If The World Was Ending ~ Deamus

4- Flashback

Sintió un peso en la cama junto a él, y se removió quejándose cuando lo sacudieron suavemente del hombro, abrió un poco los ojos para notar que todo estaba oscuro y que todavía no había amanecido, y una cabellera rubia, más color arena, llamándole a susurros.

Dean sabía quién se trataba, últimamente Seamus estaba mucho más hiperactivo que de costumbre por los exámenes y no podía dormir del todo bien. Dean le había dicho que si necesitaba entretenerse lo llamara en cualquier momento del día, y se ve que de madrugada un día antes de un examen importante era el momento ideal para Seamus.

El chico lo saco de la cama prácticamente a rastras y lo llevó la primera parte del trayecto como un muerto en vida caminando dormido por los pasillos. Cuando comenzó a darse cuenta por donde estaban yendo, comenzó a despabilarse. ¿Por que querría Seamus ir a la torre de astronomía a esa hora? debido a la luz, el cielo no tendría estrellas y no habría nada que observar, seria solo oscuridad.

Cuando llegaron, el chico lo llevó a la zona más elevada de la torre y Dean agradeció que al estar por terminar su sexto curso, en esa época no corría suficiente viento y no hacía tanto frío. Todo estaba en silencio, mientras se sentaban en el suelo de piedra mirando hacia el horizonte, Seamus apoyó su espalda contra su pecho y descansó su cabeza en su hombro. Habían estado así tantas veces que Dean se sentía más cómodo que nunca, abrazar a Seamus era  una de sus cosas preferidas.

Cuando el cielo comenzó a teñirse de colores cálidos, con un degradé agradable de un azul oscuro hasta amarillo y los pájaros de los árboles comenzaron a cantar, Seamus levantó un pergamino nuevo y su estuche de dibujo.

— ¿De dónde sacaste eso?— Aún tenía la voz adormilada, pero se lo escuchó perfectamente, tomo los materiales y los apoyó sobre el regazo del chico apoyado en él, sabiendo perfectamente lo que le iba a pedir, porque Seamus le pedía que le dibujara constantemente.

— De tu baúl, prometiste que ibas a pintar un amanecer para mi, ¿Recuerdas? está por terminar el año, no quiero esperar hasta el próximo curso— Dijo mientras miraba como Dean tomaba algunos colores y comenzaba a bocetar el paisaje.

Se sentía pleno y cómodo con el chico. Sus pechos bajaban y subían al mismo tiempo acompañando sus respiraciones, el cielo comenzaba a iluminarlos lentamente, y los pájaros parecían haberse silenciado solo para darles un momento a ellos. Dean pintaba tranquilamente mientras Seamus lo observaba y acariciaba su antebrazo suavemente con su pulgar.

Dean pensó que ese momento era tan mágico que se despertaría a la madrugada durante toda una vida más solo para pintar amaneceres para Seamus.