Beloved - HIATUS

Desesperación.

Su último plan por escapar fue un completo fracaso, la huelga de hambre por temor a volver a ser drogada terminó siendo contraproducente para sí misma. Sin alimento, su cuerpo se quedó sin energía, haciéndola que se rindiera antes de siquiera poder dar lucha por su libertad.

Cayó en la desesperación, actuó sin pensar.

Los días pasaban con más lentitud desde aquel día que cayó entre la espesa nieve tapizando Nanda Parbat. Mientras tanto, Raven continuaba capturada por un grupo de maniáticos que deseaban sacarle un heredo en contra de su voluntad.

No era tiempo para lloriquear por sus errores. No se daría por vencida tan fácilmente, necesitaba otro enfoque, un nuevo plan que la sacará de aquí.

Debía prepararse para un intento de escape; conocer cada esquina de Nanda Parbat, cada debilidad de sus captores y cualquier detalle que pudiera usar a su favor. Para lograrlo, Raven necesitaba jugar el mismo juego con el cual Damian la trajo hasta aquí: El engaño.

Pero, estando encerrada en esa habitación nunca lograría nada. Ella tendría que aparentar estar dispuesta a cooperar con Damian y su loca madre.

Inició su 'cambio' de actitud con pequeñeces como comer bocados de los alimentos que le llevaban a su habitación, usar la ropa que le entregaban y dejar de luchar cuando tomaban de ella muestras de su ADN.

Cooperaba con todo lo que le pedían, a excepción de procrear un heredero con el joven Al ghul de la manera tradicional. Honestamente, eso jamás ocurriría.

Así, poco a poco, su nuevo plan dió sus frutos.

Damian y Talia Al Ghul al verla tan dispuesta a cooperar, comenzaron a brindarle la confianza suficiente como para dejarla salir de esa maldita habitación. Ahora ella podía visitar la cocina para sus comidas o dar caminatas por ciertos lugares del castillo . Claro, siempre con la muy entusiasmada Lady Shiva siguiéndola a tiempo completo como una maldita sombra.

A Damian le deleitaba su nueva conducta, el ingenuo quizás ya creía que ella sufría del síndrome de Estocolmo. Como sí eso fuera a pasar. Pero, le convenía que él siguiera con esa mentalidad, así seria fácil manipularlo en el futuro para que le sacara esa pulsera mágica en su muñeca.

"Tu juguete luce terrible, Querido. ¿No estás cuidando de ella?"

"Se niega a comer. Quiero asegúrame de que coma lo suficiente."

Como cada noche, Lady Shiva fue a su habitación para acompañarla a tomar su cena. Vaya sorpresa se llevó cuando llegaron a un gran comedor donde se encontró con Damian Y Talia Al Ghul esperándola para la cena. Esta era la primera vez en la cual cenaba con compañía. Le desagrado de inmediato, pues todo el rato madre e hijo no paraban de hablar en un idioma que ella no entendía, como si no fuera obvio que el tema de conversación siempre se trataba de ella.

Raven se enfocó en el tintineó que la maldita pulsera en su muñeca hacia cada vez que trataba de partir el pollo en su plato con los cubiertos de papel que le entregaron, una tarea desesperante. Al parecer sus antiguos ataques la hacían un potencial peligro y ahora era incapaz de usar verdaderos cubiertos como una persona normal.

"Pierdes tu tiempo, ponle una sonda."

"No, esta es una oportunidad para pasar tiempo con ella."

Por reojo Raven notó como Damian le sonreirá del otro lado de la mesa antes de darle un bocado a su sopa. Su comida era diferente a la carne blanca en los platos de las damas. Vegetariano, fue uno de los primeros datos que aprendió sobre él, al parecer, aquella no había sido una mentira.