Mi razón

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Aún recordaba cuando la vio por primera vez en la televisión y luego en directo... brillaba... lo único que podía decir es que brillaba más que cualquier actriz o actor que haya conocido, sin importar cuanto prestigio tuvieran aquellos adultos mencionados por sus padres para ella nadie era mejor que la chica que tanto admiraba.

Sin importar lo que ellos dijeran para ella esa chica era la protagonista perfecta así que cuando volvió de esa obra no solo regresó a su casa con el boleto de teatro como prueba de que la vio en vivo y en directo, sino que también pudo conseguir su autógrafo, ese sin duda sería su mayor tesoro además de motivación para el resto de su vida.

Con el pasar de los años aún podía recordar de memoria cada comercial que hizo, cada papel que tuvo en alguna obra, tenía en secreto varios productos que ella publicitó. Cuando estaba deprimida, cada vez que trataban que arruinar su camino o destruir su ánimo los recordaba, incluso si había desaparecido del mundo del teatro ella lucharía y subiría a un escenario para brillar tanto como ella, para mostrarle aunque nunca lo supiera que logró llegar a ser una actriz gracias a esa joven.

Durante muchos años batalló contra sus padres, sus pares, sus maestros, todo aquel que se interpuso en su camino lo derrotó, sabía muy bien que ellos habían deseado que estudiara en otro lugar pero lo evitó, cuando supo que estaba ahí que quizás, tan solo quizás tendría la oportunidad de verla de nuevo dejó todo de lado y fue a dar la prueba de ingreso para Seisho.

-¿Te gustaría ser mi compañera de estiramientos?-

Luego de haber recibido tal honor decidió que debía impresionarla, demostrarle que podía ser una chica de escenario tan buena como ella, que juntas llegarían a los escenarios más brillantes, ¡que nadie podría superarlas si estaban unidas! Pero se había equivocado.... sin saberlo... se condenó a ser su rival...

¡No importa! Pensó una y mil veces, si la veía como rival significaba que ella la veía como alguien que debía superar así que se esforzaría, entrenaría todos los días en secreto para que no pudiera alcanzar, debía conservar ese título... gracias a eso fueron el main cast... gracias a eso ella le juró que no iba a perder... esa foto que conservaba en su cuarto la mostraba con una mirada decidida a que el próxima año sería ella la ganadora... si bien... no eran más que rivales ¿acaso no era esa una relación más estrecha que la amistad? Alguien a quién estás atento con su progreso, la razón por la cual nunca debes flaquear en las prácticas, ¿acaso existía mejor motivación para mejorar y exigirse más que ayer que un rival? Ella estaba convencida que no había otra y lo atesoraría hasta la muerte... pero... ¿de verdad solo podía ser eso los próximos dos años? ¿A caso no podía apuntar a tener una mejor posición?

Durante mucho tiempo lo pensó, imaginó en su cabeza todos los posibles casos para acercarse a ella, como de a poco podrían formar una amistad... pero por cada intento que daba ella solo mostraba en su mirada rivalidad... era doloroso... mas debía mantenerse hasta el final en el papel, después de todo sea por esa razón u otra... ya no almorzaba ni caminaba hacia la academia o a los dormitorios sola, quizás para muchos eso no era la gran cosa pues solo era cuestión de tener amigos pero si todos te admiran o temen por ser la gran Top Star ¿quién se atrevería?

Fue por eso que en el fondo se alegró de la existencia de aquellos revue nocturnos, no solo planeaba conquistar aquel nuevo e interesante escenario que el mundo le ofrecía, sino que también podría cumplir su mayor sueño, tenía que lograrlo y para eso destrozaría a todo aquel que se interpusiera en su camino...

O al menos eso pensó...

-Segundo día de las audiciones... Tendo Maya contra Saijo Claudine-

Revue Starlight Random TalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora