Capítulo 1

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Esta historia es la continuación de Mi pequeña princesa, entendiendo por continuación que será parte de las tres historias que compondrán esta serie de novelas, en ella encontraremos a los personajes principales de MPP, Alina y Maximus como personajes secundarios, ya que esta nueva historia se centrará en Sandro y Morgan.

Quiero aclarar que esta historia será la única dentro de la gama de DDLG que contenga contenido adulto debido a las escenas sexuales que aparezcan en ella, por lo mismo, si no eres mayor de 18 años te invito a que te saltes dichos capítulos los cuales se encontraran señalados, y si decides leer es bajo tu propia responsabilidad.

Deseo aclarar que no me encuentro a favor de las relaciones DDGL en las cuales se mantienen relaciones sexuales cuando uno de los personajes se encuentra en actuando de modo infantil, en está historia no encontrarás esa clase de escenas, cualquier relación sexual que mantengas los personajes lo harán bajo el concepto de adultos.

Si no te gusta este tipo de historias te invito a que no leas y esperes por la siguiente.  Acepto críticas constructivas, pero no comentarios que puedan ofender a mi persona o a los demás lectores, si comentas algo de este estilo tu comentario será borrado y tu cuenta bloqueada. 




 Capítulo 1


REEDITADA.

A QUIENES YA LEYERON LOS PRIMEROS CAPS LES RECOMIENDO VOLVER A LEERLOS, PORQUE CIERTAS COSAS HABRÁN CAMBIADO EN ESTA EDICIÓN. VOLVEMOS ESTAR AL TIMON DE ESTA NOVELA CHIQUES.



Estaba exhausta.

Le dolía cada parte de su cuerpo, en especial la espalda, eso de arreglar las cosas tú mismo era más fácil si veías como alguien más lo hacía en la tele y fingía que era la cosa más fácil, pero teniendo en cuenta que cada dolar que llegaba a su cartera era importante no se podía dar el lujo de cambiar todos los muebles del lugar, o de llamar al técnico cada que algo se descomponía.

Miró las paredes ligeramente oscurecidas de su alrededor, y se deprimió una vez ante ese hecho, siempre se decía a sí misma que el siguiente mes sería lo siguiente en arreglar, pero por una u otra razón lo había estado posponiendo hasta ahora.

—Pronto. –Se prometió a sí misma.

Con cansancio se puso en pie y dejó la sala para ir a ver a su pequeña hermana, Elina era... complicada, aunque qué se podía esperar de una adolescente.

Como era de suponer la puerta de su habitación se encontraba cerrada, por lo que armándose de paciencia tocó un par de veces la puerta esperando que abriera.

—Pasa ya.

Preparándose mentalmente para la pelea que seguramente vendría tomo una honda respiración antes de entrar.

Elina se encontraba sobre la alfombra de su cuarto contemplando un par de fotos viejas de un álbum, ese que años atrás había sido suyo y el cual su hermana había rogado por tener.

—Quería saber si quieres comer pizza.

—¿Con extra queso? –su hermana menor volteó a verla con ese par de ojos que eran el vivo retrato de los suyos, pero hasta ahí terminaba el parecido entre ellas—. Oh, y de peperoni esta vez, me toca elegir, ¿recuerdas? La última vez tu pediste de mariscos.

Mi pequeña rebeldeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora