Amores cruzados

Capitulo 3

El nudo en su estomago no pasa, al contrario, se intensifica. Con cada paso que da la morena empieza a sentir que le falta el aire. Traga forzado e intenta controlar su respiración, hiper ventilar solo le causa mareos. "Estúpidos nervios". Tiene que controlarse, se encuentra en el lugar que la terminará de forjar y la hará una exitosa mujer.

-¿Estas bien?- La cara de su amigo muestra preocupación.

-Si, sólo... Necesito ir al baño. Nos vemos en la clase, ¿Te parece?-

-Esta bien, pero no llegues tarde-

La joven se marcha a paso apresurado. No se dirige a los baños como le había dicho a su amigo, sino que sale del edificio a donde el aire pueda hacerle pensar con claridad. -Controlate... Respira profundo...-

Aquellos ataques de ansiedad no es novedad en ella, le sucede desde hace años y es debido a una crisis de pánico que le provoca la aglomeración de personas en un espacio relativamente pequeño. Mas específicamente, cerca de ella. Se supone que es algo que ya tiene controlado, pero no es así.

-¿Estas bien?-

Korra se sobresalta al escuchar la voz de una chica. Estaba tan nerviosa que no sintió la presencia de alguien mas. Aquello le acelero el pulso al punto de sentir que explotaría en su cuello.

-Si.. Es solo... La cantidad de gente- Intenta explicar la morena.

-Entiendo-

Korra gira el rostro para así ver a la que se acercó. Una chica del piel blanca y de ojos verdes la miraba con una ceja alzada. "¡Genial! Pensará que soy una loca".

-Deberías tomarlo con calma, o no llegaras al fin de semana-

La morena gira los ojos. La chica suena como su mejor amigo, aunque una parte de ella le dice que ambos tienen razón pero que se lo digan seguido no le agrada mucho.

-Lo tendré en cuenta, gracias.-

-Bueh, suerte-

La chica sin mas ni mas se marcho. Korra se le queda observando, mirando primero el trasero de aquella mujer y luego en el tipo de ropa que lleva. "Sin duda alguna, es otra mas de las niñas ricas que vienen a este centro de educación."

-Y no le pregunté cómo se llama...- se lamenta torciendo la boca. Ve a una chica hermosa el primer día de clase y no puede mas que decir tonterías en lugar de presentarse. En ese momento su móvil suena. Es Mako.

"¿En donde estas? Ya es hora de entrar. Trae tu trasero al aula ya mismo"

Sin dejarla responder el chico colgó. "Que genio se trae" Suspira. Korra sabe perfectamente que su amigo no es de esperar, no tiene nada de paciencia.

-¿En donde te habías metido?- Pregunta el chico de ojos color ámbar una vez la morena se sienta en su lugar.

-Después te cuento- Responde esta.

A Korra le faltó poco para llegar tarde, aunque de igual forma el profesor comenzó la clase con diez minutos de retraso para esperar a los pobres novatos perdidos. 

La clase se les fue rápido a los chicos que matricularon para el primer semestre todas las materias juntos. En la siguiente asignatura no les fue muy diferente a la primera y luego de eso tuvieron una hora libre antes de la hora del almuerzo. En ese tiempo, los dos jóvenes se encargaron de pasearse el edificio para tener una idea de en donde verían las clases. Faltando unos minutos para el almuerzo, decidieron ir hasta la cafetería en donde verían probablemente a sus compañeros de piso.

-Este lugar es de locos ¿No?- Pregunta Korra tomando asiento.

-Si, un poco- Mako alza los hombros. Toma asiento y busca en sus bolsillos algo de dinero. -Tocará comprar algo...-