Bakugo x tú One shots

Una disculpa

Parte: 2/2

Pasaron unas semanas desde aquel día y todo volvió a la normalidad, o casi, pues todos comian juntos otra vez y tu molestabas a Katsuki, pero habia algo diferente, pues ahora el chico era muy paciente contigo, no te molestaba tanto como antes y no sabias por qué.

Un día llegaste a invadir la habitación del chico con la escusa de que te ayudara con la tarea pero en realidad solo querias joderlo un rato para que se enfade y, con suerte, acabar con su paciencia para que él volviera a ser contigo como antes.

- como mierda no le vas a entender a la tarea?! Eres tonta pero no crei que tanto - dijo y tú lo ignoraste completamente dejando tus cosas en el suelo y abriste su armario.
- prestame ropa, odio el uniforme - sin esperar a su respuesta tomaste una de sus camisetas (escuchaste como chasqueo la lengua de fondo) y te la pusiste de manera estratégica para que no se te viera nada, despues solo te quitaste la falda pues traias un short abajo. Esto ya habia pasado varias veces antes.
Como no eres muy femenina a comparación de otras chicas, facilmente podias ponerte la ropa de Katsuki sin que se notara que no era tuya.

Te sentaste en su cama y prendiste la consola del chico sin su permiso.
- no que querias hacer tarea? - te preguntó el rubio sin subir su tono de voz.
- no dijiste que estaba fácil? Despues de jugar la hacemos, si? O te da miedo que te parta el culo? - dijiste para provocarlo mientras le dabas un control.
- dame el mando principal, es mi consola - hiciste un puchero y se lo diste.

Para las demás personas eras una chica seria, para tus amigos eras buena persona, pero con Katsuki te comportabas diferente llegando hasta a ser infantil.

Despues de unas partidas quedaron empate pero él apagó la consola ya que era muy tarde y te obligó a hacer tu tarea mientras escuchaba música acostado en su cama.
Tu no tenias la intención de hacerla aún, querias divertirte un poco más así que te subiste a la cama te paraste poniendo los pies a sus costados y comenzaste a saltar mientras repetias una y otra vez su nombre.
- maldición! Que quieres! - dijo melesto quitandose un audifono.
- oh, te molesta? - seguiste saltando.
- o dejas de saltar o no te vuelvo a ayudar con tu tarea! - dijo y obedeciste pues eso significaba que te correria de su habitación y ya no lo podrias molestar un poco más.

Despues de rato.

- oye, Katsuki... Katsuki... Katsuki, Katsuki, Katsuki, Katsuki - el solo te ignoraba así que seguiste jasta que te contestó.
- joder! que?! - dijo ya al límite.
- hola - dijiste y te burlaste.
- Aaaaaaaah! - se tapó la cara con sus manos y trató de tranquilizarse.
- ...Katsuki, Katsuki, Katsuki, Katsuki.... Kacchan - dijiste para acabar con su paciencia.
- por una jodida mierda, que no me digas así! - se acercó amenazante a tí, apostabas a que te golpearia o te explotaria la cara, pero volvió a acostarse dejandote intacta.
Comensaste a pensar y llegaste a una conclusión. Te subiste a la cama y te pusiste al lado de sus piernas y lo miraste fijamente.
- Katsuki... ahora me tratas diferente por lo de aquella vez? - Preguntaste y él solo chasqueó la lengua y cerró los ojos. No habia dicho nada, pero te dió a entender que tenias la razón. Te sentias mal, culpable, pues todo este tiempo lo estubiste molestando demasiado y él no solo te estuvo soportando, también fue más paciente contigo, incluso más que cuando no eras tan molesta y todo por que no habia quedado conforme por lo "fácil" que lo perdonaste, así que seguia "pagando su deuda". Te inclinaste hacia él y lo abrazaste.

- lo siento... - susurraste.
- por que mierda te disculpas? - dijo y como aquella vez respondió a tu abrazo y esta vez se sonrojó un poco pero tu no lo notaste.
- ya no te voy a molestar tanto - dijiste y notaste como él se rio un poco por tu comentario así que tú también sonreiste.
Pasaron unos minutos y ahora eras tú la que estaba sonrojada, no era normal que se abrazaran y menos estando tú sobre él, en una cama, solos y por tanto tiempo. A pesar de eso te quedaste, pues también te gustaba estar así con él.

- ya hiciste tu tarea? - dijo el rubio ceniza.
- no... - dijiste la verdad, pues eras mala mintiendo.
- levantate y hazla - trató de mandarte pero no le hiciste caso.
- no... está facil, mañana en la mañana la hago - le dijiste.
- no que no le entendias? - te preguntó
- ... solo queria molestarte... - confesaste.
- idiota - se rio un poco.

Pasó utro rato y tú te quisite acomodar, apoyaste tu pierna izquierda y la derecha la pusite entre las piernas de él.
- no hagas eso - dijo el chico.
- que cosa? Esto? - dijiste en tono burlón y moviste tu pierna.
- que no lo hagas! Si lo vuelves a hacer no vuelvo a dejar que entres a mi habitación! - te amenazó.
- ok, ya tranquilo - dejaste de mover tu pierna y subiste tu cabeza, pasando de su pecho a su hombro/cuello y sentiste como todo su cuerpo se tensó, así que te acercaste aún más a su cuello para incomodarlo apropósito, y cambiaste la posición de tus manos, pasando de su espalda a la parte de atrás de sus hombros. Sentiste gran parte de su espalda y te pusite aún más nerviosa, pues hasta ahora habias notado lo físicamente atractivo que era tu amigo.

Trataste de tranquilizarte y despues sentiste como Katsuki ponia una de tus manos a la altura de tu cintura en tu espalda, ahora eras tú la que se tensó completamente al tacto y él lo notó, así que con uno de sus dedos tocó toda tu columna provocandote escalofrios y que te pusieras roja hasta las orejas. Notaste como él se burló un poco así que te armaste de valor y te levantaste sentandote sobre él con la cara completamente roja y el seño fruncido.
- mmh? - dijo el rubio extrañado.
Sin pensarlo, comensaste a besar a tu "amigo" y sentiste como se sobresaltó al momento, pero despues de unos segundos te tomó de la nuca, mordió tu labio y comenzó a jugar con tu lengua. Trataste de no quedarte atras y comenzaste a tocar su pecho arriba de la camiseta, bajaste tocando su abdomen y llegaste al final de su ropa y la alsaste, lo dejaste de besar unos momentos y le quitaste por completo la camiseta, obserbaste su cuerpo y viste como él puso su típica sonriza arrogante, que ahora te en vez de parecerte odiosa te pareció increiblemente sexy así volviste a besarlo mientras tocabas su cuerpo.

Ese día entraste a la habitación de Katsuki buscando verlo enfadado y saliste de ella casi sin poder caminar.

Fin

Buen día/tarde/noche