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Mientras Fred se encontraba con Angelina, Moon salía de la biblioteca pues había ido a dejar los libros que había utilizado para su última tarea, después de su última clase de defensa contra las artes oscuras se pasó toda la tarde haciendo la tarea con Hermione, Ron y Harry, al ser la última en terminar regresó ella sola a dejar los libros, caminaba sola por los pasillos cuando al dar vuelta en uno se encontró con Oliver.

–Hola pequeña Potter–.Saludo el chico amablemente mientras le dedicaba una bella sonrisa.

–Hola Wood–.Contestó Potter de la misma manera.

–¿Ibas algún lado?–.Cuestiono el chico.

–De hecho iba a la sala común–.

–Podríamos caminar juntos, si quieres claro–.Propuso Oliver mientras llevaba una de sus manos a su cuello.

–Me encantaría–.Respondió Moon con emoción.

Ambos chicos comenzaron a caminar por el pasillo con mucha tranquilidad, mientras hablaban de sus días y las clases que habían tenido, Moon sentía más que confianza hacia Oliver pues desde su llegada el le había enseñado mucho de lo que ahora sabía, poco a poco Oliver fue entrelazando sus dedos con los de Moon tal y como si fueran novios aunque sólo eran amigos, Moon no reclamo ni protesto de ninguna manera solo se dejó llevar, caminaron juntos por todo el castillo hasta que Oliver habló.

–Moon te gustaría... bueno no se como pedirte esto–.

–Solo dime, te escucho–.Ánimo Moon.

–¿Te gustaría salir a ver el atardecer
un rato?–.Propuso el chico con muchas timidez.

A pesar de la diferencia de edad Oliver había quedado flechado desde el día que vio por primera vez a Moon, ella representaba todo lo que Oliver quería, y no sólo por el físico, su forma de ser era realmente increíble y estaba más que enamorado de ella.

–Yo... Si quiero, vamos–.Contestó Potter con una sonrisa.

Ambos comenzaron a caminar en dirección al gran jardín hasta llegar a un punto donde el sol estaba por ocultarse, era una vista realmente increíble, los pequeños destellos del sol iluminaron la cara de Moon quien reía alegremente, fue entonces cuando Oliver la miró, su corazón latía al mil por hora, tan sólo verla feliz lo hacía feliz, la quería tanto, era algo que jamás había sentido, más que cariño era amor un amor completamente puro hacia ella, fue entonces cuando se le ocurrió una idea.

–Sube a mi espalda, hay un lugar que quiero mostrarte–.Dijo el chico mientras se ponía adelante de ella.

–¿Estas loco?–.Contestó Moon entre risas.–No subiré a tu espalda

–Vamos Potter o ¿Es que acaso tienes miedo?–.

–Para nada Wood–.Dijo Potter desafiante mientras subía a la espalda de Oliver.

Al instante Moon recordó la primera vez que había volado en una escoba con la ayuda de Oliver y poco a poco Oliver comenzó a caminar y después a correr con ella en su espalda, entre risas Moon se sostenía del cuello de el chico, podía sentir su aroma canela y escoba recién comprada, era un olor más que magnífico, Moon se abrazo más a el hasta que pararon en un punto no conocido para la chica, parecía estar lejos del castillo, el lugar estaba lleno de bellas flores de todos colores y adornado con miles de árboles de colores bellísimos.

–¿Donde... donde estamos?–.Cuestiono Moon con asombro mientras Oliver dejaba de sostener sus muslos para que pudiera bajar.–Es hermoso, de verdad es hermoso–.

–Lo encontré hace mucho, cuando recién acababa de llegar un día me perdí y termine aquí, nadie más lo sabe–.Dijo Oliver con una sonrisa mientras se sentaba en el césped.

Drivers license (George Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora