Lujuria | OneShots Bnha

▪️Capítulo II

—Ahora, limpialo — colocando su miembro frente a mi boca, Overhaul sonrió de lado. Sus órdenes para mí eran ley, tenía que seguirlas; además esta ya no era la primera vez que me pedía algo así.

Desde la primera vez que lo hizo, él no había parado, no le importaba si alguna otra persona nos veía o si estaba en plena conferencia, él seguía pidiéndolo. Mi boca para este punto ya se había vuelto hábil, sabía dónde tenía que lamer y tocar para que él terminara rápido y me dejara ir.

—Agh.. Si... Si... — colocó su mano sobre mi cabeza, la empujó y luego él dejó caer la cabeza sobre el sofá — Y-Ya casi... ¡Ngh!

Al llenar mi boca con su semen, tomé un pañuelo que había en una caja sobre la mesa y ahí escupi todo. La cara de molestia de Overhaul me dijo que había hecho algo malo, pero lo ignoré; había cumplido con mi trabajo de hoy, así que dudaba que me llamara para algo más

—Bien, me re- — al ponerme de pie y sacudirme la ropa tenía la esperanza de ya no verle la cara, pero él me detuvo

—Alto, necesito que vengas al laboratorio — se puso de pie al igual que yo, se acomodó la ropa y el cinturón —. La niña quiere verte y tu eres la única que la tranquiliza.

—Eri...

Esa niña era la nieta del antiguo jefe, pero desde que enfermó y Overhaul tomó el cargo, a Eri... La usaba para sus experimentos; se que eso estaba muy mal, de que torturaba a una pequeña niña pero... Yo también tenia miedo, si abría la boca y le pedía que se detuviera, ¿quizás haría lo mismo conmigo?

—Bien — bajé la cabeza y seguí a Overhaul por el enorme laberinto que había creado para ocultar su oscuro secreto. Al llegar a la sala donde Eri dormía y "jugaba", la niña corrió hacia mis brazos y yo la cargué — Hola, Eri. Hace mucho no te veo, ¿cómo estás?

—Bien, te extrañé mucho... — al ver sobre mi hombro, observó a Overhaul detrás nuestro. La niña comenzó a temblar y me miró de reojo — P-Por favor no...

—Lo lamento Eri... — la abracé con fuerza, como si eso pudiera tranquilizarla a ella y a mi. La niña escondió su rostro en mi pecho y comenzó a llorar.

Con ella en brazos me dirigí al laboratorio acompañada de Overhaul, senté a Eri en la silla y él le colocó aquellos cinturones en los brazos y piernas para que no se moviera. Yo me quedé a su lado, sosteniendo su mano con fuerza para que no sintiera que estuviera sola, luego cerré los ojos y... Todo sucedió como siempre

En ningún momento solté su mano, esta era la única forma de tranquilizar a una pobre niña que sufría al igual que yo 

—Lo siento Eri... En verdad lo siento tanto...

—Dejala ahí y ven conmigo

Obedeciendo a Overhaul, dejé a Eri sobre la cama, ella estaba inconsciente así que la dejaría descansar un rato. Con suavidad acaricié su frente, acomodandole el cabello que tenía ahí y le di un beso en la frente