✅Capítulo 27. Tanta cercanía.

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-Eso estuvo cerca...- Se dejó caer Lea sobre uno de los asientos.

-Muy cerca- Le dio la razón Kairi aun exaltada.

Después de varios minutos, y asegurándose de que ya estaban lo suficientemente lejos del centro comercial, Riku tomó un camino alternativo de tierra río abajo, cuando la luna ya brillaba en lo alto del cielo, un cielo despejado lleno de estrellas. 

-Este se ve como un buen lugar para pasar la noche- Dijo Xion, abriendo la puerta para salir a respirar un poco de aire fresco. -Revisaré los alrededores ¿Me acompañas Lea?

-Por supuesto- La siguió el pelirrojo.

-Iré por algo de leña- Isa salio también, acompañado de Vanitas.

Y Kairi sacó una olla pequeña con algunas latas de sopa y carne seca. Saliendo del automóvil para plegar la mesa y encender la luz del camper, sonriendo satisfecha por la funcionalidad.

Riku fue el único que se quedó dentro del automóvil, recostado a un lado de Sora, acariciando sus mejillas redondas y aliviado de que su temperatura ya era normal.

-¿Estamos seguros?- Preguntó Sora en un leve susurro, sin abrir los ojos.

-Por ahora lo estamos- Le sonrió Riku cuando esos ojos al fin se abrieron, reflejando un hermoso azul bajo el brillo de la luna que entraba por la ventana.

-¿Dónde estamos?- preguntó, devolviéndole la sonrisa.

-Hmm... no estoy muy seguro. Río abajo, hacia el norte.

-¿Todos están bien?- hizo otra pregunta el moreno. Sentándose sobre la cama para ver mejor su entorno.

-Si, todos estamos bien. Deberías seguir durmiendo.

Sora negó con la cabeza y acomodó las colchas sobre su regazo.

-Ya estoy mejor, he dormido mucho.

Riku besó su frente un par de veces antes de bajar a su mejilla. El cariñoso gesto sacó una risita del menor. Por fin con algo de tranquilidad después de huir por tanto tiempo, en un lugar cómodo y acogedor. Sora levantó la mirada, estaba algo oscuro pero notaba un pequeño comedor pegado a la ventana, una cocina pequeño con alacenas en la parte de arriba, un televisor pequeño y algunos cuantos estantes.

-Es... muy cómodo- Dijo Sora maravillado.

Estaba acostado sobre una cama suave, al final de todo el automóvil, con una vista panorámica de todo el lugar. Estaba algo polvorienta y la mayoría de los estantes vacíos pero nada que una buena limpieza no pudiera solucionar. Riku se levantó y sacó de su mochila una botella con agua.

-Toma, Kairi hará algo de comer- Sora recibió la botella y bebió un par de sorbos -¿Seguro que estás bien?

Sora asintió, le regresó la botella y estiró los brazos.

-Me siento mucho mejor que esta mañana- Dijo alegremente. -Mi pierna aun me duele, pero el dolor es mas leve.

-Me tranquiliza escuchar eso.

Riku se acercó al moreno, tomando su mentón con la punta de los dedos y le dio un pequeño beso en los labios. Sora se quedó inmóvil un segundo, y todo el recuerdo de la conversación que había tenido con Riku en el centro comercial regresó como un tren de carga a toda velocidad. Sus mejillas se volvieron rojas hasta las orejas y dejó salir un jadeo de sorpresa. Claro, nada de eso había sido un sueño, Riku le había confesado su amor y Sora lo había correspondido.

Riku notó en su rostro esa repentina ola de pensamientos que ahogaba al omega y se apartó.

-¿Sucede algo? ¿No quieres que te bese?- Preguntó el alfa algo extrañado por el repentino cambio de comportamiento.

Nightmare X Reset [Soriku] OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora