♡Eres tú, siempre eres tú. Si alguna vez voy a enamorarme sé que vas a ser tú.
Los años han cobrado factura y el pecado de mis errores jamás se iran. Fui un ciego y un estúpido, que al estar hundido en su trabajo no se dio cuenta que la persona a qu...
Esta historia tocará un tema un poco sensible, creo. Si en dado caso no te sientes a gusto leyendo esta trama te pido por favor que no sigas con la historia.
Ante todo tu comodidad, sin más que decir sigue leyendo 💖
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La fría brisa del aire alrededor de las calles genera sosiego y debido al clima las personas no les apetecía caminar por ellas, era mejor pasar el día dentro de sus casas que sufrir afuera congelados. No obstante, un hombre de cabellera rubia caminaba tranquilamente por esos rumbos como si no le afectara el aire helado, ya que hoy era uno de esos días donde el invierno penetraba con gran fuerza la ciudad y cada rincón del lugar era cubierto de vasta nieve. Mientras el hombre caminaba observó a una familia jugando con la nieve, se les veía muy contentos juntos.
Aquel hombre se detuvo, recuerdos vagos de su infancia golpearon muy duro su cerebro maldiciendo por lo bajo, no era el momento para recordar ese tipo de desgracias, él ya era un adulto y podía manejar por completo sus emociones.
Loid Forger, es el actual dueño de las famosas empresas WISE muy conocidas en la industria del entretenimiento. Cualquiera que no haya oído hablar de WISE tiene un serio problema con su entorno ya que su nombre resuena por todo el mundo. Eran merecedores de ese reconocimiento.
Loid a la edad de 34 es alguien muy influyente en la sociedad pero... ¿A qué costo? Él no era feliz, no recuerda la última vez que sonrió aparte del nacimiento de su hija que fue el día más feliz de su vida, Loid es un hombre que no le gusta mostrarse vulnerable ante el público, los errores de su pasado lo atormentan y por tal motivo ha guardado mucho dolor en su corazón.
—¿Por qué no mueren de una vez? —susurró casi inaudible cerrando ambos puños con fuerza, intentaba mantener la compostura mas no lo lograba. Loid se tranquilizó y un soplido salió de sus labios convirtiéndose automáticamente en neblina por las bajas temperaturas.
A Loid le dolía mucho la cabeza, los documentos, las reuniones y las conferencias lo hostigaban hasta el punto de no conciliar el sueño aunque por una parte estaba agradecido de olvidar sus problemas. Sin embargo, hace poco días le informaron sobre un problema en el que es partícipe su intimidad, es decir, su vida personal por lo que no puede hacer de la vista gorda. Y Ahora, tendría que ver de nuevo a ese ser tan miserable.
—Anya ha sufrido bastante a causa suya ¿Qué razón tendría de llevarla? ¿Para qué vuelva a sufrir? —exclamó frustrado. Su pequeña hija no merecía eso.
Todo el día pasó pensando en lo mismo, la finalidad de tomarse un día libre era para aliviar su mente y no pensar en sus problemas, pero terminó siendo todo lo contrario. No pudo encontrar paz por ningún lado así que no tuvo otra opción que regresar caminando al trabajo, de todos modos no le importaba, igual necesitaba entrevistar a las nuevas asistentes ya que la anterior fue despedida por un intento de seducirlo, aunque no es la primera vez que sucede a él le parece molesto y cansado lidiar con mujeres así, en busca de su dinero.
