Capítulo 17

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-¿Izobel Stevens?-Dice Callie sorprendida-No puedo creerlo, la última vez que te vi eras una niña.

-Dramatizas, pero déjame decirte que te ves estupenda.

-Espera-Interrumpo-¿Vinieron solo las tres juntas?-Asienten.

-¿Qué pasó con la perfecta Penny?-Me interrumpe Amelia adivinando mi pregunta.

-¿Quién es Penny y por qué hablan de ella?-Interrumpe Derek antes de que Callie hable.

-Penny fue la residente en tu caso, la noche que moriste, tiempo después Callie y ella fueron novias, están perfecta que ganó el beca Preminger de investigación y se fue a...

-Nosotras terminamos-Interrumpe Callie a Amelia-Unos meses después de llegar a Nueva York tuvo una aventura con una de sus compañeras, pero el lado bueno es que Arizona y yo volvimos.

-Y estamos haciéndo los papeles para adoptar un bebé-Dice emocionada la rubia.

Luego de las felicitaciones y bienvenidas, todos estamos en casa.

-A Mark de habría encantado esto-Dice Derek observando la vista panorámica desde la entrada de la sala.

Los seis niños empeñados en hacer reír a Scout, casi todos nuestros amigos dispersados entre la cocina y la sala; es la gran familia con la que soñaba Mark.

-Mer, Derek y yo te tenemos una sorpresa-Susurra Andrew pasando su brazo por mis hombros a mi lado en el sofá-Tenemos que salir de aquí para que la veas.

Le hace una señal a Derek y éste a Link, quien solo asiente.

Ambos me toman de las manos y me conducen a mi camioneta y abren la puerta trasera.

-Sube y vendate los ojos-Dice Derek entregándome una cinta negra.

Le obedezco y siento como también suben a la camioneta y la ponen en marcha, durante el camino vamos cantando y riéndo, llevamos varios minutos por la carretera, o eso creo por el ruido de los autos.

Minutos después apagan la radio y ya no se escuchan autos alrededor.

-¿Me van a secuestrar, asesinar y entrerrarme por éste silencioso lugar?-Bromeo al solo escuchar el motor y las ruedas rompiendo ramas mientras avanzamos.

-Creo que deberías dejar de ver películas con Miranda-Responde Derek haciéndonos reír.

-Tranquila Mer, ya falta poco-Dice Andrew, desde creo que el asiento de adelante.

No pasó mucho cuando detuvieron la camioneta y escuché como abrían mi puerta, con su ayuda me bajé y me guiaron hasta un punto.

-Puedes quitarte la venda-Dice Andrew.

Cuando lo hago los miro confundida.

-¿Qué hacemos aquí?Yo había vendido la casa.

-Es nuestra otra vez, es nuestra casa de ensueño Mer, la construí para nosotros, así que decidimos recuperarla.

-Además, somos una familia de seis y necesitamos nuestro espacio-Dice Andrew-También le contamos nuestros planes a Link y estaría encantado si le rentas tu casa.

-No era necesario, me gusta como estamos viviendo ahora.

-No dirás lo mismo cuando veas la nueva cama de nuestra habitación.

-Ya que ahora somos tres, necesitamos dormir cómodos-Dice Andrew terminando la frase de Derek.

Los dejo guiarme por la gran casa hasta nuestra habitación, cuando veo la gran cama en medio quedo completamente atónita.

-¿Es una cama ace family size?-Me acerco a la cama y me lanzo de un salto de espaldas sobre esta sin poner llegar al centro-Aquí caben como diez personas.

-Ya que Cristina volvió, probablemente pasará algunas noches aquí también asi que decimos cubrirlo.

-Esto es maravilloso, ya no me quejaré más-Estoy acomodándome cuando escucho el timbre-¿Visitas?

Cuando habro la puerta, medio personal del hospital entra como un huracán, trayendo en sus manos comida y bebidas.

-Felicidades por tu nuevavieja casa, Mer-Dice Cristina entrando con varias botellas de tequila.

-¿Tu lo sabías?

-No, Atticus nos dijo en cuando se fueron, ten tequila.

-Cristina, no podemos emborracharnos, ¡hay niños!

-Si y Amelia, Richard y Ben no beben, ellos los cuidarán.

-Está bien-Abro la botella y bebo un largo trago.

La noche pasó entre risas, anécdotas, bailes y más risas.

[...]

A la mañana siguente, cuando fui por un vaso de agua vi como varios de mis amigos estaban botados inconscientes en la sala, los pasillos y hasta el césped; me recordó todas las fiestas que hacía cuando mamá salía a conferencias los fines de semana fuera de Boston.

-Buenos días fiestera-Dice Izzie sacándome de mis pensamientos parándose junto a mi observando alrededor-George estaría tirado allí, en el pasillo junto al sofá, frente a la puerta del baño.

-Lexie estaría de este lado del sofá...

-Recostada sobre Mark-Susurra Callie sobando su cuello mientras se levanta del escalón-Hace muchos años que no festejaba así.

-Son unos salvajes-Se nos une Amelia saliendo de una de las habitaciones.

-Lo dice la chica que se descontrola bebiendo jugo-Comento y reímos bajo.

Preparamos el desayuno para todos, cuando digo preparemos por Izzie, Callie y Amelia, yo solo puse la mesa y desperté a los que seguían inconscientes.

-¿Falta mucho para que esos huevos estén listos?-No dejé que me respondieran porque tuve que salir corriendo al baño a vomitar-No esperen a que diga que no volveré a beber porque dejé de decir esa mentira hace años.

Las chicas rieron y sirvieron el desayunos para todos, luego repartimos una ronda de aspirinas y vasos con agua para los que teníamos resacas.

Los niños corrían riendo y jugando pornel césped, los demás nos encontrábamos en la terraza observándolos jugar cuando Derek empieza a hablar.

-Gracias a todos por venir y por su apoyo en nuestra relación, sabemos que es algo fuera de lo común pero logramos mantenernos unidos.

-Yo quisiera aprovechar las motivadoras palabras de Derek y su presencia aquí, para que queden de testigo de lo que voy a hacer-Dice Andrew poniéndose de pie y caminando hasta la parte más alta de la terraza, Callie y Arizona me toman de las manos y me guían con él, volteo rápidamente y veo a los demás acercase a nosotros, Andrew me toma de las manos y continua hablando-Meredith Eleonor Grey, desde aquel primer beso en el matrimonio de Karev y Wilson no he dejado de pensar en ti un solo minuto, te he amado y he estado junto a ti en tus peores y mejores momentos desde que nos conocimos-Ahora soltó mis manos, sacó de su bolsillo una pequeña caja de terciopelo y se puso de rodillas-Queria Mer, ¿Me darías el honor de convertirte en mi esposa y compartir nuestras vidas hasta el fin de ellas?

Yo solo podía mirarlo estupefacta, el compromiso ya no es un problema para mi, mis hijos quieren mucho a Andrew y viceversa, pero las palabras simplemente no salen, al escuchar un ruido proveniente de enfrente de la casa solo puedo decir.

-¿Qué rayos es eso?

Pequeños DetallesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora