'Cause you hold me like a woman
In a way I've never felt before
And it makes me wanna hold on
And it makes me wanna be all yours
"¿Está perdida señorita?"
"Creo que es la primera vez en mi vida que estoy en el lugar correcto, sensei"
Y aquí me tienes, esperando a un puñado de imbéciles para causar problemas.
El plan era este, llamar la atención de posibles jóvenes reclutas con un súper video enseñando nuestras habilidades. El único problema que tengo ahora es que no puedo sacarme al sensei Lawrence de mi puta mente... bueno en este caso, mi mente de puta, porque los pensamientos que vienen a mi no son del todo puritanos.
Mi corazón se aceleraba a medida que los recuerdos del sueño de anoche invadían mi mente poco a poco... Casi hasta podía sentir sus manos recorriendo cada parte de mi cuerpo como si no hubiera un mañana... Podía sentir sus caricias calando en lo más profundo de mi alma... Sus besos quemando mi piel, arrasando con todo a su paso, incluyendo la poca cordura que me quedaba.
Lastimosamente Miguel llegó al lugar, acabando por completo con mi pequeña fantasía.
- ¿Estas lista?- preguntó frotándose las manos con un nerviosismo que se podía notar a leguas
-Mas que tu compañero- respondí guiñándole un ojo
-¿Y si todo se sale de control y terminamos arruinándolo todo?
-Probablemente el sensei te mataría y yo le ayudaría a esconder tu cuerpo- dije en broma, a lo que Miguel me observó como si estuviera loca y yo solté una sonora carcajada
No pudimos extender más la charla, ya que por fin hicieron acto de presencia nuestros invitados de honor
-Vaya, vaya, vaya pero miren a quienes tenemos aquí- vocifere en voz alta mientras salía de mi "escondite" con Miguel detrás de mi -Creo que hoy es nuestro día de suerte Miguel- voltee a ver con burla a mi amigo- después de todo no siempre podemos darnos el lujo de tener sacos de box de carne y hueso- mi voz se fue haciendo mas ronca a medida que terminaba la frase
-Para esto nos llamaste nerd? para que les demos una paliza a ti y a esta muñequita?- pregunta con burla mientras sus otros dos amigos ríen como idiotas- aunque, talvez podríamos golpearte a ti y hacer otra cosa con ella- las carcajadas pararon, siendo sustituidas con medias sonrisas, dando a entender lo que pasaba por sus asquerosas mentes
Antes de darles tiempo para decir o hacer algo más, me abalancé al idiota que me llamo "muñequita" para darle un puñetazo, el cual esquivo, así que le di una patada que impacto directamente en su cara dejándolo fuera de combate.
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Ahora solo quedaban sus otros dos amigos subnormales, que al ver como quedo su amigo, trataron de acorralarme siendo dos contra uno
