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4 de Marzo del 2023

El rostro de aquel doctor no lo podía borrar de mi mente, era extraño para mi, al mirarlo a sus ojos, sentí algo que no puedo explicar, una emoción extraña, su visita no fue agradable pero debo admitir que si no hubiera sido por él, ellos me hubieran atormentado al grado de atreverme a suicidarme, con o sin ellos quiero terminar con mi vida, pero cada vez que lo intento algo sucede.

Estoy tan sumergido en mis pensamientos que no e notado que él me mira desde lejos, mis ojos se encuentran con los suyos.

—Buenos días Jimin, disculpa, ¿Te encuentras bien?— Sé que no estoy cerca de él pero puedo notar que lo sorprendí en su mundo por ello no se percató de mí presencia. —Jimin me estas escuchando...— Me acerco a pasos rápidos y me siento a su lado y este de inmediato me voltea la cara.—

—No te importa y aléjate de mi sino quieres que te haga daño...— Sentirlo tan cerca me repugna, me volteo pero siento aún su presencia detrás de mí. —Dime que fecha es hoy.—

—Hoy es 4 de Marzo del 2023, puedes decirme porque me preguntaste la fecha Jimin...— El silencio se hace presente después de mi respuesta, es tanto así que puedo escuchar su respiración acelerada.

Mi corazón dolió ante su respuesta, fue ayer tres de Marzo, hace dos años atrás perdí el amor de mi vida, desde ese entonces no volví a salir de está maldita habitación, desde entonces e intentado una y otra a vez buscar mil maneras de morirme, me culpo por aquello que le sucedió a Yoongi, por mi culpa el murió, desde entonces no soy el mismo y desde ese día las cosas no son las mismas en este lugar.

—Lárgate de una buena vez....Ni se te ocurra volver acercarte a mí....Te quedo claro o te lo demuestro para que puedas aprender— Dije realmente enojado y esté solo se fue, escuche aquella puerta cerrándose con velocidad y fuerza, haciendo un sonido fuerte. —Mierda—

Repose mi espalda en la pared, como estaba sentado, sujete mis rodillas con una mano y la otra la llevé a mi rostro, comenzando a llorar, de nuevo lo hacía, a este punto me siento vulnerable y destrozado, mi impotencia no es suficiente, saber que ya no puedo hacer nada me mata lentamente y mi mente juega conmigo esta vez, la dejo ganar, yo me rindo, lo único que quiero es que él esté de vuelta, solo eso quiero.

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Me quedé de pie esperando que algún sonido de él pero tras esa puerta no se escuchaba absolutamente nada lo único que pude hacer fue mirar tras el pequeño ventanal que daba al interior de su habitación, al notar aquel estado suyo, me preocupé demasiado, no comprendía nada, como es que un paciente de alto riesgo, con enfermedades mentales graves, que en su grado de locura sus sentimientos se han esfumado, y este llorando en este momento, y sí estoy consciente que no son lágrimas fingidas sino reales, algo realmente le duele, desde que le dije la fecha del día de ayer, reacciono de esa manera, sacandome de su habitación, sin poder avanzar en la recuperación, ¿Acaso le sucedió algo en esa fecha que lo marcó y por ello su llanto?.

Debo estar realmente loco pero entraré de nuevo y no me importa si me hace daño, pero síno averiguo que es lo que lo atormenta, como es que lo voy ayudar. Camine hacia aquella puerta y por los mismos guardias fue abierta, decidido entre y camine hacia él, escuche que estaba llorando más fuerte. Una vez a su altura, sentí un impulso y lo abrace, él seguía en el mismo estado o peor, lo que me sorprendió fue que él no se apartó de mí, fue todo lo contrario se aferró más a mí.

—¿Porqué me abrazas, ¿Porqué no eres como los demás?, ¿Quién eres?—

—Te responderé esas preguntas más adelante, solo quiero que te sientas seguro conmigo, llora todo lo que tengas que llorar, no me iré de aquí hasta saber que estas bien, a partir de hoy no estarás más solo, no te harán más daño, estaré contigo en todo este proceso Jimin....Solo aprende a confiar en mí, por favor—

Desde ese momento no hablamos ninguno de los dos, aún mis brazos estaban en el mismo lugar, rodeandolo, puedo sentir lo vulnerable que está, el Jimin agresivo se ha ido por ahora, y da paso a un joven desesperado por que le presten atención y le den amor.

Todo estaba tranquilo hasta que una voz muy familiar me hace sobresaltarme, causando asustar también a Jimin y me volteo rápido, es aquella señora que me da la impresión que le ha molestado mi actitud, pero yo no me apartó de Jimin y sí se que ambos volteamos a mirarla, ya que Jimin giró un poco su cuerpo en dirección a la que nos miraba, totalmente atento espero que hable y así lo hace.

—¿Tiene idea de la magnitud del problema que puede usted provocar con sus palabras?— Mire aquella escena con desagrado.

—¿Qué?....Así que escucho todo lo que le dije a Jimin...disculpe pero no le dije ninguna mentira, acá no es todo color de rosa eso lo sé pero si el está llorando es porque realmente le duele o le entristece algo, aún es un ser humano...— Dije con enojo

—Acá en este lugar no es nuestra manera de trabajar por favor se acompla a las reglas o será despedido, me retiro doctor Jeon Jungkook— Camine hacia la salida para irme a otro lugar, debo de informar esto al jefe del hospital.

Acaso escuche bien, eso fue una maldita amenaza, ¿Porqué estaba escuchando lo que le decía a Jimin, que derecho le da hacerlo?, ¿Seré despedido?, nadie me cuestiona mi manera de trabajar, ella misma me lo confirmo, ella se iba a acoplar a mis órdenes, no entiendo esa actitud suya, esto es demasiado extraño.

Siento como Jimin se separa suave de mi cuerpo y mis brazos, nada de brusquedad de parte de él, solo me quedo observando todo lo que hace, se levanta, se va a su cama, se acuesta y me da la espalda y no se atreve a mirarme, me di cuenta que a vuelto el Jimin frío y sin sentimientos, me dispongo a ponerme de pie y camino hacia la salida, pero su voz me detiene y volteo a mirarlo.

—No te preocupes por mi Jungkook, esto fue solo un error, olvida lo que pasó hace un momento, de todos modos mis ganas de matarte no se han ido....recuerda esto, camina con pies de plomo, no te hagas el ciego, ni el sordo, ahora vete y déjame en paz—

Me di la vuelta para irme de allí, aquellas últimas palabras fueron como un código Morse entre él y yo, las capte de inmediato, algo más esta pasando en este lugar y la curiosidad de descubrir que es me invade, "Camina con pies de plomo, no te hagas el ciego, ni el sordo". Acaso me dijo aquello con el fin de que me cuide las espaldas, nada de esto tiene algún sentido para mí. Debo de buscar la manera de saber más, desde hoy no confío en esa señora, su actitud cambiante me genera desconfianza y el único que puede aclarar todo esto es Park Jimin.

𝐓𝐡𝐞 𝐌𝐞𝐧𝐭𝐚𝐥 𝐇𝐨𝐬𝐩𝐢𝐭𝐚𝐥: ɹnoH ʞɹɐᗡ ǝɥ⊥© (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora