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De Lunes a Viernes. Desde mi primera clase hasta la última se la pasaban pidiendo detalles acerca de mi "encuentro" con One Direction. Nunca me gustó tener tanta atención, obviamente el hecho de conocer a 1D te hacía "diferente" a los demás y no porque lo dijera yo o porque realmente fuera así. Las personas se dedicaban a tratarte diferente.

Mi instagram estaba lleno de seguidores, likes y comentarios. En mi Twitter no faltaban las menciones y mensajes directos de quienes ya había seguido antes. Mis mejores amigos Rodrigo y Lucy me convocaron a una videollamada para que les contara todo lo que había pasado.

Sin embargo Becca, ella me seguía tratando igual que siempre. Ya la podía llamar amiga, teníamos la suficiente confianza entre las dos como para llamarnos amigas.

Un jueves en la noche John y Becca me invitaron a cenar. Parecía que ella se estaba comenzando a enamorar, mientras que a mí, John seguía sin parecerme agradable. Tal vez me invitaron a cenar solo para hacerme cambiar de opinión.

-La comida es muy buena aquí ¿no creen? –preguntó el muchacho.

-Si, es bastante buena –respondí.

-Necesito ir al baño –dijo mi amiga.

Se tardó aproximadamente 5 minutos, probablemente los 5 minutos más largos de mi vida. Venía caminando directamente hasta nosotros y un chico venia justo atrás de ella. Al parecer John notó que el chico no le apartaba los ojos a su conquista. El se enojó.

John se levantó y la jaló del brazo con fuerza llevándola hasta afuera. Me quedé helada, la gente miraba para fuera presenciando la escena de celos que John había montado. No lo pude soportar, me levanté y corrí hasta ellos. El muy desgraciado le decía cosas realmente desagradables, pero la gota que derramó el vaso fue cuando alzó su mano, el iba a pegarle.

-No te atrevas –grité tomando su mano desviándola de mi amiga.

-No es asunto tuyo! –me gritó.

No supe que hacer, solo deje que mi mano se estampara en su mejilla. Juro que le dejé la marca de mi mano. Becca y yo recogimos nuestras cosas y salimos de ahí. La pobre estaba que no lo creía, sollozaba y murmuraba pestes en contra de el. Su rímel había dejado marcas debajo de sus ojos y su cabello estaba ligeramente desordenado gracias a las sacudidas que el estúpido de John le había propiciado.

Al llegar a nuestro dormitorio trate de consolarla, pero no sirvió de mucho, ella estaba emocionalmente lastimada. Supongo que nunca antes había sido tratada así por un chico, es más, me atrevía a pensar que nadie la había tratado así jamás.

(...)

Era sábado y para hacer sentir mejor a Becca, un grupo de amigos y yo decidimos salir a un club nocturno que no quedaba lejos de la Universidad. Los padres de Becca recién le habían comprado un auto así que saldríamos en el.

-Espero que no vomiten dentro mi auto –sentenció ella.

-Tranquila, solo bajas la ventanilla para dejarnos hacer lo nuestro –bromeó Ashley, una de las chicas de su curso.

Habíamos 3 chicas y 4 chicos en su auto, de alguna manera nos la ingeniamos para entrar. La música de Ellie Goulding retumbaba dentro del auto, en lo personal amaba cada una de sus canciones y me entraban unas tremendas ganas de moverme al son de su música. Aparcamos en el estacionamiento del club que nos recomendaron. Supuestamente era un lugar animado, pero a su vez tranquilo sin muchos problemas. Era perfecto para pasarla bien con tus amigos.

-No tomare tanto –aseguré –tal vez necesitarán que alguien los lleve de regreso a la universidad.

-Tu relájate muñeca –me abrazó Frank, era un muchacho estadounidense que estudiaba una ingeniería –tu disfruta la noche.

