Fire Queen 4Ta Temporada

Canadá

Chapter °3

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Llevaba horas volando sin rumbo alguno, volaba sobre las nubes sintiendo la calidez y el silencio del entorno, era preciosa la vista y había asegurado hace tiempo que se lo mostraría a mi bebe algún día, pero ahora no se podría. Gruñí furiosa para descender abruptamente sintiendo el frio acercándose... ¿Frio? mi vista se vio afectada un poco por la neblina pero cuando pude ya ver todo en HD de nuevo era tarde, tropecé con una antena de comunicaciones haciendo que deshiciera mi fuego y chocara contra el suelo. Levante mi cabeza adolorida, aun mi cuerpo al parecer no estaba de todo curado y el golpe me había dejado peor, sentí mi nariz rota y de seguro mi muñeca; vi como alrededor mío había nieve al montón. Ay no... apoye mi mano izquierda en la nieve y logre levantarme, mi cuerpo tembló por primera vez luego de tanto tiempo ¿Dónde estoy?, con fuerza tome impulso para hacerme de fuego y volar pero lo único que hice fue saltar muy alto y caer de nuevo al suelo, solo que de pie. Nuevo dato para mis poderes: No tolero temperaturas tan bajas.

Camine por minutos hasta lograr dar en un lugar decente, en donde se veían casas y tiendas, algo civilizado al menos; no como lo aislado en donde había caído. Sentí mi cabeza doler y mis piernas flaquear, camine un poco hasta poder sentarme en la calle, todo el mundo me miraba como rara de seguro por el traje y mi aspecto.

- ¿_____? - alce la mirada para encontrarme esa mirada café rojiza que tanto me agradaba

- ¿Pietro? - sentí una ráfaga de viento tomarme como princesa y en un parpadeo lleno de frio por el clima y la velocidad estábamos dentro de un apartamento, creo

- ¡Dios ____! Estas helada - me dejo sobre un sofá para correr hacia el cuarto de pronto y al momento ya estaba frente a mi con una manta, la cual tome agradecida para empezar a calentarme un poco 

- ¿Qué haces aquí? - pregunte tiritando 

- ¿Yo que hago aquí? - pregunto sarcásticamente - ¿Tu que haces aquí? Iré a traer un botiquín

- No hay necesidad, no me quedare - dije levantándome del sofá pero mis piernas flaquearon y cuando creí que caería aparecí de nuevo en el sofá con Pietro a mi lado - Gracias Pietro

- De nada - respondió incomodo levantándose, camino hasta el sofá de al lado y se sentó en el 

- ¿En donde estamos? - pregunte de nuevo

- Digamos que vivo aquí

- ¿Hace cuanto? 

- Desde lo de Sokovia, este es mi hogar

- ¿Y exactamente donde estamos? 

- En Canadá - desvié la mirada incomoda, debía controlarme - ¿Qué haces aquí? 

- Paso lo que dijiste

- ¿Qué dije según yo? 

- Perdí a mi Bebe - dije aun sin mirarlo

- Yo... yo nunca dije eso

- Pero lo advertiste, y yo no escuche... y mira en lo que termine

- Si, tal vez pero... no esperaba que sucediera algo malo

- ¡Pues ocurrió! - respondí girándolo a ver - ¡Sucedió, y todo por mi maldita culpa! - tape mi rostro con mis manos y la manta soltando en llanto - Me siento tan inútil

- Hey tranquila, tranquila - repitió Pietro, al segundo sentí sus brazos sobre mi cuerpo acariciándome, tratando de consolar la amargura y dolor que sentía en estos momentos - ¿Dónde esta el Capitán Rogers? 

- Supongo que en Wakanda, debió de regresar... no lo se 

- ¿Te llevo? 

- Pero es mucha distancia

- ¿Quién dijo que te llevare cargada? 

{ ... }

- Señorita - llamo el conductor a lo que gire a verlo - ¿segura que esta bien? No parece captar bien las cosas

- No se preocupe

- ¿Su novio le pego? - pregunto el conductor a lo que lo mire confundida - Su novio - señalo a Pietro que venia con una maleta de viaje en su mano izquierda - ¿Le pega? 

- El no es mi novio - conteste viendo todo nubloso, tome mi cabeza tratando de reprimir el dolor - Es mi amigo y me salvo de morir - susurre recordando a Andrew, ¿por que siempre termino al borde de la muerte? 

- Creo que ya podemos irnos - aviso Pietro entrando en el Taxi - ¿Estas bien? - asentí - 

- Me gusta tu nuevo corte de cabello

- Gracias, supongo - se formo un silencio incomodo, solo miraba mis dedos jugar entre ellos nerviosa; estaba actuando como toda una niña en vez de enfrentar mis problemas

- ¿Segura no quieres algo? 

- Cualquier cosa que me des no servirá, mi organismo lo absorbe muy rápido así que no sirve de nada

- ¿Helio? - susurro suave para que el conductor no oyera

- Tal vez... pero me merezco esto

- No digas eso ____, eres una persona increi

- Una persona que mato a su hijo - escupí viendo por el retrovisor la mirada penetrante del conductor, apoye mi cabeza contra el vidrio viendo el paisaje hasta caer dormida