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Los reflectores de luz daban directamente a sus azules ojitos lastimandolos, mientras levantaba una de sus manitas para cubrir sus ojitos del daño, vistiendo una camisa que adornaba su pequeño cuerpo, con encages en las muñecas y en su cuello, unos pantalones negros que envolvian sus delgadas piernas y un pequeño saco sobre la camisa, su cabello oscuro tirando al plateado, le caia en pequeñas ondas sobre su frente, las maquillistas le habian puesto un pequeño rubor en sus blancas mejillas y pequeñas sombras en sus ojos. Se veia como un pequeño principe, un principe pequeño y adorable.

Taehyung adoraba las seciones de fotos, para él significaba diversion, podia reir, difrutar de las poses, estas iban desde atrevidas a tiernas e inocentes.

El flash de la camara indicandole que debia tomas iniciativa y moverse a una pose mas cautivadora que la otra.

De pronto escucho los sonido del director diciendo que ya habian terminado.

--------- Taehyung-shi, ya terminamos cariño, puedes ir a cambiarte.
---------¿si? ¿Lo hice bien?---- pregunto inocente el pequeño ojiazul.

--------- !Porsupuesto¡ -------- chillo emocionado el beta -------- tu rostro es perfecto para las camaras.

Con gusto el pequeño ojizul se despidio del equipo de trabajo y con una sonrisa de oreja a oreja, se fue saltoneando hacia su camerino. No podia esperar quitarse esas ropas un tanto ajustadas que lo hacian sentir un poco incomodo. 

Aunque no podia negar quee se veia realmente bien en ellos, a  el le gustaban mas las cosas hanchas y holgadas.

Se puso uno buso chandal y una gran camisa, y claro no podia olvidar el collar de proteccion para su bonito y delgado cuello.

El pequeño podia pucherrear y hacer rabietas todo lo que quisiera al no gustarle dicho artefacto, pero tenia que obligarse a si mismo a usarlo por proteccion y seguridad, pues no queria quedar ligado a algun alfa que lo obligara, ya habia sucedido antes con muchos artistas omegas.

El pequeño Taehyung con 17 años habia debutado como solista en los EEUU, su hermoso rostro y angelical voz lo habian llevado a la fama.

Era joven si, pero eso no le habia impedido ganar fama en el mundo del espectaculo, lo cual conllevaba la admiracion de muchos fans, desde omegas, betas e incluso alfas.  Los ultimos en muchos casos  obsecionados con el pequeño, mas de 3 se habian colado en las instalaciones del la empresa que representaba  a V, el nombre artististico del muchacho, otros en la casa o el apartamento en el  que el pequeño omega vivia, todo con la intencion de marcar al menor.

Esa era la principal razon por la que el pequeño  estaba bajo la proteccion de varios guardaespaldas.

La empresa debia proteger a su artista.
Ya era de noche y lo unico que queria el pequeño era volver a su cuarto, encontrar a su pequeño Yeotan  y dormir calentito  por muchas horas.

Las calles de New York se veian tan iluminadas que parecian que muchas estrellas se habia  parado, tambien se veian llenas de gente de distintos lugares y origenes, eso era lo que le gustaba al pequeño,  la libertad de expresion y la aceptacion que se veia en las calles, sin importar el origen, nacionalidad o aspecto todos  vivian como les gustaba, nadie recriminaba y la mezcla de cultura en eso le encantaba.

Sus ojitos querian cerrarce de una, pero se obligo a mantenerlos abiertos,  pues no encontraba un lugar mas seguro fuera de su pequeño apartamento.

El muchacho  comenzo a mirar su celular la hora marcaba las 22: 34, fruncio el ceño extrañado ya debian haber llegado hace una hora a su casa, considerando que el pequeño salio del estudio a las 21 :00, comenzo a golpear la ventana que lo separaba de la canina del conductor, pero nadie respondia,  su corazon comenzo a latir rapidamente y la garganta se le seco.

Metamorphosis ♥️ VKOOK😊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora