¿se puede saber que hice yo? parte 1

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actualidad

Pov: narradora

El frio viento de la noche movía sus oscuros y ligeramente rizados cabellos, las mejillas se le congelaban por los rastros de las lagrimas que había derramado hace unos instantes, con las rodillas todavía pegadas al pecho, el frio de las tejas del tejado se colaba por sus shorts y llegaba hasta sus huesos entumeciéndolos, miro al cielo, ni una sola estrella lo adornaba, tanto los pequeños astros como la luna estaban ocultos por las opacas nubes que, si se fijaba bien, se desplazaban lentamente por el viento, volvió a esconder la cabeza entre las piernas mientras mas lagrimas silenciosas bajaban de sus ojos hasta su barbilla cayendo de esta y mojando levemente su ropa, apretó los puños arrugando aun mas aquella pagina de periódico que había sido reimpresa en masa y que se encontraba por todas partes en aquel instituto.

Dos pisos mas abajo de donde se encontraba el virginiano, un rubio se encontraba sollozando en su cuarto, tanto el espejo principal del cuarto como alguno otro que corrió la misma suerte se encontraban rotos en pedas, y los puños del Leo se encontraban ligeramente dañados, lloraba, pero no por el dolor que sentía en ambas manos, sino por aquellas palabras que resonaban en su cabeza, las horribles burlas y carcajadas que ahora en sus mas profundos recuerdos se encontraban distorsionas volviéndolas terroríficas y dignas de pesadilla.

La música resonaba en el tercer piso de la casa, no era una alegre como siempre, era una canción triste, de esas escritas con el corazón roto y el papel mojado por las lagrimas, la canción resonaba en el altavoz mientras el signo de la balanza abrazaba fuertemente una almohada, desgastando sus cuerdas vocales hasta que no dieran mas, mientras cálidas lagrimas bajan por sus mejillas a millones y ahogaba sus gritos con la almohada.

Se despertó de golpe, se sentó sobre la cama con la respiración acelerada, se escuchaba la música desde el piso de arriba, dormir no ayudo pensó para si mismo recordando los sucesos de aquel día que intento suprimir durmiendo pero que reprodujeron una y otra vez mientras intentaba dormir en tranquilidad. Paso la mano por su pelo observando el desorden que creo nada mas haber entrado a su habitación, vio los caballetes tirados, las pinturas, lápices y rotuladores por el suelo, las hojas y lienzos por todas partes, soltó un suspiro de dolor mientras tapaba su cara con ambas manos y cayó hacia atrás volviendo a quedar tumbado en su cama mientras un horrible sentimiento volvía a aparecer en su pecho.

La música de la habitación continua sonaba ahogada, ya que se encontraba en el baño de su habitación, apoyado en la ducha aun vestido, con un nudo en la garganta y sin mas lagrimas que derramar, jugaba con sus manos mientras mordía su ya dañado labio inferior, el Geminiano pasaba con desesperación las manos por sus rubios rulos, como si aquello hacia que esos recuerdos desaparecieran, como si aquellas miradas de desprecio nunca hubieran sido dirigidas hacia su persona, como si las lagrimas que derramó, las heridas de su labio inferior y la rota puerta de su baño pudieran hacerlo retroceder 24 horas.

Miraba a su techo como la cosa mas interesante del mundo, seguía con la mirada aquellas pinceladas que hizo hace ya muchos años, miles de recuerdos felices llegaron a su mente, rápidamente la sacudió retirándolos de ella, quería tener la mente en blanco por tan solo unos minutos, era lo único que pedía, unos minutos de paz, sin el dolor en la garganta, los ojos con comezón y un terrible dolor en el corazón donde agarraba con fuerza aquella sudadera, puso su mano en la boca queriendo tapar sus sollozos, sabia que no molestaría a nadie, es mas podría gritar con todo lo que le queda de energías que el resto no le reclamaría, pero no quería escucharse el alegre piscis no va ha llorar se repetía una y otra vez con hipocresía mientras finas lagrimas caían por los lados de su cabeza llegando al suelo donde se encontraba tumbado

-Menos mal que estas aquí virgo ayúdame con esto, al menos se te dará mejor que a mi - dijo un libra con la voz rota y afónica al recién nombrado que bajaba por las escaleras, la nariz roja y posiblemente uno o dos grados mas de temperatura de lo que debería tener, el mas bajito siguió al otro que portaba un pequeño botiquín en sus manos hasta la cocina, ahí en la encimera se encontraba un leo con la mirada perdida y los nudillos de las manos ensangrentadas, el mas bajo suspiro - hare lo que pueda, y tu tomate una pastilla para la garganta- el encargado de la enfermería en la casa, desde que las hermanas osa mayor y menor desaparecieron después de un mes de su llegada siempre fue Capricornio, pero nadie se atrevía a mencionarlo, ni a el ni al resto- tranquilo Virgo estoy bien- dijo con la voz rasposa y una falsa sonrisa -nadie en esta casa ahora mismo se encuentra bien Libra- dijo Cáncer llamando la atención de los otros tres que se giraron para ver como el de ojos azules abría la nevera, llevaba su pelo recogido en una pequeña coleta atrás con varios pelos sueltos.

Se acerco al Virginiano que envolvía con cuidado las manos de su amigo que ya había desinfectado y quitado los cachos de cristal, apoyo su cabeza en su hombro - virgo se que es mucho pedir pero me haces un chocolate caliente- dijo con la voz ahogada por la sudadera del menor -todos necesitamos uno, yo te ayudo- dijo Géminis apareciendo por la puerta con los ojos aun rojos como todos sus compañeros, el castaño oscuro asintió y termino de hacer su delicado trabajo.

Un silencio envolvía la habitación donde se encontraban los signos, cada uno metido en sus pensamientos, con una taza de chóclate con nubes y caramelo caliente entre sus manos -voy por piscis..- dijo Libra el cual su voz no mejoraba en lo absoluto, pero no hizo falta, ya que el pez apareció bajando las escaleras con una bolsa y una maleta en brazos- piscis que..- empezó Leo pero fue interrumpido por el castaño claro - me voy- la confusión en sus amigos le hizo explicarse- yo.. no puedo quedarme, cuando vuelvan yo no podre.. - empezó a explicarse- no volverán- dijo cortante Virgo sentado en la encimera, dio un sorbo a la taza- no le dejaremos entrar- dijo firme, Cáncer rio aquella era una risa rota- ¿y que te hace suponer que conseguiremos detenerlos?- todos miraron ahora Virgo- tu deja eso en mis manos-

Volvió a tocar el timbre de la casa, ninguno de estos idiotas trajo llaves y el no fue la excepción -jdr cuanto tardan me estoy congelando los huev..- sagitario fue interrumpido por una colleja perteneciente de escorpio, volvió a timbrar y la puerta principal fue abierta dejando ver a un Virgo con no muy buena cara- ¿Por qué tardasteis tanto, y virgo estas bien?- pregunto acuario esperando que el recién aparecido abriera la puerta que daba al jardín delantero para poder pasar a la casa, pero este no pensaba hacerlo - fuera- dijo con voz débil pero segura- ¿que?- pregunto Aries-ha dicho que os larguéis- apareció por su espada Géminis-por favor chicos, de que habláis, dejadnos pasar- se desespero Aries - No- dijo cáncer - esto es por lo del instituto- susurro Tauro aunque todos lo escucharon - SI, CLARO QUE ES POR ESO A SI QUE AHORA LARGAROS- apareció leo con las manos vendas ganándose miradas de preocupación, el leo fue detenido por Virgo, que con un mareo perceptible solo para los cinco de su alrededor dijo - adiós, nos vemos mañana en el instituto- una lágrima recorrió su mejilla petrificando aun mas a los que estaba al exterior, salieron de su trance cuando escucharon la puerta cerrase y se quedaron solos en aquella fría noche.

continuara.....

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AQUI HAY DRAMA

amo escribir drama, sorry no sorry

pues aquí nuevo cap, no se que mas decir que mazo gracias a todos, jamás pensé que llegaría a las 1k de vistas y muchas mas gracias a todos los que votáis y comentáis

nos leemos luego

Zodiac school(Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora