Todo estaba oscuro, no podía ver nada más allá de mis manos. Hacía varias horas que caminaba sin cesar y no lograba encontrar alguna ubicación. Cerré los ojos con fuerza, al abrirlos estaba en otro lugar. Este un poco más iluminado que el anterior, farolillos como en la noche de brujas y muchas velas. La Luna, hermosa, llena y resplandeciente, le daba un toque menos intimidante al lugar. Se podría decir que era una especie de valle, pero al final de este se veía una construcción antigua, un cementerio. Recorrí el resto del camino hasta allí. Su estructura era firme y resistente, hecha de huesos. La puerta se abrió al notar mi presencia, como en las películas de fantasmas y al igual que en esos filmes me adentré en él. Sin embargo la única diferencia es que yo ya estaba muerta y no tenía nada que perder.
El el interior del lugar tenía un aire majestuoso e imponente. Un jardín inmenso con estructuras de mármol en forma de gárgolas, por un momento sentía miedo de acercarme demasiado y que cobrarán vida. Recorrí el camino lo más rápido que pude hasta llegar a la entrada de lo que parecía una fortaleza antigua estilo gótico. Me adentre en ella y podía jurar que se veía más grande por dentro que por fuera.
Desde la lejana estructura gótica sentía como una voz femenina me llamaba, y la conocía pero no podía recordar de dónde.
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DarkWorld
Science FictionLo complicado era inexplicablemente claro y viceversa. Todo era confuso y no podía dejar de pensar. Creo que eso fue lo peor. Ahora ya no me queda nada, ni fuerzas para luchar. Se me ha derrumbado el mundo, ya nada tiene sentido. Solo me queda una...