VIII: "¿Quién eres para mi?"

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[Actualidad]

Ikari se encontraba con la mirada gacha. ¿Como era posible que Shoto olvidara uno de sus propósitos para ser un héroe?, no lo entendía, pero tampoco lo culpaba. Es decir, solo convivieron por 1 mes justo antes de que iniciara su entrenamiento con su padre y no lo volviera a ver. La rubia recuerda que siguió llendo a aquel parque por unas semanas más, hasta que terminó el jardín y no volvió a pasar por este de nuevo. No hasta la secundaria.

—MIDORIYA.— La llamaron.

—¿E-Eh?— Preguntó. —A-Ah, ¿Que pasa Aizawa-Sensei?—  Volvió a cuestionar.

—Haznos una pequeña demostración de tu quirk por favor.— Pidió el mencionado.

—Emm, ¿Pero qué no dijo que-..?— Dejo la frase sin terminar, ya que Aizawa hablo antes.

—Se lo que dije, y por eso estaremos fuera de tu alcance, al menos 3 metros.— Aseguró.

—Bueno..— Ikari paso entre la multitud y se colocó justo al frente, alejada de ellos.

—Toma la pelota de Béisbol de ahí y lanzala con tu quirk.— Ordenó el peli-negro.

—Ya lo tengo.— Dijo mientras tomaba la pelota, y se enfocaba en ella.

Poco después la soltó, y se elevó sobre ella. Había usado el control sobre la gravedad y quitó esta en el lugar por el que viajaba la pelota.

Se elevó unos metros más y después cayó, golpeando a la rubia en la cabeza. Solo se escuchó un "Ouch" de su parte.

Aizawa suspiró.

—Inténtalo de nuevo, con lo que sabes controlar.— Exigió.

Ikari, a pocas ganas, tomo la pelota y esta vez la lanzó. Esta misma se elevó, pero no descendió.

Aizawa miró el dispositivo que media la distancia que recorría la pelota, el cual marcaba 10 km.

—¿Cuánto marcó?— Preguntó Bakugo mientras se posaba al lado de Aizawa.

Al ver el resultado se le fue el aire.

—10 km. Atravesó la estratosfera.— Dijo Aizawa.

—¿Puedo hacer las demás?— Preguntó Ikari, entusiasmada mientras se sobaba la cabeza.

—Con esto es suficiente. Todoroki, acompañala a la enfermería.— Ordenó Aizawa.

—Pero estoy bien, solo fue un golpe.— Afirmó la rubia.

—Da igual. Ve a que te revisen.— Ordenó de nuevo el peli-negro.

El bicolor se acercó a la rubia.

—Vamos Midoriya.— Dijo.

Ikari lo siguió. No habló casi. Eso extraño al heterocromático.

—Estás callada. Eso es raro.— Admitió el chico mientras caminaba.

—¿Eh? Ah, es que.. Solo pensaba en un amigo de la infancia...— Respondió.

—¿Ah, si? ¿Como se llama?— Preguntó un Todoroki curioso.

—En realidad no importa. Mejor cuéntame de ti.— Sugirió Ikari mientras caminaba a la par de el.

—Bueno.— Accedió. —Desde el día de la prueba siento que te conozco de algún lado. ¿Tu sabes de dónde?—  Preguntó.

Esa pregunta fue algo agridulce para la chica. Le alegraba que la recordará un poco, pero estaba claro que había olvidado la mayoría de las cosas y eso le dolía. Justo en ese instante llegaron a la enfermería, entraron y Recovery Girl le ordeno que se recostara. Shoto decidió sentarse a su lado.

Ikari sonrió.

—Tu cumpleaños es el 11 de Enero, ¿cierto?— Preguntó.

Shoto la miro extrañado, pero asintió.

—¿Que hacías en tu cumpleaños de pequeño?— Preguntó con una sonrisa, pero esta era diferente.

—Mi mamá me preparaba mi comida preferida y algunas veces salíamos a pasear.— Respondió sin más.

Ikari bajó su sonrisa.

—Mi cumpleaños número 4 fue como cualquier otro día.— Dijo. —Mi madre me hizo asistir al jardín de niños, después de eso fui con mi hermano y un par de sus amigos a un parque cercano.— Relató. —Al día siguiente, mi madre y mi hermano se disculparon por olvidar mi cumpleaños. Pero en realidad ese cumpleaños no fue tan malo. Ese 11 de Diciembre no fue tan triste como creí, ¿Sabes por que?— Preguntó la chica y el bicolor negó. —Por que hice mi primer amigo, Shoto.— Término.

El chico terminó más confundido que antes.

—¿Tu.. primer amigo?— Preguntó, sin entender el por qué le contaba eso.

—Si. ¿Recuerdas?— Preguntó. —¿Tu cabello es real? ¡Que lindo!— Imitó.

Todo le hizo click. Absolutamente todo le hizo click. Tanto fue el impacto que se quedó estático. La rubia bajó la mirada.

—Ikari.— la llamó.

La chica no respondió.

—Ikari.— Repitió.

No volvió a hacer caso.

—¡Ikari!

La chica despertó. Estaba en la enfermería, en la camilla.

—¿Estas bien? Te desmayaste después de que Recovery Girl te dijera que te recostaras. Justo hibas a preguntar algo sobre mí.— Explicó el bicolor.

—¿Mm? A-Ah, si. Estoy bien, solo..— Se agarró la cabeza con su mano derecha.
—Estoy un poco mareada..

Recovery Girl entró por la puerta de la enfermería.

—Bien Midoriya-San. Al parecer tienes una contusión en la cabeza. Seguro te desmayaste en el tiempo en el que salieron los resultados, pero tranquila, con un beso te recuperarás.— Explico Recovery Girl, ya estando a la izquierda de la rubia y preparándose para darle un beso.

Después del beso, Ikari cayó dormida. Recovery Girl explicó que era normal.

Shoto se quedó ahí. A su lado. ¿La razón? Ni el mismo la sabía. Simplemente quería estar con ella un poco más. Sabía que la conocía. Y si la conocía debía ser alguien especial. El chico, durante su vida, no pudo salir demasiado de cada y no tenía contacto con alguien que no estuviera dentro de su familia, por lo que ese sentimiento de nostalgia le resultaba extraño viniendo de alguien que no tuviera lazos sanguíneos con el.

—¿Quien eres en realidad para mí?— Preguntó, mientras con su mano apartaba unos mechones de la cara de la oji-verde.

En ese instante la puerta se abrió con brusquedad, dejando ver a un rubio de ojos color carmín bastante enojado.

—¡IKARI BASTARDA¡ ¡¿COMO TE ATREVES A TENER UN PUNTAJE MAYOR AL MÍO?!— Grito mientras entraba en la enfermería.

—Baja la voz. Está durmiendo.— Ordenó Shoto, mirándolo de reojo.

Katsuki lo observo un instante.

—¡No me des órdenes! ¡Bastardo Mitad-Mitad!— Gritó, enfadado.

Todoroki lo observó por unos al peli-ceniza y después regresó su mirada a la chica.

—¡No me ignores maldita sea!— Volvió a gritar la rubia musulmana.

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Zeltzingc🍒

Still Into You // Todoroki Shoto x tu //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora