Llego la tarde y los niños estaban entrenando solos en el área designada de entrenamiento.
Mientras la pequeña Adela le explicaba algunas cosas a Arthur, un pequeño niño rubio con unos potentes ojos azules que aparenta tener la misma edad que Adela, se les acercó con una mueca que pretendia ser su cara de enfado.
-Oigan ustedes ¿Quiénes son? Respondan rápido y con respeto. Soy el segundo principe- Gruño el rubio.
-Soy Adela Beldford y el joven junto mi es Arthur Harrison. Estaremos algunos días aquí, por orden de la emperatriz- Se presentó algo sorprendida pero con respeto.
-Es un gusto. Soy Arthur Harrison y estamos trabajando en un producto para la emperatriz- Apoyó a las palabras de su amiga.
-Saludos a su Alteza Leonor el segundo príncipe de Obvelia- Saludaron al mismo tiempo los niños.
-Esta bien. Dejaré pasar esta situación, con una condición- Hablo con un complejo de superioridad Leonor.
-¿Cuál es la condición?- Pregunto cuidadosamente Arthur.
-Tendrán que entrenar conmigo y ser mis amigos- Exigió el principe.
-Será un honor principe Leonor- pronuncio respetando la etiqueta el joven Arthur.
-Puede empezar cuando lo crea necesario- Hablo Adela.
-Bien, Puedo empezar ahora- Respondió sin vergüenza alguna y lleno de orgullo el segundo príncipe Leonor.
-Pero primero debes saber algunas reglas de nuestro grupo-.
-¿Espera grupo?- Cuestionó el rubio algo confundido.
-Efectivamente, si quieres entrenar o jugar con nosotros debes de saber el reglamento. Como ya eres parte de nuestro grupo debes de saberlas- Dijo seguro el pelinegro.
-Esta bien- Acepto sin dudar el rubio.
-Bueno comenzaré.
Regla número uno: Como entrenaremos juntos debes de confiar en nosotros.
Número dos: Debes llevar el collar que en unos momentos te entregara Arthur.
Número tres: En este escuadrón amamos y respetamos a los piratas.
Número cuatro: Como somos amigos deberás contarnos todos tus problemas y secretos.
Número cinco: Las espadas que utilizamos las tienes que crear tu.
Número seis: Esta prohibido romper las reglas.
¿Entendiste?- Finalizo Adela sonriendo.
-¿Quién crees que soy? Obviamente entendí- Respondió algo dudoso el principe.
-Bien, atrapa el colgante- Aviso Arthur antes de lazar un collar de oro con un ancla plateada como dije.
-Gracias, pero ¿Y la espada? Yo no se hacer una espada-.
No te preocupes, tengo una espada de sobra. Solo te la presto por un tiempo, hasta que mandes a hacer la tuya- Finalizo con una leve sonrisa Adela.
-Gracias- Agradeció algo apenado el segundo principe.
-no te preocupes, Al fin y al cabo la espada estaba de sobra y ya se estaba oxidando- Dijo indiferente Arthur.
-Hoy aprenderemos a teclear- Hablo con una notable emocion la pequeña Adela.
De esta manera alguien más se unió a su pequeño grupo.
-
Hay 4 principes, 2 principes (el heredero y Leonor) y 2 princesas más pequeñas ( una de 7 años y otra de 4).
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La villana ¿Es realmente una villana?
Fantasyla familia beldford, había tenido 3 hijos el mayor un pelirrojo algo tierno e inteligente, 2 años luego, la del medio una pelirroja, aclamada genio del siglo, y por ultimo, la pequeña y fragil rubia, conocida por su cuerpo débil. (Corrigiendo)