Nos adentramos al lugar. Las luces estaban tenues y aún no había mucha gente. Nos acompañaron hasta una mesa VIP en la que una vela iluminaba el pequeño espacio, además de unas cuantas luces resplandecientes en varios colores. Cada quien pidió una bebida, para empezar yo pedí una piña colada, como había dicho antes no tenia intenciones de beber mucho.

El lugar comenzó a llenarse poco a poco. Tenía frente a mí a muchos chicos atractivos, y gracias a un segundo trago, pero ahora de vodka, me paré y comencé a bailar al centro de la pista junto con Becca. El sonido encendía todos mis sentidos, la pista comenzaba a llenarse y la euforia crecía gracias al alcohol que se encontraba en mis venas.

Un apuesto chico se paro frente a mí, me tomo de la cintura y sin poder resistirme baile junto con el. Era un tipo alto, moreno y con una mirada penetrante. Me sonreía y sin poder evitarlo hacia lo mismo con el.

-¿Cómo te llamas? –preguntó.

-Samantha y ¿tu?

-¿Eso importa? –soltó una risa picara –probablemente el día de mañana no recuerdes mi nombre –se acercó a mi y si no fuera por la poca cordura que aún me quedaba, el hubiera alcanzado a tomar mis labios a su conveniencia.

-No deberías hacer eso –susurré entre risas.

-Estas demasiado borracha lindura –se acercó un poco mas a mi –será fácil... tarde o temprano caerás.

Lo empuje hacia una de las mesas. El alcohol me hacia ser mas valiente, le escupí y volví a la mesa en la que mis acompañantes se encontraban. Uno de ellos llamado James me miró un poco confundido.

-¿Viste esa escena? –pregunté.

-Si y pienso que deberías de dejar el alcohol.

-Hmm... no lo creo.

Me sentía poderosa y feliz. Me divertía sentirme valiente y alocada, yo no estaba familiarizada con ese sentimiento, pero verdaderamente lo estaba disfrutando.

-Hey James, déjala en paz –comentó Frank –solo se esta divirtiendo, ¿no es así?

El chico también estaba pasado de copas. Me compartió de su bebida y no paramos de hablar y hacer bromas con las personas a nuestro alrededor. Al pararme todo dio vueltas, las risas no paraban y mis ganas de bailar aumentaban. "Jamás me había divertido tanto" grité mientras bailaba con Frank el futuro ingeniero.

Ya era tarde, sin embargo no tenia ganas de salir de ese lugar. Quería seguir bailando y disfrutando toda la noche. Me perdí entre la multitud con Frank, no supe de los demás hasta que Becca nos encontró para decirnos que nos teníamos que ir. Camine hasta la mesa, busque mis cosas y me tome del brazo de Frank. No quería caerme, pero al parecer el no estaba siendo de mucha ayuda ya que se encontraba igual que yo.

-Ven aquí –me tomo uno de mis amigos por la cintura sacándome al aire fresco de la madrugada. Subimos al auto y en cuestión de segundos no supe de mí.

(...)

El sol estaba dándome directamente en los ojos, bostecé y trate de ver la hora en mi reloj de pared, sin embargo no estaba ahí. "Maldición, me robaron" Estiré mi brazo para alcanzar mi celular, siempre estaba en mi buró al amanecer. Pero no encontré mi buró. Me levanté de prisa al sentir a una persona justo a mi lado. Me calmé al sentir mi ropa puesta y al darme cuenta que era Rebecca quien estaba a mi lado. En la otra cama estaba Ashley y James, Frank estaba a sus pies y los otros dos chicos estaban tendidos en el piso.

"Esto no esta bien, dónde estamos?"

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HOLA! Espero que les haya gustado el capitulo, se que quieren mas de 1D, Sarry y Elounor, pero tranquilas mas adelante se vienen cosas muuuy buenas ;)

Gracias por cada voto, cada comentario! Las amo demasiado -Vanessa xx

Clouds. (One Direction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora