PRÓLOGO

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Cien años han pasado desde que la Segunda Gran Guerra sucedió, la cual, a pesar que pocas las personas de aquella época que siguen con vida, día a día es recordada como si hubiese sucedido el día anterior. A causa de todo lo que este conflicto provocó, la humanidad se vio obligada a usar un sistema económico, social y político antiguo, el cual aplastó por completo a las otras dos ideologías que antes predominaban en el mundo, que ahora eran despreciadas y marginadas por todos, dejándolas en el olvido absoluto junto a las pocas personas que aun las defendían.

El tiempo, como un famoso físico que había vivido hace más de 400 años, si es que en realidad no era aun más atrás en el pasado, dijo: "El tiempo es relativo". 

Tal cual como aquel hombre lo pronunció, en el presente era un hecho para la vista de todos, puesto que este era usado únicamente a base de la rotación de la Tierra ante el sol y la luna, así como de los pocos relojes que quedaban y que ahora eran un lujo de la nueva burguesía, que suplantó a la anticuada que había dominado el mundo antes de que la anarquía reinara el mundo los primeros años después del conflicto que devastó al planeta, volviendo la mayoría de este inhabitable.

Sin embargo, desde la perspectiva de la gente del común, pocas cosas habían cambiado. La mayoría de las personas que habitaban las 7 grandes naciones (o en algunos casos, reinos o hasta imperios) vivían en calles des pavimentadas que exponían con aparente orgullo la tierra y el lodo que se llegaba a acumular por la lluvia que, afortunadamente, no llegaba a ser ácida la mayoría de casos. 

Las únicas personas que lograron tener el lujo de un sitio con paredes y techo (sin contar a las familias reales o a las del dictador) en las que pudieran descansar, eran los descendientes de los hombres y mujeres que lograron beneficiarse de la Segunda Gran Guerra, ya fuese a base del tráfico en el mercado negro de algo sumamente importante para los ejércitos de ese entonces o, en el caso más contemporáneo, ser parte de los muchachos y muchachas que ahora conformaban las armadas de cada estado o ayudaban a investigar y desarrollar armamento militar y arquitectónico (en especial uno industrial), ya fuesen tecnologías viejas que pudieran ser re-usadas gracias a su re-descubrimiento, como la creación de nuevas.

Bajo este contexto, es con el que comienza la historia de alguien que buscaría saber las respuestas de los enigmas que la guerra dejo.

¿Pero acaso será capaz de hacerlo?







Cubierto por las frías brizas que el invierno ofrece durante finales de cada año, y resguardado por un tejado de un negocio que le cubría de la lluvia, un pequeño niño de una edad aproximada de 7 años, refugiaba su cuerpo con sus brazos que sostenían sus piernas, que se encontraban pegadas a su pecho y abdomen. Con sus ojos cristalinos provocados por el llanto de varias decenas de minutos pero que, aun dejaban ver el iris marrón que combinaba de manera espectacular con su cabello, observaba a todas las personas que transitaban por su alrededor, personas que no se inmutaban de su presencia, o simplemente ni se percataban de que ella.

Realmente no sabía porque se encontraba ahí, o porque sus padres simplemente desaparecieron un día para nunca volver, y que, unas cuantas semanas después, hombres siervos de su emperador (cosa que él no comprendió del todo, es especial el motivo de su llegada), tomaron el control de su hogar y lo echaron a la calle con tan solo la ropa que tenía puesta en esos momentos, ropa que era la misma que había estado usando por las semanas venideras hasta el presente. 

A pesar de esto, él seguía pasando su tiempo cerca de su hogar con la esperanza de que sus padres volviesen o, tan siquiera, recibir una explicación de que es lo que había sucedido, creyendo que tal vez y no les había sucedido lo que temía.

Mientras sus pensamientos ignoraban sus alrededores, los seguidores del gobernador exclamaban por las calles mensajes propagandísticos, ya fuese para incentivar a que se uniesen a la guardia imperial o para que sirviesen al estado como parte de los científicos que buscaban recuperar la tecnología perdida. 

Sombras del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora