"Heroes" personas que arriesgaban sus vidas para proteger la de los demás.
Un término lleno de puras esperanzas y fe.
Pero muy pocos conocen el otro lado de la moneda.
Muy pocos habían Sido manchados por aquella gran sobra oscura tras sus capas y so...
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El edificio central de seguros Itsuka era conocido por ser la sede más reconocida y con mejor desempeño en todo Japón siendo de caracteres confiable y comprensivo hacía sus clientes. El gran hombre detrás aquella empresa era Arata Itsuka un gran vicionario y hombre de confianza.
Sus labios se curvaron con diversión cínica mientras observaba desde aquel auto cómo aquel edificio repleto de cristales y lleno de iluminación se mostraba imponente y pensar que todo aquel lujo y renombre estaba bajo la tumba de cientos de personas muertas por su extorsión o casos peores.
Su mirada brillo cuando su creatividad dibujo una imagen tan inusual y deléitate que le hizo vibrar la piel, el imaginar cómo aquel edificio en un lienzo dibujado tan sobre saliente y brillante mientras las cabezas de las personas manchaban los hermosos ventanales. El imaginar el goteo silencioso de la sangre por las tuberías del drenaje mientras los tenues faroles daban luz a las calles le fueron aun más estremecedores.
Contemplar la enferma belleza
Deslizarse
Saborearla
Tragarla
No pudo evitar reír y mostrar una sonrisa embobada, luego de aquello tendría que encerrarse en su estudio hasta terminar aquella imagen tan emocionante.
- Estamos en nuestras posiciones, Lider- La voz del hombre que conducía el auto la hizo salir de su ensoñación y suspiro mientras terminaba de alistar sus armas en la cadera.
Haciendo una lista mental de todo lo que iba a necesitar para su debut como lo que sea ella.
Si
Porque si bien le encantaba ver la sangre correr.
La desesperación de las personas.
Oír como sus corazones corren rápidamente.
Le encantaba hacerlos sus juguetes.
Ver cómo la cuenca de sus ojos se desbordaban por el miedo era lo más placentero.
Una corriente eléctrica la recorría y no podía evitar querer mezclar su aroma de café y pólvora en la fragancia metálica de aquel líquido rojo y vital.
Sin embargo, su odio iba hacia todos aquellos que alargaban sus manos desde las calles oscuras para arruinar vidas.
Su odio iría dirigido a todas aquellas personas que movían el bajo mundo.
Su odio iba jugueteando hacía aquellas cabezas.
Los vería cagarse en su miseria y ella sería quien cortará cada parte de sus ser.
Porque ser una perra para este mundo era uno de sus mayores placeres.
- ¿Prepararon los fuegos artificiales?- sonrío esperando una afirmativa que no le tardo en llegar, Quizás le costará alcanzar el perdón de Díos pero poco le importaba, ella acabaría y arrasaría con cada puto infeliz que se había atrevido a joderla.
Sin previo aviso bajo del auto y se dirigió hacía las grandes puertas de cristal que daban la bienvenida hacía la empresa de seguros Itsuka, pudiendo disfrutar del desconcierto que se observaban por los transitantes al verla: miedo, confusión e intriga, sin duda una de las mejores expresiones del ser humano.
Podía oír sobre las bocinas de la calle como sus tacones repiqueteaban de manera llamativa pero una dulce voz la atrapó en medio del camino, su corazón alegro su ritmo al observar a una madre y su hija mirandola, en los ojos de la mujer había desconfianza y temor mientras la mirada de su descendiente era todo lo contrario, la ardiente curiosidad y asombro tintineaban alegremente en ella.
La inocencia de aquella niña le dejo un sabor amargo mientas el ácido de su estómago le quemaba la garganta.
Pequeños angeles.
Puros, llenos de amor y con una curiosidad insaciable.
Y aún así habían mostruos en callejones oscuros que se dedicaban a arratrar aquellas pequeñas alas.
Cortando las y marcando su piel.
Apretó su mandíbula.
Debía seguir, debía caminar y hundirse.
Su piel se erizo al pasar por aquellas puertas de cristal.
Luego de eso, ya no podría parar.
Tendría que arder y arder hasta que todo se consuma.
Hundirse hasta ya no respirar.
Llenar sus pulmones de sangre.
Las miradas desconfiadas y desconcertadas.
La tensión en el aire que casi podría asfixiarlos.
Las respiraciones irregulares.
Y
¡POOOOW!
El primer disparo salió de su arma
Ya no había retorno
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¡Hola!
Buenas noches, ¿qué tal todo? Primero que nada esta semana estuve explotando principalmente porque me voy a mudar pero eso no me detendrá principalmente porque tengo mucho avanzado y amo todo lo que estoy desarrollando.
Y sé que es algo corto pero lo sentía algo redundante si agregaba algo más. Espero que les haya gustado y les doy las gracias por apoyarme en mis proyectos. La verdad es que cada vez que veo las estrellitas y los comentarios me emociono mucho.
Acepto sugerencias, teorías y actas de muerte. Skskksks
