4

973 80 1
                                    

-Hola Mamá - dijo alexander, mientras contestaba su teléfono.

-Hijo, ¿porque no...-la interrumpe alexander

- Te he visitado? -termina alexander - He estado ocupado - dice caminando hacia su pequeña sala de estar.

-Sí claro-dijo.

-Madre, tienes que calmarte - dijo alexander.

-Alexander, no me puedo calmar. Eres mi único hijo, me preocupo mucho por ti.

- Mama, casi cumplo 25.

- No me importa, tu sigues siendo mi bebe- dijo y él sonrió

- ¿Cómo esta madre?, ¿te has estado tomando tus medicinas?

-Si cielo, pero si la señorita Cleo dejara de gritar y protestar, mis dolores de cabeza ya hubieran desaparecido.

- ¿La señorita Cleo?, ¿nuestra vecina? - pregunto.

-Si no para de gritar y de hacer protesta, sobre que las nuevas especies deberían de regresar a los laboratorios o que deberían estar muertos. Si te soy sincera siento algo de pena por ellos.

-Madre ellos son animales, no personas - dijo mientras veía todos los papeles que se había traído del trabajo.

-Alexander palacios - dijo su madre exaltada y furiosa.

-Perdón madre, pero esa es mi opinión - dijo.

-Alexander, hijo. Físicamente somos iguales, por dentro, ellos tienen las de ganar. Pero no lo hacen porque tienen un buen corazón, como todos lo humanos y como todas las criaturas.

- Madre, debo colgar- dijo.

- ¿Porque cuelgas? ¿Dije algo malo? – hablo rápidamente su madre

- No madre, claro que no, solo que debo trabajar... te llamo después ¿sí? - dijo

-Claro que si hijo... Alexander - dijo

- ¿Sí?

-Te quiero mucho hijo- dijo.

-Yo también - dijo y colgó, continúo trabajando mientras en su cabeza se repetían una y otra vez las palabras de su madre.

Por alguna razón, esas palabras no salían de su mente.

Alexander se preguntó por primera vez en su vida, si tanto dinero valdrá la pena, por el sufrimiento de las personas.

Al día siguiente, Alexander se levantó con pocos ánimos de ir a trabajar, unos momentos antes de ir a su trabajo, Alexander se dispuso a investigar sobre las nuevas especies. No de las encarceladas si no de las libres. Después de un rato de investigación, encontró un artículo que se llamó su atención.

Hace unos días, se llevó a cabo una reunión con el líder de las nuevas especies, Justice North, quien dio un discurso dirigido a los protestantes anti nuevas especies. Donde este deja en claro que no son una amenaza.

Alexander se detuvo ahí, cerro su computadora. Y se fue trabajar aun con la mente en las nubes.

Fue a trabajar y le dio clases a Ángel como de costumbre, otra vez volvió a quedar impresionado por ella, era tan inteligente, en unos cuantos días aprendió lo que muchos tardan toda la vida.

Meses Después

-Mama, ya te dije que pronto iré a visitarte - dijo mientras buscaba unos papeles, que le entregaría al director Stevens por la mañana-Si madre lo que tu digas - dijo ignorando completamente lo que decía su madre.

- ¿Dónde deje esos papeles? -pensó.

-Alexander, ¿Qué tanto haces que ignoras a tu madre? - dijo molesta al otro lado del teléfono.

ANGEL (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora