No se pudo evitar

2 0 0
                                    

No se pudo evitar la desgracia. Nunca se pudo evitar, si hubiéramos sabido que decisiones nos causarían este daño creo que almenos se hubiera evitado pero no se pudo.

Éramos como ovejas sin pastor, cada quién por su lado y veo que incluso ahora seguimos siendo así, no tenemos una meta, un sueño, ni una razón para seguir adelante, lo más terrible de eso es vivir por vivir.

Cuando llegamos a España la única que pudo trabajar fue mamá, trabajó duro por unos centavos y con esos centavos sobrevivíamos todos, así como fuimos consiguiendo trabajo, fuimos consiguiendo deudas, siempre estábamos atados a deudas, incluso desde que era pequeña recordaba las salidas de mamá al banco a pagar y nisiquiera sabía que era lo que debía.

No tenemos metas pero de algo estoy segura, no quiero vivir así y no quiero que el banco se siga llevando nuestras esperanzas, quiero poder luchar y nisiquiera por mí, quiero luchar por mis sobrinos, aquí entre nos creo que son nuestro motor y nuestra única razón para seguir, son esa única luz que alumbra, las últimas fuerzas que tenemos. Estamos cansados realmente lo estamos, lo supe cuando nos subimos al carro y todos queríamos chocar, como es que 7 personas quieren morir y no les importa más nada, cuanto es el daño que tiene que tener uno para darse cuenta que toda su familia quiere ese vil final, todos con los ojos rojos, tristes y cansados, con ropa de segunda o de caridad, recordando lo que fueron y lo que son, viéndose unos entre otros y no reconocerse.

SOMOS LOS QUE SOMOS ESTAMOS TODOS DESUNIDOS PERO QUEREMOS AMOR.

No pudimos evitar la desunión y el rencor, los gritos y los golpes, no pudimos evitar dañarnos entre nosotros, pero, lo más desolador es que si pudimos evitar perdonar, evitamos olvidar y evitamos amar.

Nos pudimos evitar caer, pero, si aprendimos a evitar sentir.

La casa de PandoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora