(Tom Riddle; Pedido).

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Advertencia: Ninguna.

Pedido por: Airam_Potter

-Tom Riddle.

La obsesión de Tom Riddle era casi enfermiza con Ophelia D'More.

Era casi inimaginable el saber el como una chica dulce e inocente como lo era aquella Hufflepuff hubiera caído en las garras de alguien tan cínico como lo era el Slytherin.

Riddle era posesivo, del tipo de persona que al solo mirar sabías que no era bueno meterse con él, porque las cosas siempre jugaban a su beneficio, él las hacía funcionar a su manera.

Nunca jugabas tu juego, jugabas su juego, son sus reglas.

El chico era guapo, no podía negarse, poseía una hipnotizante mirada, de estatura alta, con un cabello negro revoltoso y una mandíbula perfilada. El sabía como jugar, sabía como persuadir, él siempre tuvo las manos sobre Ophelia.

Oh, dulce Ophelia, te metiste entre los colmillos de la serpiente.

Tom ya la había marcado como suya desde el momento que posó su mirada sobre ella en la biblioteca de cuarto año. La evidente inocencia y aura blanca que enrollaba a la morena le pareció hipnotizante, él quería hacerla suya, quería arrebatarle hasta la gota más pura de su ser, él quería ser el único que causara un efecto en ella, él solo quería que Ophelia tuviera ojos para él.

Porque sin querer, la chica le había demostrado el cariño que le había faltado, y él se había aferrado a eso, pero de una manera equivocada.

Porque Tom Riddle no podía amar.

No podía amar a Ophelia.

Y como no podía amarla, la haría de su propiedad.

Todo había empezado bien, incluso el mismo Albus Dumbledore había creído que Tom Riddle aún tenía una esperanza en el mundo.

Ophelia y Tom eran completamente opuestos, mientras uno era como los días grises con rayos y una lluvia intensa. Otro era el mismo día caluroso perfecto para un helado.

Incluso el pequeño gato de Ophelia se había encariñado con el Slytherin, y la serpiente del nombrado se había hecho amigo del gato negro (el cual, sorprendentemente nunca crecía).

Eran una pareja oficial, para sorpresa de la mayoría, Todo pintaba ir perfecto, pero Ophelia se dio cuenta que algo andaba mal cuando la mitad de sus amigos ya no eran sus amigos, o cuando reemplazó las tardes de risa y diversión con sus amigos a tardes y noches tristes y sola, pero con la presencia de Tom a su lado.

Ophelia seguía teniendo su inocencia, pero la flamita de luz empezaba a querer desaparecer.

Los celos de Tom eran de otro mundo, Ophelia no entendía el porqué el pelinegro se enfadaba cuando ella le sonreía a un chico a modo de disculpa por haberle chocado. No entendía el porqué se sentía tan miserable cuando Tom le sonreía a la chica un año mayor que ellos.

Ella solo estaba ahí, porque aún dándose cuenta que algo andaba mal; quiso estar con Tom, para darle el amor que tanto de le había faltado.

Aún cuando él no podía amar, ella solo quería estar ahí para él.

 Ophelia poseía una pequeña manchita en la parte derecha de la frente. A Tom le encantaba esa manchita, también le encantaba tener el cuerpo de la chica contra él, le encantaba saber el efecto que causaba en la Hufflepuff, le encantaba saber que era suya.

No le importaría matar para que Ophelia se quedara a su lado.

Su inocencia lo cautivaba, le hacía querer tener el deseo de destrozarla, sentía una clase de excitación cuando Ophelia lloraba e iba con él, sentía el deseo de estar con ella siempre.

Pero Tom tenía otros planes para el futuro, porque él ya no quería ser Tom Riddle, él quería ser Lord Voldemort.

Además, Ophelia sería una "desgracia" para su lema de "Sangre pura".

El quería tener a Ophelia con él, para siempre. Pero eso significaría una deshonra en su futuro como Voldemort.

Así que decidió una manera de mantenerla con él.

Él lo decidió.

Lo hizo.

Ni si quiera preguntó sobre la opinión de la castaña, el solo hizo el hechizo. Asesinó y fue con Ophelia.

Le costó una parte de él, pero otra parte estaría en el alma de Ophelia.

En un Horrocrux. Guardó una parte de su alma en Ophelia.

Porque a donde sea que él fuera, ella iría con él sin importar que.

Ophelia no tuvo un final feliz, pero ella mantenía la esperanza de saber que al menos, por un tiempo, causó algo en el chico misterioso de la biblioteca.

Ella solo quería hacerlo feliz, y él terminó arrebatándole su propia felicidad.

Esa noche Ophelia desapareció.

Y Tom Riddle salió como inocente, desconociendo el paradero de su novia, manteniéndose firme ante el agarre de la mujer la cual sería su suegra. Con una inocencia más falsa que la fuerza de una pluma ante los ojos de Albus Dumbledore.

El pequeño gatito negro de Ophelia también desapareció, dando por dada la presunta muerte de la chica.

Porque el gatito era una muestra del alma de Ophelia, y si la alma de ella ya no estaba, el gato tampoco lo estaría, y Tom, tendría a Ophelia a su lado.

Para siempre.








¡Hola! Perdón por tardar con tu pedido, sé que te he dicho lo mismo en varias ocasiones, pero no puedo evitar los problemas que surgen, afortunadamente (si podemos llamarlo así) estaba inspirada para tu OS triste ajksa. Espero que te haya gustado, lamento no haber podido poner un guión, pero creo que me he dado a entender con la narración de todo.

Para aclarar, el gatito de Ophelia representaba su alma e inocencia, por lo mismo de que nunca crecía, significaba que seguía siendo un alma pura e inocente, y el día de su "desaparición", el gato dejó de estar ahí, dando por terminada la inocencia, y con eso vida, de Ophelia.

ONE SHOTS (HP UNIVERSE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora