Esperar

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Y mirando a lo lejano
se distinguen fieles ojos:
tú, sentada allá en el llano
entre deseos y antojos.

Hoy te encuentras  pensativa
con tus tristes labios secos.
Hoy no quieres que  reviva
y escuchar sus fuertes ecos.

Perdiste las esperanzas
de besarlo en las noches?
Perdiste la añoranza
de lidiar con  sus reproches?

Tu tiempo sigue estancado
y con él has de aceptar:
ya no riman los marcados
versos con la soledad.

Las fuerzas no se acabaron
más cesaste de luchar.
Dejaste al vacío a un lado
pero él está sin estar.

Para qué ahora pensarlo,
en esta tarde tan muerta?
Para qué ahora nombrarlo
si dejó de abrir la puerta?

Dejaste al destino, todo:
si es de ti regresará.
De buscarlo ya no hay modo
pero sí lo hay de esperar.
S.Moreno

Adiós Diciembre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora