'Cause you hold me like a woman
In a way I've never felt before
And it makes me wanna hold on
And it makes me wanna be all yours
"¿Está perdida señorita?"
"Creo que es la primera vez en mi vida que estoy en el lugar correcto, sensei"
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La pequeña Hannah probó la fruta prohibida y le gusto tanto que haría cualquier cosa por conseguirla.
-Siéntate bien y come con la boca cerrada, ¿Cuántas veces te lo tendré que repetir?- la voz de la directora del orfanato se oía cada vez mas enojada, lo cual me irritaba de sobremanera.
-Perdón señorita Harmon- respondí en un susurro impotente mientras me enderezaba, cruzaba las piernas y comía decentemente para satisfacer a la ojiazul.
Quedé huérfana a los 10 años, después de eso permanecí de un lado a otro pasando de orfanato en orfanato hasta estar en donde estoy... en el "Valley Orphanage"... con la maldita María Teresa de Calcuta pisándome los talones, esperando a que haga algún movimiento en falso... Mucho estrés para alguien de apenas 17 años ¿no creen?...
-Señorita Harmon disculpe la interrupción pero acaba de llegar la señora interesada en el plan de adopción- Creo que la interrupción de Laila (la lame botas de Harmon) logro cortar la tensión que se había formado en el pequeño comedor donde practicaba mis "modales".
Aunque la señora Harmon aun tenga esperanzas de deshacerse de mi antes de tiempo, yo se que nadie quiere adoptar a chicas de 17, prefieren a bebes para criarlos con sus propios valores y para complacer sus deseos de crear una familia "desde cero"...JA! tendrá que esperar un año más, y no se lo voy a dejar fácil...
-Vuelve a tus actividades Hannah, retomaremos las lecciones cuando me desocupe- su voz se iba desvaneciendo en mis oídos mientras se alejaba a paso rápido por el pasillo.
Le brinde una sonrisa ladina a doña lame botas mientras me retiraba del comedor y me dirigía hacia la parte de atrás para fumar.
Di la primera calada, solté el humo y no pude evitar que pequeños fragmentos de mi niñez se infiltraran en mi mente como gusanos, tratando de esparcirse por todo mi cerebro, quebrándolo...quebrándome...
Los flashbacks llegan agresivamente a mi...
Fuego...
Gritos...
Humo...
Papá...
Mamá...
Hannah este mundo no tiene piedad de nadie, tu tampoco la tengas...corre, corre y no mires atrás, nunca mires atrás
-Hannah la señorita Harmon te necesita en su oficina para...- la voz de Margaret me saco de mi mar de pensamientos abruptamente, sobresaltándome...haciendo que vote el cigarro y la deje en el piso por una llave que llego a mi mente de manera rápida, por instinto.
-Oh carajo! lo siento mucho Margaret, deberías avisar antes de aparecer así de la nada- dije de manera apresurada mientras la ayudaba a levantarse.
Margaret es una chica bajita de tez clara, cabello negro azabache y unos preciosos ojos azules. Margaret es una de las mejores personas que he conocido en toda mi maldita vida, sin exagerar, es un maldito ángel...
Quisiera que sea mi mejor amiga...
si tuviera intención de tener amigas...
-No sabia que estaba viviendo con el mismísimo Daniel Larusso todo este tiempo-dijo Margaret de manera sarcástica pero amigable.
-Daniel quién?-pregunte cuando ambas emprendimos camino hacia la oficina de Harmon.
-No sabes quien es Daniel Larusso?, es el dueño de una de las inmobiliarias automotrices mas importantes de All Valley y uno de los mejores karatecas de la historia-Se notaba a leguas que lo admiraba.
-Hablas de el como si fuera un ángel Margaret- dije con algo de burla.
-Que?!?! no se de que hablas Hannah el esta casado y tiene 2 hijos-dijo mientras intentaba esconder sus sonrojo con su cabello.
-Jamás dije que estuvieras interesada en el de manera romántica Margaret- enserio era muy tierna cuando se ponía nerviosa.
-BUENO cambiando de tema, creo que te van a adoptar Hannah- canturreó la ultima parte.
En ese momento detuve mi andar, justo a 4 pasos de llegar a su oficina...
-Hannah tranquilízate, vamos, entremos.
Antes de darme cuenta estaba entrando a la oficina de Harmon totalmente desconcertada.
Harmon se percato de mi presencia y rápidamente se levanto de su asiento para presentarnos.
-Señorita Russell, le presento a la señora Moskowitz, su nueva tutora legal.
-Mucho gusto señora Moskowitz, mi nombre es Hannah Russell, seria un honor que usted sea mi tutor....
-Puedes llamarme mamá, cariño, no hay que tener tanta formalidad entre nosotras, después de todo yo ya te considero una hija- Me interrumpió con una sonrisa mientras me abrazaba.
