We belong to each other.- MiHyo

2.1

-Unnie, te estaba llamando, dejaste el teléfono en el auto....- habló una pequeña joven observando la escena y sintiéndose extrañamente atraída por la situación.- oh.... Mamá siempre dice que tengo suerte para interrumpir cosas importantes, por eso me dicen Interrujin, ¿Interrumpí algo importante, cierto?

-Para nada jinnie, sólo nos encontramos por coincidencia, Mina, tal vez recuerdes a mi hermana menor, Ryujin, ella es una vieja amiga del instituto.

-Mucho gusto.- Dijeron ambas a la par pero con distintos sentimientos en su hablar, la menor por su parte sólo le resultaba interesante ver a esa joven a la que vagamente recordaba, mientras la japonesa seguía repitiendo la palabras "vieja amiga" en su cabeza, pasando por su cabeza el tiempo que habían perdido, ¿Había pasado demasiado tiempo? ¿Todavía existía un brillo de oportunidad?

-Jihyo-unnie, debemos irnos, nos están esperando para el almuerzo, gusto en verla Mina-unnie. -se despidió la menor con una reverencia y volvió a subir al auto, ahora con el libro que su mayor le había comprado, entendiendo que tardaría un poco. Dejándolas nuevamente solas.

-Veo que el café tendrá que ser para después.

-Me temo que si, y, tal vez sea extraño pero ¿Podría tener tu número? Ha pasado mucho tiempo y me gustaría seguir en contacto.

-Claro. -intercambiando móviles volvió a existir aquel rose de manos, dando con ello, una pequeña corriente que erizaba su piel, como había pasado varios años atrás.

-Bueno.- Comenzó la coreana en un intento de no sonar mal.- Ya debo irme, nos esperan en casa.

-Si, por supuesto, nos vemos después.

Un abrazo de despedida no tenía que ser incómodo, pero por segundos lo fue, luego de ser invadidas por ese calor habitual y regresar a la incomodidad al separarse.- Hasta pronto.

Cada una siguió su camino, Mina por la acera y Jihyo subió a su auto donde la esperaba su menor sin hacer preguntas, ¿Cómo había pasado todo eso? Las probabilidades de volverse a encontrar eran casi inexistentes por no decir completamente inexistentes.

-Unnie, tu teléfono recibió notificaciones.

Tomó un momento revisar sus mensajes antes de comenzar a conducir, tal vez era su madre avisando que necesitaban algo más o sólo notificaciones de redes sociales, lamentablemente no era ninguna de ellas.
-Hay que darnos prisa Ryujin, nos están esperando.

My.

-Amor, ¿Ya vienen para acá?

-Tiffany y Tae preguntan cuánto más tardarán.

Me
-Si, ya vamos para allá.
Sólo un pequeño contratiempo.