no sé que título ponerle

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Estabas caminando felíz de la vida por el jardín de la institución cuando depronto un chico rubio te atacó con el agua a presión de una manguera,. Tardaste en entender que sucedia, solo tratabas de que el chorro no te diera en el pecho directamente hasta que de pronto el chico cerró la llave de la manguera dejando de atacarte, pero estabas completamente empapada.
- que mierda te pasa?!, Kaminari! - dijiste enfadada, pero te enfadaste aún más cuando viste que el chico comenzó a sacar su celular para tomarte una foto y entendiste todo.
El idiota te mojó apropósito para mojar tu camiseta y que esta se transparentara, conociendolo, seguramente el enano pervertido también estaba involucrado. Usaste tu quirk (telequinesis) y mandaste a volar su celular antes de que tomara la foto, te acercaste y le diste una patada en la entrepierna. Ya estabas cansada de que hicieran sus estúpidas bromitas, el chico se tiró al suelo por el dolor y tu caminaste hacia el acensor atenta a que el enano no estubiera cerca. Lo llamaste y al abrirse te encontraste con el chico más eplosivo se la U.A.. Él te miro a la cara y luego hacia tus pechos, pero no te importó en lo más minimo y entraste al ascensor. Se cerraron las puertas y comenzaste a desabrochar tu camiseta frente al rubio sin pena alguna.
Acabaste con los botones y sacaste tus brazos sintiendo la intensa mirada del chico en tí, bueno, más bien en tus pechos que solo estaban cubiertos por tu sostén. Subiste la mirada y lo observaste a los ojos directamente y él hizo lo mismo, ambos se sostubieron la mirada por unos segundos hasta que sentiste que el ascensor habia llegado a su destino y en cualquier momento se abririan las puertas, así que rapidamente tomaste la sudadera del ojicarmín y te la pusiste, solo escuchaste que él chasqueo su lengua pero no hizo nada para impedirlo. La puerta se abrió y te diste la vuelta encontrandote con el pervertido de la clase y lo pateaste en la entrepierna como a su amigo, saliste y llegaste a tu habitación.

Una semana despues estabas justo enfrente de tu habitación con el rubio ceniza exigiendote "amablemente" su sudadera.

- joder!, tanto por una sudadera?! - dijiste enfadada y entraste a tu habitación. - no vas a entrar? Tranquilo no muerdo - dijiste con un tono juguetón - o tal vez si me lo pides pueda hacer una esepción... - dijiste con una sonriza travieza en tu rostro.
- solo dame la puta sudadera! - dijo enojado como siempre.
- joder... - dijiste en vos baja y comenzaste a buscar la sudadera, pero hiciste como que no la encontrabas para molestralo un poco más.
- eres una inútil! - dijo el chico enfadado y te empujó hacia atrás para buscar él mismo
- como se pue de ser tan imbécil y a la vez estar tan bueno... - dijiste para tí misma mientras obserbavas el trasero del chico y sus brazos, ya que tenia una playera de tirantes, sin disimular ni un poco.
El chico encontró la sudadera y se dispuso a irse pero tu cerraste la puerta de tu habitación
- que mierda quieres!- dijo enfadado.
- un "gracias" como mínimo - dijiste mientras te acercabas a él.
- un "gracias"? como "mínimo"?! Tu eres la que deberia de agradecer que aún no te he explotado el culo! - dijo acercandose para intimidarte pero eso contigo no funcionaba.
Te acercaste aún más hasta invadir un poco su espacio personal.
- quieres que te agradesca? Como quieres que te agradesca? - dijiste acercandote un poco más, sabias que el chico era dificil pero a pesar de eso no era inmune a sus hormonas de adolescente así que, cada vez que podias lo provocabas esperando algun día ver una reacción en él que no sea de enfado.
El chico solto un suspiro de enojo y se acercó aún más a ti y pusó una mano en tu cintura. No esperabas eso hací que te pusiste nerviosa al instante y él lo notó. Acercó su rostro al tuyó y tú cerraste los ojos sintiendo su respiración cada vez más cerca de tí. Despues notaste como sus labios rosaron los tuyos y comenzaste a sentir como tus mejillas comenzaban a arder. De la nada el chico se alejó.
- tal vez luego... - dijo con una media sonriza al ver tu rostro ruborizado por el simple acercamiento de su parte, comenzó a caminar dejandote en tu habitación con tus mejillas ardiendo y con ganas de besarlo la próxima vez que lo veas.

Fin

Buen día/trade/noche

Bakugo x tú One shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora