Legado Rojo [Secretos que Contaminan]

Capítulo 3

Allyson.
" Más problemas, ¿O no? "

Los problemas tienen un raro efecto sobre la mayoría de nosotros: Nos gusta contemplarlos, analizarlos, darles vueltas. Sucede con frecuencia que comparamos nuestros problemas con los demás y decimos "Su problema no es nada ... ¡Espere a que le cuente el mío!"

Gran error. No debemos minimizar los problemas de los demás, cada quien lleva un peso distinto en sus hombros. Lideamos con ellos de distintas maneras.

Estamos tan acostumbrados a quejarnos de todo, ¿Y la solución?

Mi habitación solo era iluminada por la lámpara sobre mi escritorio. La ventana se encontraba cerrada, pero el frío del exterior se colaba, en general el pueblo siempre era bastante frío, sin embargo, el tiempo variaba constantemente durante el día.

Me encontraba con mi mono negro más largo y grande, seguido de un suéter blanco que me servía como bata y mis medias blancas, en definitiva una escena bastante graciosa.

Hoy el clima estaba en mi contra, oscuro, frío y lluvioso. La lluvia siempre me ha parecido algo hermoso, sin embargo, lo asocio mucho con la nostalgia, con ese sentimiento de calma.

Llevaba más de una hora pensando en una posible "solución" a todo lo que me estaba sucediendo, ya había pasado seis días desde la última vez que recibí una nota, pero la sensación de ser observada seguía latente.

La primera solución: Ir a la policía y decirle todo, algo simple, sin embargo, la policía ahorita estaba muy ocupada y lo más seguro es que mi caso lo asociarán a las pandillas (lo cual podría ser) tomaran mi declaración y listo, me tocaría esperar, desprotegida, no sería una buena opción.

La segunda: Hablar con mi madre, pero sería más de lo mismo ya que ella querría ir a la policía, además, no podía involucrarla demasiado en todo lo que estaba sucediendo.

La tercera: Contarle todo a mi padre, esta la veía un poco más funcional, aunque mi padre quizás solo se vendría a vivir aquí por un tiempo, no podría hacer algo más.

La cuarta: Jashor, se que el me ayudaría, lo que implicaría que usará a su familia por todos los contactos que tienen, se enterarían de todo, y no sería yo la víctima para ellos, eso seguro.

Mientras me decido que hacer estoy aguardando, quizás solo se detenga solo.

— ¿Me estás escuchando o no? — insistió.

Te va a matar.

— No — admití.

Charlotte parpadeo indignada.

— Alison, llevo más de media hora hablándote.

— ¿Lo siento? — susurré en un intento de disculpa sin salir sin piernas y brazos de mi habitación.

En cuanto la volví a mirar suavizó el gesto.

—¿Me dirás qué te sucede?, ¿O tengo que esperar otra semana?

— No... no me pasa nada, es solo que estoy un poco estresada — mentí.

Charlotte nego con la cabeza.

— Te conozco, se que estás pasando por algo que no quieres compartir, solo recuerda que no estás sola.

Se acercó a mí y me jalo para que yo quedara envuelta en sus brazos.