S e i s

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Tres días después de la comida con las madres de Sanha, Minhyuk recibió un mensaje de su parte.

Hola Minhyuk :)

Perdón si te molesto, pero mañana tengo examen de cálculo y en verdad necesito ayuda.

El pelinegro solo pudo sonreír como enamorado y respondió.

Hola Sanha, claro que te ayudo. ¿Quieres que vaya a tu casa ahora?

Sanha le respondió igual de rápido.

Si no es mucha molestia, sí hyung, por favor.

Minhyuk sonrió como estúpido.

De acuerdo, voy para allá :)

Minhyuk tomó su mochila, se arregló un poco su negro cabello y salió de su habitación con dirección a la puerta de su casa.

—¿A dónde vas?— dijo Jinwoo sentado en el sillón.

—Con un... amigo, lo voy a ayudar. —el mayor se paró del sillón al escuchar eso.

— Voy contigo, ¿vas con el beta ese?— dijo Jinwoo con mucho interés.

—Ahm no, no voy con Myungjun.— dijo Minhyuk un poco confundido y evaluando a su primo.

—Ah... entonces diviértete.— dijo el mayor volviéndose a sentar.

—De acuerdo... nos vemos al rato Jin.— dijo Minhyuk aún confundido por el comportamiento de su primo.

Salió de su casa aún pensando en eso.

¿Pasó algo cuando Myungjun fue a dejar el videojuego?

¿Jinwoo le hizo algo a Myungjun o viceversa?

Diversas preguntas invadieron su cabeza hasta que llegó al hogar de la familia Yoon. En verdad era una casa muy linda y pintoresca.

Tocó el timbre y esperó a que le abrieran.

La puerta fue abierta y un Sanha con una tímida sonrisa fue lo primero que Minhyuk vio. También un dulce aroma lo invadió, era mucho más intenso de lo que Minhyuk acostumbraba a oler. Tal vez Sanha por fin había dejado de sentirse inseguro sobre su esencia y estaba dejando de usar el inhibidor.

—Hola Sanhie.— Minhyuk le sonrió.

—Hola hyung, pasa.— Sanha se hizo a un lado y dejo pasar a Minhyuk.

Los dos subieron hasta la habitación del menor donde estudiarían, Minhyuk no veía por ningun lado a Young Mi o a Hye. La casa estaba muy silenciosa.

—¿Y tus mamás Sanhie?— el mayor preguntó dejando su mochila en el piso y sentándose a lado de Sanha frente al escritorio.

—Ah, salieron— dijo Sanha sacando su cuaderno de cálculo.— Creo que a cenar con algunos amigos o algo así.— el menor se encogió de hombros y sacó su lápiz.

—Ah... de acuerdo.— dijo Minhyuk tratando de quitar los pensamientos inapropiados que se estaban generando en su cabeza. Estar en la habitación con el omega y sin nadie más en casa era una situación muy sencilla de pervertir.

—Empecemos por favor hyung.— dijo el menor viéndolo con una radiante sonrisa.

Minhyuk se golpeó mentalmente al ver a su menor, ¿Cómo podía imaginar cosas pervertidas con ese chico que irradiaba ternura?

—Claro Sanha, ¿en qué tienes dudas?

—En todo hyung, soy muy malo para esto y ya olvidé todo lo que vi en las últimas dos semanas.— dijo Sanha haciendo un pequeño puchero.

Minhyuk se derritió de ternura al verlo así.

—Entonces repasemos todo.— dijo Minhyuk tomando entre sus manos el cuaderno del menor.

Sanha simplemente asintió y centró toda su atención en la explicación del alfa, o al menos eso intentaba, pues extrañamente el aroma del mayor se había vuelto aún más del agrado de Sanha. Hacía que sus mejillas se calentaran y se deleitara.

El menor no había tomado en cuenta que su celo estaba por llegar muy pronto. Lo había olvidado por completo y todo gracias a Minhyuk, pues últimamente no podía dejar de pensar en el alfa.

Después de una hora y media, Sanha suspiró con alivió y se recargó sobre la silla.

Por fin habían terminado, y aunque el omega se distraía por el aroma del mayor de vez en cuando, pudo entender absolutamente todo de lo Minhyuk le había explicado.

La última hora y media también había sido muy complicada para Minhyuk, pues con cada minuto que pasaba el aroma del menor se dificultaba y provocaba que el alfa se distrayera y por momentos lo hacía olvidar todo lo que sabía de cálculo.

—Bueno, por fin terminamos Sanhie.— dijo Minhyuk viendo al menor y notando que sus mejillas estaban más rojas que de costumbre.

—Sí, en serio gracias hyung. No se que hubiera hecho sin ti.— dijo el menor regalándole una sonrisa a Minhyuk. Este se la devolvió y comenzó a guardar sus cosas.

—No es nada Sanha, somos amigos y los amigos se ayudan.— Minhyuk le sonrió antes de cerrar su mochila.— ¿Podría ir a tu cocina por un vaso de agua?

—Por supuesto Minhyuk hyung.— dijo el menor.— ¿Me traerías uno a mí también?

—Sip.— dijo el mayor parándose para ir a la planta baja.

—Gracias.— dijo el omega soltando otra sonrisa.

Minhyuk se la devolvió y abandonó la habitación.

Cuando llegó a la planta baja suspiró con alivio. La dulce esencia de Sanha estaba inundando todo su sistema, era muy fuerte y en verdad deliciosa.

Llenó dos vasos con agua y hielo y comenzó a subir las escaleras.

Conforme subía, el dulce aroma volvía a invadir sus fosas nasales.

Soltó un gruñido cuando la sintió aún más intensa, pudo sentir presión en sus pantalones y los nervios lo invadieron.

Tal vez...

Muy probablemente...

Sanha había entrado...

Minhyuk abrió la puerta lentamente y lo que sus ojos presenciaron hizo que la presión de su pantalón se intensificara hasta el punto de doler y que su respiración se hiciera más rápida.

El omega estaba tirado en la cama con sus ojos cerrados moviendo sus caderas en busca de fricción con su colchón mientras gemía y jadeaba.

Su rostro estaba comenzando a sudar y sus mejillas estaban más rojas que nada.

El olor a lubricante llegó a la nariz del alfa y tragó saliva.

Sanha por fin abrió los ojos y volteó a ver a Minhyuk con un brillo especial en sus ojos.

—Min-Minnie— dijo el omega haciendo más rápido el movimiento de su cadera.— Ven aquí... por favor...

En celo... Sanha había entrado en celo.

Y al parecer, Minhyuk también.

Sweet Scent || RocksanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora