Obsequio

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La música resonaba a todo volumen en la tienda en la que estaba, por algo no me gustaba salir del todo, y este era el motivo, la gente que había en todos lugares era horriblemente escandalosa, pero no me podía quejar, y menos si fui yo quien se metió en esta juguetería...

Los niños corrían emocionados a mi alrededor y eso solo lograba ponerme nervioso, nadie sabía el motivo exacto de que un adulto con cara de amargado estuviera viendo la sección de peluches con tanto esmero mientras que en el lugar solamente se escuchaban canciones infantiles que llenaban de "vida" el entorno

-Disculpe joven, busca algo en específico?

Una chica empleada del lugar se me había acercado con una sonrisa en el rostro, tanto se notaba que me había perdido entre los pasillos de la tienda buscando un maldito juguete?

-S-si, me podría ayudar a llegar a la sección de animales de peluche?, Es que... Mi... Hermano menor quiere uno de regalo y yo no soy bueno buscando esas cosas disculpe...

No le iba a decir que buscaba un peluche para mi mejor amigo, no nos pondría en ridículo por ser infantiles de vez en cuando, y por suerte la señorita me creyó, ya que al instante asintió afirmativamente con la cabeza y comenzó a guiarme hasta una estantería repleta de peluches de todos los tamaños y formas, jamás había visto una acumulación de muñecos esponjosos más grande

-Hay alguno que llame en especial su atención?

-Pues más que nada me gustaría uno en forma de zorro, mi ami... Hermano es fan de esos animales, aunque si tuviera de color naranja sería estupendo

-De que tamaño sería?

Me quedé callado ante su pregunta, eso significaba que si tenían peluches con esas características?, Valla tienda más curiosa

-Pues... El más grande que tenga estaría bien

-Seguro?... Bueno, supongo que los gustos de su hermano son algo excéntricos... Por favor valla a la caja diecisiete y lleve este papel con el número de su entrega, ahí podrá ver el juguete y usted podrá escoger si lo quiere, que tenga un buen día

La señorita me tendió ese papelito asegurándose que yo lo tomara y luego desapareció para ir a atender a otros clientes. Suspiré aliviado de que todo estaba siendo más rápido de lo que había pensado, ya quería irme de esa plaza, por qué si, la juguetería estaba en una de las plazas más grandes de la ciudad, no podía arriesgarme a ir a otra y que no hubiera algo similar a lo que quería; caminé tranquilo hasta llegar a la caja que me dijeron y un chico comenzó a atenderme de lo más amable, en eso pude ver cómo traían el peluche y aprecié su gran tamaño, fácil te podías dormir cómodamente sobre el... Era perfecto para Naruto pero malo para mi billetera

-Listo, este es el peluche que usted quería?

-Si, era exactamente lo que estaba buscando

-Perfecto, se lo empaquetamos de una vez para regalo, y por ser de las primeras personas en comprarse un Kurama le regalaremos un descuento para el shukaku del mismo tamaño, son la pareja de peluches perfectos para usted y su hermano, se verán muy bien juntos

Shukaku, Kurama? Así se llamaban esos peluches?, Valla nombres más raros, pero me llamaban la atención, así que... Por qué no?, Necesitaba algo para mí que hiciera ver menos sería y fría mi habitación... Un peluche estaría bien

-Ho... Claro, también me lo llevaré, los dos serían empacados, pero el zorro sería para regalar

-Entendido, pagará con tarjeta?

-... Si

No quise ver cuánto era el monto que tuve que pagar, sólo sabía que de momento estaba valiendo la pena, pues por fin estaba afuera del local, ya no tenía nada más que hacer en esa plaza y me podría ir tranquilo a mi casa sin la aspiración de comprarle algo a Naruto

El armarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora