarse nunca, tan sólo en pensar que en menos de una hora le tendrían que dar esa noticia a la familia de Lillyan les dejaba un amargo sabor en la boca pero debían ser fuertes, como siempre lo han sido cada vez que estaban juntos

Han pasado 2 meses desde que Lillyan no veía la luz solar, desde que ha tenido que soportar las torturas y desprecios de ese anciano Rey; cada vez peores al no querer doblegarse ante éste

Su cabello seco y sin brillo, su pálida y dañada piel la hacían ver cómo una persona completamente diferente pero eso ya no importaba, aunque le obligaban a beber de aquel asqueroso líquido tan parecido a la sangre cada semana sólo lograba sentirse aún más débil, Lillyan no sabía si aquella sustancia era para mantenerla viva o para matarla lentamente pero pensaba que moriría ahí de todas maneras


Las cadenas en sus muñecas ya casi no las sentía por la presión y pérdida de sangre de éstas, no sentía fuerzas en sus brazos ni piernas y, sabía que si en cualquier momento le soltaran los agarres no podría volver a levantarse del piso... Se sentía humillada y perdida, sentía que podía volverse loca en cualquier momento sin que le importara a sus "carceleros"

No sabía cuánto tiempo había pasado ni cuánto tiempo más pasara hasta caer inconsciente de nuevo pero ya no le importaba, en eso pensaba resignada a morir cuándo sintió temblores desde el techo antes de que explotara la pared detrás de ella logrando que parte del techo se rompiera y ella cayera al suelo

Lillyan estaba confundida por lo que lo único que hizo fue quedarse inmóvil observando como una nube de polvo se disipaba y unas siluetas se acercaban a ella, las 2 primeras siluetas parecían de hombres y la otra era femenina

-¿Estás Bien?- Preguntó la chica agachandose para estar a su altura, Lillyan empezaba a ver todo borroso por lo que no pudo distinguirla

-¿Cómo es que estás aquí?- Preguntó uno de los hombres con una voz algo seria pero aún así no pudo decir nada cuándo sintió unos brazos alrededor de su cuerpo

-No hay que ser tan bruscos, se nota que no está en buen estado- Aclaró el otro hombre mientras cargaba a Lillyan antes de voltear a verla- Descuida ya paso, estarás bien- Susurró antes de que Lillyan cayera inconsciente en sus brazos

-Debemos Irnos- Fué lo último que dijo el hombre que observaba la zona antes de que los 3 se fueran rápidamente con Lillyan ya Inconsciente


Pasaron 2 días hasta que Lillyan abrió los ojos encontrándose con una habitación de madera algo rústica pero muy acogedora y reconfortante, estaba en una suave cama observando algunas decoraciones cuando abrieron la puerta de la habitación


Entraron una Joven de Piel Clara, su cabello Anaranjado caía en rizos hasta un poco más abajo de sus hombros y sus ojos Azules desprendían una amabilidad sumamente inocente, tenía una bandeja en sus manos dónde se podían ver varios alimentos junto a un Hombre Blanco de contextura un poco robusta, su cabello Castaño Claro estaba algo desordenado provocando que algunos rizos casi tapan por solo unos centímetros sus ojos Amarillos con una gran intensidad

El Inicio de La Orden (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora