Jugando a ser dioses una asquerosa tribu de primates se levantaba entre animales gigantescos, plantas de 10 a 12 metros de altura, anchos exorbitantes, un paisaje fuera de escala para los nuevos iniciados. Recursos ilimitados, mil millones de cosas por descubrir.
Lo primero que aprendimos fue a luchar, como salvaje acabábamos con todo a nuestro paso, todo aquel recursos vital se convertía en la zona exclusiva para el progreso. Pequeñas aldeas se crearon, entre pueblos nómadas y sedentarios, ocurrían batallas, pactos de paz y guerras.
incluso después de miles de años seguimos luchando por sobrevivir. Sabemos construir edificios gigantescos, conservar energía y producirla. Y aún así, no sabemos vivir.
En la Tierra M20 los humanos empezaban a evolucionar poco a poco.
Albert había despertado por fin de su siesta matutina. Xao lo miraba como si de una flor sin marchitar se tratara. El calor era abrazador. El infierno sobre la tierra. Está vez se habían topado con una tierra de humanos estúpidos. Que lanzaban sus hachas contra ellos, sin acertarles ni un solo tiro, ni mediar palabras. Sentados sobre las hojas de un árbol gigantesco, observaba por primera vez la Tierra M20, animales del tamaño de edificios rondaba bajo sus pies, el viento era mucho mas pesado, la luz mas tenue la civilización era primitiva de grado 0. Mientras que Albert se despertaba, a Xao preparaba el desayuno. Bajaba volando y agarraba materiales extraños que utilizaba como implementos para su obra maestra. Con los ojos entre cerrados Albert recordaba la primera vez que había probado un material extraño en otra dimensión. Recuerda que se encontraba en una habitación en fuego, escombros caían a su alrededor, sangre, muerte y demás se respiraba a su alrededor, de repente al cerrar los ojos, todo había desparecido. La casa estaba intacta, no había guerra, sus padres estaban sanos y salvo. El pueblo era hermoso y totalmente renovado. Existía tecnología que nunca había observado, aparatos digitales, táctiles, e incluso algunos que tenían imágenes en movimiento dentro de ellos, tan delgados como la palma de su mano. Pero apesar de todo ello, el seguía teniendo el mismo sueño diariamente. Un ser de ojos violetas lo sacaba del fuego, lo introducía por una brecha y ahí todo era oscuridad, desaparecía para siempre.
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Vida
Historical FictionNovela de ciencia ficción. Capítulo uno, como se originó la vida. Todo un universo por descubrir. Mil millones de mundos por conocer.